Para evitar una carrera armamentística con China, Estados Unidos necesita a Rusia.
A primera vista, las nuevas pruebas satelitales deberían dejarnos a todos boquiabiertos. China parece estar construyendo entre 100 y 200 silos para almacenar y potencialmente lanzar misiles intercontinentales con cabezas nucleares. Hasta ahora sólo sabíamos de unos 20 emplazamientos.
La deducción obvia es que China, bajo el mando del presidente Xi Jinping, está empeñada en construir su arsenal nuclear incluso más rápido de lo que se pensaba. El Pentágono de Estados Unidos parte de la base de que China, que se calcula que ya tiene entre 320 y 350 armas nucleares, duplicará su arsenal esta década. Dependiendo de las suposiciones sobre los misiles por silo y las ojivas por misil, la nueva información significa que el objetivo real podría ser no una duplicación sino una quintuplicación o más.
Esto situaría a China aproximadamente a la altura de las dos superpotencias nucleares actuales, EE.UU. y Rusia, que tienen cada una unas 1.600 armas nucleares desplegadas, es decir, listas para ser utilizadas, ya sea en la punta de un misil o cerca de un bombardero. (Ambos países tienen miles de ojivas más almacenadas).
Dado que Moscú y Pekín son amigos estos días -los ejércitos ruso y chino vuelven a realizar ejercicios conjuntos esta semana- el coco de Pekín sólo puede ser Washington. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha enmarcado el enfrentamiento geopolítico de nuestro tiempo como democracias por un lado y autocracias por el otro. Xi y el presidente ruso Vladimir Putin lo ven en gran medida de la misma manera, salvo que son ellos los que se enfrentan a un Occidente dirigido por Estados Unidos y que les intimida.
El horrible resultado parece ser que estamos en otra carrera armamentística nuclear. Al igual que Estados Unidos y la Unión Soviética llegaron al borde del abismo en la versión original, Estados Unidos y China pueden volver a hacerlo en la secuela. Si la crisis de los misiles en Cuba le pareció divertida, le encantará la repetición sobre Taiwán o el Mar de la China Meridional.
Afortunadamente, el significado de esos silos no tiene por qué ser demasiado ominoso. Las nuevas imágenes fueron captadas por satélites comerciales, y el Pentágono, con sus propios y más discretos pájaros en el espacio, casi seguro que ya conocía la situación. Demostró no entrar en pánico.
Una teoría es que China no tiene necesariamente la intención de llenar la mayoría de esos silos con misiles. Como señala James Acton, experto de la Fundación Carnegie para la Paz Internacional, es posible que Pekín los utilice como señuelos y que incluso traslade misiles entre los silos con la esperanza de que los estadounidenses nunca sepan dónde están las ojivas y, por tanto, dónde atacar.
Aun así, los silos son desconcertantes, porque muestran cómo ve Pekín su propia situación estratégica. Lo que más temen los chinos es un ataque preventivo estadounidense que pueda acabar con su propia capacidad de represalia. Los recientes avances de EE.UU. en tecnología defensiva agravan estos temores: si, después de ser atacada, China sólo tiene unos pocos misiles para contraatacar, los estadounidenses podrían ser capaces de derribarlos.
Por lo tanto, los chinos deben contemplar -recuérdese que se trata de teoría de juegos- un escenario en el que los estadounidenses, durante una escalada del conflicto, se sientan inmunes a un contragolpe y comiencen a ponderar un primer ataque. Para disuadir cualquier tentación de este tipo, Xi quiere asegurarse de tener suficientes misiles, lanzables desde suficientes lugares, y con suficientes ojivas en cada punta para confundir las contramedidas estadounidenses.
En términos más generales, la construcción confirma cómo se están endureciendo las mentes en esta contienda, que ha sido comparada con las que se produjeron entre Esparta y Atenas o entre la Alemania Imperial y Gran Bretaña. Los chinos están cada vez más convencidos de que algún tipo de conflicto con Estados Unidos es inevitable, y que necesitan armarse hasta los dientes para hacerse respetar. Por eso es poco probable que se unan a las conversaciones de desarme existentes, como el Nuevo START, el único tratado de control de armas que queda entre Estados Unidos y Rusia.
Todo esto significa que Biden debe pensar en grande para que las piezas se muevan. En este (y sólo en este) contexto, uno de sus predecesores, Richard Nixon, puede ser un modelo. Se dio cuenta de que la Unión Soviética y la China maoísta eran camaradas sólo sobre el papel, pero en realidad eran rivales en la práctica. Así que en 1972 hizo lo que parecía impensable y se reunió con Mao Zedong. El objetivo de Nixon era apartar a Pekín de Moscú para tener más influencia sobre este último. Fue un punto de inflexión en la Guerra Fría.
Del mismo modo, Biden debería darse cuenta de que las actuales protestas públicas de amorosa fraternidad antioccidental entre Putin y Xi enmascaran profundas animosidades e inseguridades. Además, los temores están desproporcionadamente del lado de Putin. Como argumenta Charles Kupchan, del Consejo de Relaciones Exteriores, la relación es demasiado obviamente asimétrica, con China en ascenso y Rusia estancada. Putin debe temer convertirse en el suplente de Xi.
Y, sin embargo, debemos reconocer que hay amenazas que trascienden la política y amenazan a nuestra humanidad común. Una pandemia es una, el cambio climático es otra. La guerra nuclear, por diseño o por accidente, es una tercera. Es hora de que los que están cerca de los botones rojos hablen.
Bloomberg
China casi no tiene nada (250) con respeto a Estados Unidos que tienen de 4.000 a 5.000 cabezas nucleares
Ahora quien amaneza a a quien ?
Bueno, que Taiwán, Corea del Sur y hasta Japón fabriquen cada uno unas 50 armas termonucleares de una mega tonelada cada una, tremendo sería el grito al cielo que pondria Rusia, China y la cuerda de zurdópatas en el mundo.
Los discursos imperialistas del nuevo emperador chino, Xi Jinping, dan mucho que pensar, citando: “El auge de China es irreversible y los que intenten frenarlo acabarán con sus cabezas golpeadas y ensangrentadas contra un gran muro de acero formado por 1.400 millones de chinos”, discurso nacionalista y combativo del presidente, Xi Jinping, durante la celebración de los 100 años del PCCh el 01 de julio pasado.
Además, descaradamente mintió al afirmar que, “China nunca ha oprimido ni subyugado a ningún país y, por la misma razón, no permitirá que la opriman o subyuguen a ella”. Descontando la opresión sino-comunista sobre su propio pueblo, a lo largo de la historia, China ha invadido a Vietnam (1407, 1788 y 1979, Corea (1636, 1951), Mongolia, Rusia (1969), el Tibet (1950) y Primera República del Turkestán Oriental (1949), anexando por la fuerza estas dos últimas naciones al territorio chino.
China tiene conflictos territoriales o fronterizos con todos los países y aguas marítimas que le colindan.
Si vas de santo, te va a rebotar y explotarte en la cara. Discursos como esos, con mejor o peor poesía, los hemos oído de todos, incluso de los EE. UU. ¿O no?
Con respecto a la parte que has citado, no veo nada objetable en el contenido, aunque sí en la prosa, que me repatea, al igual que me repatea el «America First» y otras expresiones de otros líderes, sean de donde sean. Lo que es innegable es que China, con sus más de mill millones de chinos, se merece ocupar un lugar en el mundo que se corresponda a su población, que es más de la séptima parte de la población mundial, si no me equivoco. Lo que no podemos pretender es que 300 millones de norteamericanos y 400 millones de europeos dominen el mundo, cuando juntos apenas son la mitad de la población china. Leyéndote, parece que eso es precisamente lo que quieres: «America First» y que los demás se joroben.
Normal que China no quiera eso. Estoy seguro de que tampoco lo quieren los indios para sus mas de mil millones de habitantes. Estoy seguro de que la India se habrá expresado de forma similar en algún momento, pero como son aliados, eso no te molesta.
El gusto de apoyar repetidamente a dictaduras que oprimen a su pueblo, encarcelan a los que piensan en forma diferente, masacran a 10.000 personas o mas en una plaza por solicitar aperturas democráticas en 1989 (sin que occidente hiciese nada), invadir y ocupar militarmente a sus vecinos, tratar de anexar de la forma que sea a la Republica de China (Taiwan) …y finalmente tratar de apoderarse de mares a miles de kms de sus costas, pasando por sobre resoluciones de la ONU y todos sus vecinos…y eso que «Demostenes» era defensor de la democracia.
Bravo. No tengo mucho más que añadir
El error de Estados Unidos ha sido permitir que una dictadura como China haya llegado a donde está. Es evidente su deseo imperialista, no solo en lo económico, también en lo militar. En la cárcel deberían estar los presidentes de Estados Unidos que durante décadas han permitido esto. Ahora esto solo se puede solucionar con una guerra, aunque sea destruyendo físicamente China como nación.
Oeo5, no sólo de EE. UU., nuestra decadente Europa también ha contribuido.
Curioso que se alabe la política de Nixon (¡Nixon, por Dios!) y se proponga imitarla, cuando precisamente se podría criticar la miopía de esa política que, en parte, también es responsable de que China ahora sea lo que es.
¿Pretenden repetir lo mismo con Rusia? ¿Qué se dirá entonces, cuando Rusia suba (¿más?) y diga algo así de sus más de cien millones de habitantes? ¿Rusia no eran los malos que habían invadido Crimea (con el argumento de que es un territorio ruso)? Wait! Ahora los chinos son los malos porque pretenden invadir Taiwan (con el argumento, reconocido por la ONU, de que es chino).
¡Vaya lío, señor Bloomberg! ¿No está esto escrito desde la perspectiva norteamericana, pensando exclusivamente en los intereses norteamericanos?
Realmente el odio anti USA sale por cada poro…pero le voy a informar que Taiwan es el heredero real y legal de la republica China creada en 1911 y que al perder la Guerra civil, se retiraron a dicha isla en 1949…que la ONU se haga el tonto no es raro, tomando en cuanta que la dirigen los Zurdos a nivel mundial. Taiwan es una DEMOCRACIA y China comunista una DICTADURA de la peor especie…