Dos contratos para hacer aún más operativo el Airbus A400M
OCCAR ha firmado dos contratos con Airbus para mejorar las capacidades operativas del Airbus A400 y mantener una flota de 130 aviones con más de 200.000 horas de vuelo.
El avión de transporte Airbus A400M ha registrado más de 200.000 horas de vuelo desde que se entregó el primer avión a las Fuerzas Aéreas francesas en agosto de 2013. La flota en servicio con las distintas fuerzas armadas asciende ahora a 130 aviones, con empleos en diversos teatros de operaciones.
Claramente, el A400M está «probado en combate», y la retroalimentación de la experiencia acumulada ha llevado a Airbus y a la OCCAR (Organisation Conjoint de Coopération en matière d’Armement), que gestiona el A400M entre otras cosas, a lanzar dos programas para mejorar las capacidades del avión y su mantenimiento en condiciones operativas (MCO) bajo contrato.
Mejora de bloque 0: mejora de las capacidades operativas
Denominado «Block Upgrade 0», uno de los dos programas consiste en la instalación o mejora de diversos sistemas: gestión de vuelo, información táctica, sistema de aterrizaje por satélite, SATCOM de banda estrecha y Wifi. Todo ello conforme a los últimos requisitos de la OTAN. El contrato incluye el desarrollo, la certificación, la integración y los servicios de apoyo.
Airbus afirma que «la primera fase ya está en marcha y debería completarse a finales de 2026. Las fases posteriores, que incluyen el equipamiento de la flota y la formación, continuarán hasta el final de la década».
Mayor puesta en común del mantenimiento operativo
Los diversos sistemas «Block Upgrade 0» (lo que significa que habrá 1, 2, etc. a lo largo de la vida operativa del A400M) reducirán la carga de trabajo de la tripulación. Mientras que la primera parte del acuerdo marco entre Airbus y OCCAR «va más allá del contrato inicial», la segunda, que cubre los diversos servicios necesarios para mantener el A400M en condiciones operativas (MCO), «sustituye al contrato firmado en 2019».
Este contrato, conocido como «GSS3», cubre una serie de servicios comunes «utilizando recursos compartidos, teniendo en cuenta al mismo tiempo los requisitos específicos de cada nación. Este modelo basado en el rendimiento establece un marco de asociación basado en la puesta en común y el uso compartido, con indicadores de rendimiento claros para optimizar la disponibilidad de la flota y reducir los costes operativos».
«Despliegues globales como la misión de transporte aéreo de Kabul y el ejercicio Pacific Skies ilustran la creciente necesidad de interoperabilidad entre las naciones clientes», señala Jean-Brice Dumont, director de Air Power en Airbus Defence and Space.
Este deseo de mayor mutualización ha estado en la mente de los usuarios durante algún tiempo. «El primer nivel de cooperación es compartir las existencias de piezas de recambio. En el caso del A400M, lo hemos conseguido con los británicos y los españoles, por ejemplo. No siempre es fácil compartir con otras naciones. Sin embargo, es una fuente importante de ahorro y eficacia», subrayó Monique Legrand-Larroche, entonces directora del DMAé, en una entrevista que nos concedió en septiembre de 2022.
Gaétan Powis