El ejército británico anuncia planes de electrificación de vehículos de combate.
El Ejército británico está avanzando hacia la electrificación de los vehículos de combate, según anunció la semana pasada en la feria Defence and Security Equipment International (DSEI). La electrificación, el proceso de reducción de la dependencia de los combustibles fósiles, es cada vez más frecuente en la vida civil, con la proliferación de la energía doméstica inteligente, los coches eléctricos y el transporte público limpio. Pero estas iniciativas aún no se han trasladado al ámbito militar.
Como parte de su visión del Soldado del Futuro, el enfoque de electrificación del campo de batalla anunciado en el DSEI establecerá cómo el Ejército, durante un período de 15 años, se centrará en un aumento del uso de baterías, energía sostenible y tecnologías de conducción eléctrica híbrida en toda su flota de vehículos.
A la cabeza de las iniciativas sostenibles del Ejército, la electrificación del campo de batalla aumentará la ventaja operativa y cambiará la forma de operar de las fuerzas terrestres en el futuro. Los vehículos eléctricos permitirán avances significativos en las capacidades del modo sigiloso con firmas térmicas y de ruido reducidas.
El paso a la electrificación de los vehículos se sustenta en el hecho de que, en el campo de batalla del futuro, las capacidades militares terrestres estarán cada vez más «hambrientas de energía» con la introducción de iniciativas como las nuevas armas, la protección activa y el aumento del procesamiento informático. El rendimiento y la eficacia de estas nuevas capacidades dependerán de la capacidad de alimentarlas, cargarlas y mantenerlas.
El coronel Simon Ridgway OBE, jefe Adjunto de Planes para la Capacidad de Maniobra en Tierra, dijo: «Este enfoque de la electrificación establecerá cómo el Ejército pretende aprovechar las oportunidades que ofrece la tecnología sostenible para las capacidades terrestres. Garantizará que la infraestructura eléctrica del Ejército esté preparada para satisfacer la demanda eléctrica requerida en el campo de batalla del futuro. El suministro de efectos necesita la energía adecuada, en el lugar adecuado y en el momento oportuno. El uso de vehículos híbridos facilitará que la energía llegue a donde tiene que llegar».
El ejército británico ya ha invertido 10 millones de libras en la instalación de propulsores eléctricos híbridos en los vehículos MAN SV, Jackal y Foxhound, cuyo rendimiento se está evaluando actualmente. Está previsto que se lleven a cabo pruebas con modelos de preproducción, incluyendo evaluaciones sobre cómo recargar completamente los sistemas eléctricos autónomos sin tripulación. Los vehículos híbridos se pondrán a disposición del Ejército para su uso en el entrenamiento y en las operaciones.
Alain Henry de Frahan