Almirante de la Marina de EE.UU. advierte que ciudadanos rusos y chinos están intentando infiltrarse en bases militares.
El comandante de las Fuerzas de la Flota estadounidense, Daryl Caudle, expresó su preocupación por la frecuencia cada vez mayor con que ciudadanos extranjeros intentan acceder sin autorización a bases militares estadounidenses en una entrevista reciente con Fox News.
Según Caudle, estos intentos de infiltración se están produciendo «dos o tres veces por semana» sólo en las bases de la Marina, con más de 100 intentos por parte de ciudadanos chinos el año pasado. Pero no son sólo chinos, «esto es ruso, es chino, viene de todas estas naciones diferentes», dijo Caudle.
Los autores, que a menudo dicen ser turistas, han sido sorprendidos realizando actividades sospechosas, como bucear cerca de Cabo Cañaveral, deambular por zonas de lanzamiento de misiles en Nuevo México e incluso intentar entrar con el coche en bases militares de Virginia. Aunque la mayoría de estas personas son citadas y multadas por allanamiento de morada, los motivos subyacentes de sus acciones siguen sin estar claros.
La cuestión se ha complicado aún más por el aumento del 8.000% de ciudadanos chinos que cruzan la frontera sur en los últimos tres años, con más de 24.000 interceptados en el ejercicio actual.
Este aumento ha suscitado preocupación entre funcionarios como el representante Glenn Grothman, republicano de Wisconsin, que cree que los países extranjeros pueden estar aprovechando la actual situación fronteriza para recabar información sobre las bases militares estadounidenses.
En enero, la Armada se vio sacudida por la detención y condena del contramaestre Wenheng Zhao, que fue sorprendido espiando para China en la base naval de Ventura County, en California. Otro ciudadano naturalizado, Jinchao Wei, también fue detenido a bordo del USS Essex y se enfrenta a un juicio por espionaje en diciembre.
Aunque la embajada china en Washington DC ha rechazado estas acusaciones calificándolas de «invenciones malintencionadas», el creciente número de incidentes ha dado lugar a llamamientos para que se aumente la vigilancia y se reevalúen las actuales medidas de seguridad en las instalaciones militares estadounidenses.
Estas afirmaciones también pueden estar poniendo nerviosa a la población. Un soldado de Fort Liberty, en Carolina del Norte, disparó mortalmente a un hombre, al parecer de nacionalidad chechena, que supuestamente había entrado ilegalmente en su propiedad.
Según la oficina del sheriff del condado de Moore, el hombre, identificado como Ramzan Daraev, de 35 años y natural de Chicago, era subcontratista de Utilities One, pero no llevaba uniforme ni identificación, ni portaba equipo alguno en el momento del incidente. El soldado que disparó al hombre, al parecer miembro de la unidad de operaciones especiales de Fort Liberty, creía que Daraev estaba haciendo fotos a su familia.
«Estamos al corriente del incidente ocurrido en Cartago en el que se vio implicado un soldado del USASOC. Este incidente sigue bajo investigación. Por política, no hacemos comentarios sobre investigaciones activas para proteger la integridad del proceso. Apreciamos la dedicación del Departamento del Sheriff del Condado de Moore en su investigación», dijo Fort Liberty en un comunicado.
Dominic Yeatman
Tengo la impresión de que estos «moscardones» chinos que merodean alrededor de bases militares especiales son enviados por China. No es creible que tanto chino por iniciativa propia y curiosidad coincidan tan frecuentemente en zonas militares USA. «Invenciones malintencionadas» dice la embajada china, menudas urracas totalitarias.
Con decir que no estaban al corriente y que esto no iba con ellos el embajador chino lo tenía hecho, en cambio decidió hacer réplica con una acusación de falsedad con mala fe. Algo hay tras una respuesta tan reactiva.
Hace años que intentan infiltrarse o que quieren comprar a personas que trabajan dentro de las bases