El dron de combate Neuron de Dassault reanuda sus operaciones.
Después de una década de pruebas exitosas y un breve período de almacenamiento, el demostrador de aviones no tripulados de combate furtivo Neuron, desarrollado por Dassault Aviation, está listo para reanudar sus operaciones.
Esta decisión estratégica marca un paso crítico en el avance de las capacidades aéreas francesas, ya que el Ministerio de las Fuerzas Armadas se prepara para el despliegue de un futuro avión no tripulado furtivo que operará junto con el avión de combate Rafale en su configuración F5, previsto para principios de la década de 2030.
El Neuron, un banco de pruebas volador, demostró sus capacidades entre 2012 y 2022, completando 170 vuelos de prueba. Estos ensayos validaron tecnologías innovadoras, incluidas funciones avanzadas de sigilo, autonomía controlada e integración en entornos de comando conectados.
Actualmente almacenado en la base aérea 125 en Istres, el dron pronto será restaurado para una nueva serie de pruebas. Se espera que la Dirección General de Aprovisionamiento de Defensa (DGA) francesa otorgue a Dassault Aviation un contrato para reactivar el demostrador, reafirmando la posición de Francia entre los líderes mundiales en el desarrollo de drones de combate.
Desarrollado a través de una ambiciosa colaboración europea en la que participan seis países (Francia, Italia, Suecia, España, Grecia y Suiza), el programa Neuron es más que un programa tecnológico. Ha permitido a los equipos de ingeniería europeos mantener y mejorar su experiencia tecnológica avanzada.
Entre sus logros se incluyen ataques de precisión desde un compartimento de armas interno, evaluación del sigilo frente a amenazas de radar e infrarrojos y misiones autónomas aire-tierra. El programa también destaca la eficiencia de un modelo de gestión industrial innovador basado en la colaboración digital integrada entre socios europeos.
El regreso del Neuron coincide con un anuncio importante: el desarrollo de un dron de combate que complementará al Rafale F5, la futura versión del avión de combate insignia de Francia. Este dron, cuya puesta en servicio está prevista para 2033, incorporará tecnologías militares de última generación.
Basándose en los avances del Neuron, contará con capacidades de sigilo avanzadas, una estrecha colaboración con aeronaves tripuladas y un control autónomo con supervisión humana. Esta integración está diseñada para mejorar la ventaja tecnológica de las fuerzas francesas en futuros conflictos.
La estrategia de Francia la sitúa como un actor clave en la creciente competencia por la tecnología de los drones de combate. Si bien el Neuron sigue siendo un demostrador, sienta las bases para la soberanía industrial y operativa. Al combinar las capacidades de los drones autónomos con las plataformas pilotadas, esta iniciativa redefine las operaciones aéreas, haciéndolas más adaptables, reactivas y resilientes.
Este esfuerzo va más allá de la validación tecnológica. Al reactivar el Neuron y desarrollar un nuevo dron furtivo, Francia demuestra su visión de futuro para abordar las demandas de la guerra moderna.
Estas innovaciones proporcionan una ventaja inmediata en el dominio aéreo y, al mismo tiempo, establecen un marco para la próxima generación de sistemas integrados, en los que los drones y las aeronaves colaboran en enjambres para navegar en campos de batalla cada vez más complejos y digitalizados.
Esta ambición tecnológica también destaca las oportunidades para una cooperación europea más amplia para seguir siendo competitiva en el escenario mundial.
Cyril Cosmao
Ojalá tuviéramos la capacidad de fabricar un aparato de este tipo y añadirlo como herramienta de ataque a nuestros THIFOON en lo que hoy se conoce como nube