El ritmo de la guerra acorta la formación de las tropas ucranianas en la Unión Europea.

En el monitor, una hilera de drones emitía imágenes en directo desde una zona de guerra: la provincia rusa de Kursk, donde las fuerzas ucranianas combaten desde agosto. 

Sentado frente al monitor, un oficial ucraniano vigilaba las imágenes. Justo detrás de él, los oficiales se agrupaban en torno a un enorme mapa de papel, en el que las fuerzas ucranianas y rusas se extendían en largas líneas sinuosas.

La transmisión de los drones era real. La batalla en el mapa no lo era. El oficial que veía la transmisión no tenía soldados que controlar, ni tampoco los atareados oficiales que se agolpaban detrás de él y manejaban los ordenadores. 

En cambio, el entusiasta personal de la brigada ucraniana estaba concentrado en un ejercicio de entrenamiento, parte de un curso intensivo de 21 días impartido en Polonia como parte de la misión de la UE para entrenar al ejército de Ucrania.

Los drones se estaban incorporando al ejercicio ficticio, aunque los oficiales ucranianos no quisieron decir cómo, alegando razones de seguridad operativa.

A medida que la invasión rusa a gran escala de Ucrania entra en su tercer año, Ucrania necesita desesperadamente tropas experimentadas. La formación militar occidental, como la de Polonia, podría ser la respuesta.

Los oficiales occidentales dicen que su entrenamiento de alta calidad, que hace hincapié en la iniciativa, es una ventaja clave que sus ejércitos tienen sobre Rusia.

El personal polaco, los instructores ucranianos y los soldados ucranianos afirman que el esfuerzo está dando sus frutos. A petición de los instructores polacos, sólo se hace referencia a los soldados por su nacionalidad y ocupación para preservar su anonimato en medio de los esfuerzos de sabotaje rusos contra Polonia.

Sin embargo, no es tarea fácil luchar en una guerra existencial mientras se entrenan nuevas tropas, como se pudo comprobar durante una visita a Polonia a finales de agosto.

Con Kiev esforzándose por mantener una línea de frente de 600 millas frente a los asaltos rusos, los oficiales ucranianos y polacos dijeron que los soldados deben ser apresurados a través de ciclos de entrenamiento para llevarlos de vuelta al frente.

Mientras tanto, el sistema ucraniano de selección de soldados para el entrenamiento está plagado de carencias que mantienen a instructores y alumnos en una lucha constante por adaptarse.

La misión de la UE

Rusia ha perdido hasta 600.000 soldados, entre heridos y muertos. Esa cifra supera los efectivos terrestres del ejército ruso estimados al comienzo de la guerra -360.000 soldados- y es el mayor número de bajas que han sufrido los ejércitos de Moscú desde las pérdidas soviéticas en la Segunda Guerra Mundial.

Pero las pérdidas de Ucrania también han sido elevadas, con una cifra estimada de 80.000 muertos y 400.000 heridos, según informó el Wall Street Journal. Muchas unidades están agotadas, operando con menos tropas de las que necesitan y desesperadas por munición. Rusia, mientras tanto, está utilizando su superioridad en municiones y personal para romper las líneas ucranianas en zonas que antes eran seguras.

Estados Unidos y sus aliados de la OTAN han trabajado para reponer las pérdidas de Ucrania mediante el adiestramiento. Uno de los mayores esfuerzos es la Misión de Asistencia Militar de la UE (EUMAM) en Ucrania, que coordina los esfuerzos de los Estados miembros de la UE para entrenar a los soldados.

Desde una sala de conferencias en una base militar, donde la música alegre sonaba incongruentemente en los altavoces del pasillo, el personal polaco detalló una misión de gran alcance que está entrenando a un gran porcentaje del total de la UE. En 2023, el personal de EUMAM en Polonia formó a 10.528 soldados. Polonia aspira a formar a unos 12.000 en 2024, una quinta parte del objetivo global de la UE de 60.000.

La misión multinacional en Polonia imparte formación especializada, en la que médicos, zapadores, artilleros, tripulaciones de tanques y otros soldados especializados perfeccionan sus conocimientos o adquieren otros nuevos.

También imparte cursos de liderazgo, que incluyen formación para jefes de pelotón, suboficiales, oficiales de estado mayor de batallón y estado mayor de brigada. A veces los funcionarios occidentales consideran que la formación de suboficiales fue el ingrediente secreto del éxito de la defensa ucraniana al principio de la guerra. 

La misión EUMAM en Polonia también imparte formación colectiva para escuadrones, pelotones y compañías, en la que los soldados aprenden a trabajar entre sí y con otros tipos de unidades, como los morteros. La misión también empezó a impartir cursos de formación básica en agosto.

Hablando desde su oficina, el subcomandante polaco de la misión de adiestramiento declaró que Ucrania consideraba especialmente valioso aprender los métodos estándar de la OTAN para la evaluación de daños en combate y las relaciones cívico-militares, así como cursos especializados como guerra electrónica y formación médica de emergencia.

La parte polaca también tiene la oportunidad de ver la guerra moderna casi de primera mano. Las tropas ucranianas se entrenan en escenarios de combate reales, algunos de ellos extraídos de batallas en las que realmente lucharon. También llevan consigo drones, incluso armados.

Pero la desesperada necesidad ucraniana de más tropas distorsiona el adiestramiento de forma que merma su eficacia. 

La mayoría de los cursos duran sólo un mes, o un poco más, mucho menos que los varios meses que los ejércitos occidentales dedican a tipos similares de formación, según una diapositiva informativa. El adiestramiento colectivo para escuadrones, pelotones y compañías dura una semana cada uno.

Ucrania establece esos calendarios en función de sus necesidades, dijo el subcomandante de la misión polaca EUMAM.

Pero la UE no puede formar todas las capacidades necesarias en sólo un mes, dijo el comandante. En consecuencia, la formación debe centrarse en lo que los soldados «necesitan tener», dijo. «Si pudiéramos disponer de más tiempo, impartiríamos más tipos de formación, y sería más compleja».

Los programas para formar a soldados ucranianos como instructores que luego puedan trabajar en Ucrania en el marco de un programa denominado «formar a los formadores» también tienen dificultades en el conflicto de alta intensidad de Ucrania.

Ucrania utilizará a esos soldados para adiestramiento durante unos meses, y luego se verá obligada a enviarlos a la batalla, donde sus habilidades se pierden si mueren, dijo el subcomandante.

Sam Skove