Miembros de la OTAN presionan para aumentar el gasto de defensa en la Alianza.

Ante la guerra de Rusia en Ucrania, algunos miembros de la OTAN piden más gasto en defensa. Lituania afirma que el actual punto de referencia del 2% del PIB debería ser el mínimo. ¿Se enfrenta la OTAN a una nueva prueba de unidad?

Basta con mirar el mapa para darse cuenta de la difícil situación geopolítica de Lituania. Al este, el país báltico comparte una frontera de 680 kilómetros con Bielorrusia. Al suroeste, limita con el enclave ruso de Kaliningrado. «Al estar tan cerca de Rusia y Bielorrusia, tenemos que tomarnos en serio la defensa», indicó Zilvinas Tomkus, viceministro de Defensa lituano.

En 2023, el presupuesto de defensa nacional del país alcanzará el 2,52% de su producto interior bruto (PIB), según el gobierno. Pero Tomkus afirmó que Lituania está dispuesta a gastar aún más en la modernización de sus fuerzas armadas y su infraestructura militar. Uno de los ocho grupos de combate multinacionales de la OTAN tiene su base en su territorio. «Para nosotros, el 2% es una línea de fondo, no un techo», señaló Tomkus.

¿Quién está presionando para aumentar el gasto en la OTAN?

Junto con Polonia y el Reino Unido, Lituania lidera la presión dentro de la Alianza para que se acuerden objetivos de gasto más elevados. Si la OTAN se toma en serio la tarea de garantizar y mejorar su postura de defensa y disuasión, si pretende defender cada centímetro de su territorio, «es necesario aumentar el gasto en defensa», señaló Tomkus.

Actualmente, se espera que los miembros de la OTAN alcancen el punto de referencia de gastar al menos el 2% de su PIB en defensa para 2024. Ese objetivo se acordó en una cumbre celebrada en 2014 en Gales, justo después de que Rusia se anexionara la península ucraniana de Crimea, en el mar Negro.

«La discusión sobre el reparto de la carga fue más tóxica bajo el presidente Trump, pero es muy anterior a él y continuará», dijo Kristine Berzina, experta en seguridad europea del think tank German Marshall Fund.

¿Por qué aumenta el gasto la OTAN?

En la década de 1990, dijo, había una sensación de que: «ya no era necesario pagar la defensa. Y el gasto en defensa se redujo considerablemente. Pero la realidad es que ahora vivimos tiempos tan peligrosos -si no más- que durante la Guerra Fría. Y el gasto en defensa debería reflejarlo».

Berzina señaló el mal estado de las reservas y la preparación de muchos países de la OTAN, entre ellos Alemania. «Se trata de solucionar un problema que ha surgido en el sistema para poder ser más competitivos frente a Rusia y, potencialmente, frente a China en el futuro. Y eso requerirá mucha inversión», afirmó.

Sin embargo, mientras que Estados de primera línea como Lituania van a superar el 2% del PIB en su gasto militar, países como Bélgica y Alemania llevan años infrafinanciando sus fuerzas de defensa. Berzina dijo que esperaba que esto fuera «un conflicto aún mayor en el futuro».

La mayoría de los aliados de la OTAN aún no han alcanzado el objetivo de gasto existente: se espera que Alemania gaste un 1,44% en defensa para 2022, y Bélgica aspira a un 1,54% para 2030. Según diplomáticos, se considera que ambos países, así como Canadá, se oponen a acordar objetivos más estrictos ante la guerra de Rusia contra Ucrania. El tema figurará en el orden del día de la próxima reunión de ministros de Defensa de la OTAN, que se celebrará en Bruselas a mediados de febrero.

Comprometidos con el objetivo del 2

«Alemania sigue comprometida con el objetivo del 2% acordado en la Cumbre de Gales», declaró un portavoz del Ministerio de Defensa en Berlín. «Unos fondos suficientes y un techo en constante aumento son la clave para modernizar la Bundeswehr, permitiendo a Alemania ser un socio fiable a nivel internacional y poder asumir más responsabilidades.»

Sin embargo, a pesar del cambio radical en la política de seguridad alemana anunciado por el canciller Olaf Scholz el año pasado, Berlín no alcanzará el objetivo del 2% cada año, sino sólo una media de varios años, gracias a un fondo especial de 100.000 millones de euros aprobado por el Parlamento tras la invasión rusa de Ucrania.

¿Arriesga Alemania su papel de liderazgo en Europa?

El portavoz del Ministerio de Defensa no comentó específicamente el nuevo debate sobre el gasto, pero subrayó que «Alemania y EE.UU. son actualmente responsables de la mayor parte de la financiación conjunta de la OTAN, cada uno con un 16,34%». Este hecho poco conocido es invocado a menudo por los funcionarios alemanes para subrayar el valor de la contribución del país a la alianza a pesar de no haber alcanzado el objetivo de gasto para sus propias fuerzas armadas.

Pero no todos los observadores están convencidos. Hay una «continua decepción con Alemania», declaró Kristine Berzina, y los críticos se preguntan cuál será el futuro papel de Berlín en Europa. «En realidad, también supone un coste para cualquier posible posición de liderazgo que pueda asumir Alemania», afirmó.

Berzina espera que la «tremenda presión» sobre Alemania no haga sino aumentar. «Por supuesto, esto creará cierta tensión dentro de la alianza», afirmó. «Será muy difícil hacer que el 2% sea un suelo real. Pero creo que sería posible algún tipo de compromiso para no fracasar siempre tanto, como hicieron muchos países.»

Unidad en la OTAN a pesar de la «lucha desordenada»

Sin embargo, Berzina no espera que la cuestión amenace la unidad de la OTAN. «Lo que se acuerde y se presente al mundo al final será una posición común que proclamará la unidad. Pero será una lucha complicada llegar hasta ahí», afirmó.

Los aliados podrían mantener un debate difícil y desafiante sobre la cuestión, «pero al final, de alguna manera, normalmente consiguen llegar a un consenso, lo que es muy importante para la alianza», declaró el lituano Zilvinas Tomkus. Indicó que podría alcanzarse un acuerdo en la próxima cumbre ordinaria de la OTAN, que se celebrará en junio en la capital lituana, Vilna. «Ucrania», dijo, «fue una prueba para nuestra unidad», pero añadió que la alianza había superado hasta ahora la prueba con éxito.

Deutsche Welle