La nueva base de la USAF en Níger comienza a funcionar de forma limitada.
La nueva base de operaciones de la Fuerza Aérea en el centro de Níger ha comenzado este mes sus primeras operaciones regulares con la llegada de un avión de transporte C-130 volando hasta las limitadas instalaciones de la base Agadez, según ha informado un portavoz de la Fuerza Aérea.
El ejército de Estados Unidos espera la aprobación del gobierno de Nigeria para comenzar las operaciones en la nueva base, han dicho a la Revista de la Fuerza Aérea funcionarios del Comando de África de EE.UU. La Autoridad de Aviación Civil de Nigeria, junto con su Fuerza Aérea y la USAF han llegado a un acuerdo para iniciar operaciones limitadas de «reglas de vuelo visual» (VFR) a partir del 1 de agosto. Dos días después un C-130J del 409º Grupo Expedicionario Aéreo ha aterrizado en la pista de la nueva base conjunta.
Los vuelos VFR (Visual Flight Rules) son parte de las evaluaciones del aeródromo y del desarrollo de procedimientos que deben realizarse antes de que una instalación comience a funcionar a pleno rendimiento, señala la Fuerza Aérea.
Los vehículos aéreos no tripulados MQ-9 Reaper se encuentran programados para iniciar sus misiones de vuelo en la Base Aérea 201, cerca de la aldea de Agadez, a finales de año.
«La Base Aérea 201 le da a Níger y a Estados Unidos una capacidad increíble en una región desafiante del mundo», ha declarado el Comandante de la USAFE, el general Jeff Harrigian, en un comunicado. «Esta pista de uso conjunto permite una mejor respuesta a los requerimientos de seguridad regional y proporciona acceso estratégico más flexible».
Un funcionario del Comando de África de Estados Unidos ha manifestado que la base servirá como centro de operaciones en la región. El 323º Escuadrón de Reconocimiento Expedicionario volará los Reapers (Segadores) desde las instalaciones de la base. La capacidad del MQ-9 para merodear en el cielo durante horas «nos da muchas buenas opciones» en la región, ha dicho a la revista Air Force.
La construcción de la base ha sido un proceso logístico complejo a largo plazo debido a su ubicación y a la falta de infraestructura que lo rodea. Los C-130 han estado volando para transportar suministros básicos para el personal aproximadamente una vez a la semana, incluyendo suministros de alimentos, repuestos y trabajadores. Los grandes materiales y equipos utilizados para construir la base llegaron por barco a un puerto en la costa occidental de África, y luego trasladados en camiones durante viajes de tres semanas desde el puerto hasta el lugar elegido para la construcción de la nueva base.
La Fuerza Aérea también tiene presencia en la Base Aérea 101 de Niger, cerca de la capital de Niamey. Juntas, las bases darán a la Fuerza Aérea una presencia grande y persistente de inteligencia, vigilancia y reconocimiento en un país que ha sido un foco de actividad extremista.
Estados Unidos tiene un contrato de arrendamiento de 10 años en la base, según AFRICOM.