Aviones de la OTAN despegan tres veces en un día sobre el Báltico.
En un ajetreado periodo de 24 horas, hoy se ha conocido que el pasado viernes 20 de septiembre, los Eurofighters italianos fueron utilizados tres veces en respuesta a posibles amenazas durante la Misión de Vigilancia Aérea de la OTAN en el Báltico.
Los cazas italianos, que operaban desde la Base Aérea de Šiauliai (Lituania), fueron llamados para interceptar y controlar aeronaves que no cumplían los procedimientos de seguridad habituales, como planes de vuelo incorrectos o inexistentes y pérdida de comunicación con el control del tráfico aéreo.
Estas operaciones formaban parte del compromiso permanente de la OTAN de mantener la seguridad del espacio aéreo sobre la región del Báltico.
La Task Force Air – Ala 36 de las Fuerzas Aéreas italianas ha efectuado 17 vuelos desde el 1 de agosto de 2024, siguiendo las instrucciones del Centro de Operaciones Aéreas Combinadas (CAOC) de la OTAN en Uedem (Alemania).
Los tres vuelos en un solo día reflejan el aumento de la actividad en la región, donde la OTAN se ha mantenido alerta para responder a posibles amenazas de aeronaves no identificadas o no conformes.
Un «scramble» se desencadena cuando una aeronave vuela sin un plan de vuelo aprobado o válido, no se comunica con las autoridades de control de tráfico aéreo pertinentes, u opera sin un código de control del transpondedor. Estas respuestas de emergencia forman parte de la misión más amplia de la OTAN de proteger su espacio aéreo y demuestran que la Alianza está preparada para hacer frente a cualquier posible violación o incidente del espacio aéreo.
La Misión de Vigilancia Aérea del Báltico de la OTAN lleva 20 años funcionando, y los países aliados se turnan para estacionar cazas en Lituania, Letonia y Estonia con el fin de mantener la seguridad aérea de la región.
Además de los Eurofighter italianos estacionados en Lituania, los Eurofighter alemanes operan desde Lielvarde (Letonia), y los F-18 Hornet españoles tienen su sede en la Base Aérea Mihail Kogalniceanu (Rumanía), proporcionando una presencia multinacional preparada para responder a cualquier amenaza.
La presencia de medios aéreos de la OTAN en la región constituye un importante elemento disuasorio y una demostración del compromiso de la Alianza con la defensa y seguridad de sus países miembros.
Los cazas italianos, alemanes y españoles han trabajado coordinadamente, demostrando agilidad y profesionalidad en sus respuestas ante el aumento de la actividad en los cielos del Báltico.
La misión de policía aérea de la OTAN sobre la región del Báltico es un acuerdo regional de policía aérea en tiempo de paz que ha implicado a 17 naciones aliadas que han desplegado sus cazas para salvaguardar los cielos del Mar Báltico.
Lisa West