La Fuerza Aérea de EE.UU. diseña los futuros hangares para los bombarderos furtivos B-21.
La Fuerza Aérea de EE.UU. ha celebrado esta semana un día virtual de la industria de los bombarderos de largo alcance B-21 para discutir los proyectos de construcción de los hangares para albergar los nuevos bombarderos sigilosos, conocidos como Raider, según un comunicado de la US Air Force.
El Centro de Ingeniería Civil de la Fuerza Aérea y el Cuerpo de Ingenieros del Ejército revisaron el miércoles con la Coalición de Asesoramiento Militar de Rapid City en Dakota del Sur los detalles y la programación, incluyendo los hangares de mantenimiento y las instalaciones de restauración de baja visibilidad, según se indica en el comunicado.
El B-21 está todavía a años de distancia con respecto a su activación. La Fuerza Aérea ha dicho que las entregas del bombardero, fabricado por Northrop Grumman, deberían comenzar a mediados de la década de 2020, pero ha tenido cuidado de no adelantar detalles para proteger su tecnología.
En 2019, el servicio anunció que la primera base operativa de los B-21 sería la Base de la Fuerza Aérea de Ellsworth, en Dakota del Sur, que también albergará la primera unidad de entrenamiento formal del bombardero furtivo.
Sin embargo, la base aérea de Dyess, en Texas, es la alternativa preferida del servicio. Se espera que la base de la Fuerza Aérea de Dyess y Whiteman, en Missouri, reciban los B-21 Raiders «cuando estén disponibles», indicó el servicio.
Cualquier construcción de instalaciones en Ellsworth y sus alrededores para el apoyo de los B-21 deberá esperar hasta que el servicio complete una declaración de impacto ambiental y tome una decisión final sobre la base, que se espera conocer en este año.
La Fuerza Aérea ha dicho que planea adquirir al menos 100 B-21 Raiders, completando su inventario de bombarderos hasta 175, incluyendo su flota de B-52 Stratofortress.
No obstante, el general Tim Ray, jefe del Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea, ha propuesto con frecuencia una fuerza de bombarderos de más de 200 aviones.
«Hemos dicho públicamente que creemos que necesitamos 220 bombarderos en total — 75 B-52 y el resto B-21, a largo plazo,» dijo Ray a la revista Air Force Magazine.
El bombardero pasó su revisión crítica de diseño en diciembre de 2018, un hito fundamental para el programa.
El B-21 Raider de Northrop Grumman jugará un papel vital en la seguridad nacional y la disuasión estratégica de Estados Unidos.
Oriana Pawlyk