Ucrania entra en Lyman después de que Rusia se retira.

Las tropas ucranianas despejaron el domingo la ciudad de Lyman en la provincia de Donetsk después de que las tropas rusas se retiraran, mientras el presidente ruso Vladimir Putin enviaba los documentos para su anexión ilegal de cuatro provincias ucranianas a la Duma estatal para su ratificación.

El presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, en un comunicado del Ministerio de Defensa ucraniano, dijo que Lyman estaba «totalmente despejada de los ocupantes rusos» a las 12:30 horas del domingo.

El Ministerio de Defensa ruso anunció el sábado la retirada de las tropas rusas de Lyman a «líneas más ventajosas» para evitar la «amenaza de cerco», a pesar de que Putin había anunciado apenas un día antes que Rusia se anexionaría ilegalmente a Rusia cuatro regiones de Ucrania, incluida Donetsk.

A pesar de la retirada de las tropas, Putin persistió el domingo en su empeño de anexionar ilegalmente las regiones de Donetsk, Luhansk, Zaporizhzhia y Kherson.

Donetsk y Luhansk conforman la región más amplia del Donbás, que está en gran parte en manos de los separatistas apoyados por Rusia desde que esta se anexionó ilegalmente el territorio ucraniano de Crimea en 2014.

Putin presentó el domingo cuatro tratados para la adhesión de las «cuatro nuevas regiones a Rusia» a la Duma estatal, el órgano legislativo del país, dijo la agencia de medios estatal rusa TASS en un comunicado.

«Ratificar el tratado entre Rusia y la RPD sobre la adhesión de la República Popular de Donetsk a Rusia como nueva región, firmado en Moscú el 30 de septiembre de 2022», reza una de las entradas, según TASS.

Serguéi Lavrov, ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, y su adjunto, Yevgeny Ivanov, han sido designados por Putin como «representantes oficiales» para la ratificación de la anexión de los «cuatro nuevos territorios.»

Zelensky, en su discurso nocturno del sábado, elogió a quienes en todo el mundo han condenado los falsos referendos de Rusia para anexionarse las cuatro regiones.

«Me gustaría destacar especialmente la declaración del secretario general de la ONU, António Guterres. Dijo sin rodeos que Rusia viola los objetivos y principios de la ONU, la Carta de las Naciones Unidas y que los pseudo-referendos y el intento de anexión no tendrán ninguna fuerza legal», dijo Zelensky.

«Cuando estas palabras se escuchan al más alto nivel en la ONU, todo el mundo lo entiende. Y Rusia no tiene ese derecho de veto que pueda detener o cancelar esta comprensión del mundo».

En los últimos meses, los funcionarios ucranianos han intensificado sus críticas al estatus de Rusia como miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

Sergiy Kyslytsya, embajador permanente de Ucrania ante las Naciones Unidas, criticó el nombramiento de Rusia como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU en una entrevista con UPI en agosto.

«Rusia ha montado una farsa en Donbas. Una farsa absoluta, que ha querido presentar como un supuesto referéndum», dijo Zelensky en su discurso del sábado.

«Y ahora hay una bandera ucraniana. Durante esta semana, ha habido más banderas ucranianas en Donbas. Dentro de una semana habrá aún más». Zelensky añadió que la bandera ucraniana «ya está en Lyman».

El Ministerio de Defensa británico, que ha estado proporcionando actualizaciones de inteligencia a lo largo del curso de la guerra, dijo el domingo que Lyman «probablemente estaba siendo defendida por elementos de los Distritos Militares Occidental y Central de Rusia, así como por contingentes de reservistas movilizados voluntariamente.»

«La fuerza probablemente experimentó grandes bajas al retirarse por la única carretera de salida de la ciudad que sigue en manos rusas», dijo el Ministerio de Defensa británico.

Los funcionarios de inteligencia británicos señalaron que Lyman es estratégicamente importante porque comanda un cruce de carretera clave sobre el río Siversky Donets, «detrás del cual Rusia ha estado tratando de consolidar sus defensas.»

«La retirada de Rusia de Lyman también representa un importante revés político, dado que se encuentra dentro del óblast de Donetsk, una región que Rusia supuestamente pretendía ‘liberar’ y que ha intentado anexionar ilegalmente», dijo el Ministerio de Defensa británico.

«La retirada ha provocado una nueva oleada de críticas públicas a la cúpula militar rusa por parte de altos cargos. Las nuevas pérdidas de territorio en los territorios ilegalmente ocupados conducirán casi con toda seguridad a una intensificación de estas críticas públicas y aumentarán la presión sobre los altos mandos.»

Adam Schrader