China mantiene un submarino de misiles balísticos con armas nucleares constantemente en el mar.
Según la valoración de los militares chinos, la flota china de seis submarinos lanzamisiles balísticos de la clase Jin realiza patrullas «casi continuas» desde la isla de Hainan hasta el Mar de China Meridional. Equipados con un nuevo misil balístico de mayor alcance, pueden alcanzar el territorio continental de Estados Unidos, según los analistas.
La nota del informe de 174 páginas llamó poco la atención cuando se publicó a finales de noviembre, pero muestra mejoras cruciales en las capacidades chinas, según cuatro agregados militares regionales familiarizados con las operaciones navales y otros cinco analistas de seguridad.
Aunque el acuerdo AUKUS permitirá a Australia disponer de sus primeros submarinos nucleares en las próximas dos décadas, las constantes patrullas de misiles balísticos chinos en el mar supondrán una carga adicional para los recursos de Estados Unidos y sus aliados, que intensificarán sus despliegues al estilo de la Guerra Fría.
«Vamos a querer que nuestros SSN intenten seguirlos… así que las exigencias adicionales para nuestros activos son claras», afirmó Christopher Twomey, experto en seguridad de la Escuela Naval de Postgrado de EE.UU. en California, hablando a título privado. SSN es la denominación estadounidense de un submarino de ataque de propulsión nuclear. «Pero la cuestión aquí es que la información -las patrullas casi continuas- ha cambiado tan rápidamente que no sabemos qué más ha cambiado».
Las nuevas patrullas implican mejoras en muchas áreas, como logística, mando y control, y armamento. También muestran cómo China empieza a operar sus submarinos de misiles balísticos de forma muy parecida a como lo han hecho durante décadas Estados Unidos, Rusia, Gran Bretaña y Francia, según afirman agregados militares, antiguos submarinistas y analistas de seguridad.
Sus «patrullas de disuasión» les permiten amenazar con un contraataque nuclear incluso si los misiles y sistemas terrestres son destruidos. Según la doctrina nuclear clásica, esto disuade al adversario de lanzar un ataque inicial.
Los submarinos chinos están siendo equipados con un misil de tercera generación, el JL-3, según declaró en marzo el General Anthony Cotton, comandante del Mando Estratégico de EEUU, en una audiencia en el Congreso.
Con un alcance estimado de más de 10.000 kilómetros (6.214 millas) y portador de múltiples ojivas, el JL-3 permite a China alcanzar por primera vez el territorio continental de Estados Unidos desde aguas costeras chinas, señala el informe del Pentágono.
Informes anteriores habían afirmado que no se esperaba el despliegue del JL-3 hasta que China lanzara sus submarinos de nueva generación Tipo-096 en los próximos años.
Según la Flota del Pacífico, la Armada estadounidense mantiene unas dos docenas de submarinos nucleares de ataque en todo el Pacífico, incluidos Guam y Hawai. En el marco de AUKUS, los submarinos nucleares estadounidenses y británicos se desplegarán desde Australia Occidental a partir de 2027.
Estos submarinos son el arma principal para cazar submarinos con misiles balísticos, respaldados por buques de superficie y aviones de vigilancia P-8 Poseidón. Estados Unidos también dispone de sensores en el fondo marino de las principales rutas marítimas para ayudar a detectar submarinos.
Timothy Wright, analista de defensa del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos de Londres, afirmó que las fuerzas estadounidenses probablemente podrían hacer frente a la situación actual, pero que tendrían que destinar más medios en los próximos 10 a 15 años, una vez que comiencen las patrullas furtivas de los Type-096.
La rápida expansión de las fuerzas nucleares chinas significa que los estrategas estadounidenses deberán enfrentarse por primera vez a dos «adversarios nucleares similares», además de Rusia, añadió.
«Esto será motivo de preocupación para Estados Unidos, ya que ampliará sus defensas y pondrá en peligro más objetivos, a los que habrá que hacer frente con capacidades convencionales y nucleares adicionales», afirmó.
AUTORIDAD DE MANDO
Durante años se ha pensado que la marina china tenía capacidad para realizar patrullas de disuasión, pero los problemas de mando, control y comunicaciones han ralentizado su despliegue, afirman los agregados militares y los analistas. Las comunicaciones son cruciales y complejas para los submarinos lanzamisiles balísticos, que deben permanecer ocultos como parte de su misión.
Los submarinos de la clase Jin, que se espera sean sustituidos por los Type-096 en la próxima década, son relativamente ruidosos y fáciles de rastrear, según los agregados militares.
«Algo relativo a la autoridad de mando también debe haber cambiado, pero no tenemos muy buenas oportunidades para hablar con los chinos sobre este tipo de cosas», dijo Twomey.
Los militares chinos han insistido en que la Comisión Militar Central, encabezada por el presidente Xi Jinping, es la única autoridad de mando nuclear.
Hans Kristensen, director del proyecto de información nuclear de la Federación de Científicos Estadounidenses, dijo que creía que las cuestiones de mando y comunicaciones seguían siendo un «trabajo en curso».
«Aunque es probable que China haya progresado en el establecimiento de un mando y control seguros y operativamente significativos entre la Comisión Militar Central y los SSBN, parece poco probable que la capacidad sea completa o esté necesariamente reforzada para la batalla», dijo, utilizando las letras de designación para un submarino nuclear de misiles balísticos.
Dos investigadores de un instituto de formación de la armada china en Nanjing advirtieron en una revista de guerra submarina de 2019 de la escasa organización y coordinación del mando entre las fuerzas submarinas. El documento también instaba a mejorar la capacidad de ataque nuclear lanzada por submarinos.
La Armada debe «reforzar los submarinos nucleares lanzadores de misiles balísticos que patrullan en el mar, a fin de garantizar que cuentan con los medios y capacidades para llevar a cabo operaciones de contraataque nuclear secundario cuando sea necesario», escribieron los investigadores.
BASTIÓN» DEL MAR DE CHINA MERIDIONAL
Con la llegada del misil JL-3, Kristensen y otros analistas esperan que los estrategas chinos mantengan sus submarinos con misiles balísticos en las aguas profundas del Mar de China Meridional -que China ha fortificado con una serie de bases- en lugar de arriesgarse a patrullar en el Pacífico Occidental.
Collin Koh, experto en seguridad de la Escuela de Estudios Internacionales S. Rajaratnam de Singapur, afirmó que China podría mantener sus submarinos con misiles balísticos en un «bastión» de aguas protegidas cerca de sus costas.
«Si yo fuera el planificador, querría mantener mis activos de disuasión estratégica lo más cerca posible de mí, y el Mar de China Meridional es perfecto para ello», afirmó Koh.
Se cree que Rusia mantiene la mayoría de sus 11 submarinos lanzamisiles balísticos en bastiones frente a sus costas árticas, mientras que los barcos estadounidenses, franceses y británicos se desplazan más ampliamente, según tres analistas.
Kristensen afirmó que el mayor número de submarinos chinos desplegados ha hecho que los ejércitos del Ejército Popular de Liberación y de Estados Unidos se «rocen» cada vez más, lo que aumenta las probabilidades de un conflicto accidental.
«Los estadounidenses, por supuesto, intentan asomarse a ese bastión y ver qué pueden hacer y qué necesitan hacer, de modo que ahí es donde puede aumentar la tensión y producirse un incidente», afirmó.
Greg Torode and Eduardo Baptista
Los submarinistas de la US Navy siempre fueron buenos vendiendo. De todos modos 6 submarinos y sólo uno de patrulla es mal ratio. Deberían estar los chinos cerca de 2 siempre en patrulla. Aún les queda. Y supongo que los SSN americanos deben estar esperando alrededor de Hainan a que salga ese SSBN como un niño espera Navidad.
La misma estrategia de «bastiones» de los soviéticos, mala cosa para los submarinos de la U.S. NAVY.
Por primera vez la disposición geográfica del mar de China, rodeada de islas y con accesos contados y fáciles de vigilar, juega a favor de China ya que esta vez son los barcos y submarinos de EE.UU. y sus aliados los que se verán obligados a cruzarlo si quieren ir por los SSBN Chinos.
De ahí la importancia para China de la toma de
Taiwán, menuda salida al océano abierto dispo-
nible.
Ya veremos si los yankees instalan en las bases
filipinas del artículo del otro dia equipos antisub-
marinos. Esas bases, que pueden cerrar canal de
Bashi, se van a convertir en un dolor de muelas
para la armada china.
Aunque no tenga que ver con el artículo, veo in-
reresante remarcar que Taiwán ve como sus alia-
dos del norte (Japón) y del sur (yankeelandia por
medio de esas bases filipinas) van reforzándose
en vistas a lo que pueda ocurrir.
Es que ahí está la gracia: si los misiles balisticos JL-3 pueden alcanzar los EE.UU. desde el mar de China ¡Los Jin no necesitan salir al oceano! Son los americanos los que tienen que entrar en la «piscina» china si quieren darle caza, atravesar el cordon de las islas que China ha tomado y buscarlo en aguas hostiles infestados de submarinos, patrulleras y aviones con bases a menos de dos horas de vuelo.
Esta vez la complicación lo es para los submarinistas de la U.S. Navy y cazar a estos submarinos es una de las misiones más difíciles al que se tendrán que enfrentar actualmente.
Si, pero desde ese mar creo que no tienen al al-
cance la costa atlántica de los yankees, así que
la disuasión no es completa. Los useños si tienen
a tiro la totalidad del territorio chino, esas cosas
si que importan.
En cuanto a ir a buscar a los submarinos chinos,
en esas circunstancias los yankees van a tirar de
UUV tipo Orca u otros que se van a diseñar. De
otra manera, esos bastiones, sin superioridad de
la fuerza aérea va a costar muchas bajas.
Muy buenos sus comentarios! Aportan dos opiniones que no son contrarias sino complementarias. Los JL-3 (cuando entren en servicio) estarían en condiciones de alcanzar el territorio estadounidense sin necesidad de salir de las aguas que estarían relativamente más controladas por China: el Mar Amarilo y el Mar de China Oriental y en teoría la USN debería arriesgarse a cazar a los SSBN chinos. Pero hay que tener en cuenta un aspecto: si se calienta el caldero, lo primero que van a hacer los noerteamericanos es situar los SSN en aguas surcoreanos o japonesas más cercanas a la acción o bien situar a sus SSN en situación de acecho. Los SSBN chinos son muy ruidosos y no pasarían desapercibidos. Esto emparejaría mucho las posibilidades de los SSN de EEUU.
Pero China confía en que la nueva clase Type 096 reducirá grandemente las emisiones sonoras, dificultando la tarea de los SSN enemigos. Puede que también naveguen acompañados de SSN propios. Pero en nuestra opinión, si hubiese guerra «caliente» sería China quien moviera primero las piezas. Por ello, cremos que bajo esas aguas se libra una guerra fría y silenciosa, de la que poco se menciona o sale a la luz, pero que ambos ya se conocen y China sabe que desde el inicio sus buques van a estar vigilados desde mucho antes, en un juego parecido al que se libraba en el Atlántico y los mares circundantes al océano Glacial Ártico durante los años de la URSS, entre ésta y la USN.
De haberla, la lucha de centrará muy probablemente en las aguas cercanas a China ya mencionadas. Siguiendo las ooiniones de Iskander, los SSBN chinos tiene muy pocas posibilidades de moverse libremente en otras aguas como no sean las propias, pues EEUU y sus aliados (UK y en el futuro Australia) guardarán muy bien los pasos a aguas profundas, incluyendo el Mar de China Meridional y tendrían muy pocas posibilidades de sobrevivir. De allí que China intente dotar a sus SLBM del mayor alcance posible.