El submarino nuclear francés Tourville regresa a Cherburgo para modificaciones técnicas imprevistas.
Según la información publicada por un medio francés, especializado en defensa el 17 de septiembre, el submarino nuclear de ataque francés Tourville ha regresado inesperadamente a Cherburgo para realizar ajustes técnicos, pocos días después de partir para realizar pruebas en el Atlántico.
El buque, construido por Naval Group, había zarpado de Cherburgo tras dos rondas de pruebas estivales, inicialmente en julio y de nuevo a principios de septiembre. Esta última fase de pruebas, que se había mantenido confidencial, tenía por objeto validar las capacidades operativas en aguas más profundas, más allá de lo que ofrece el canal de la Mancha.
En un principio, no estaba previsto que el Tourville regresara a Cherburgo, sino que debía proseguir su viaje hacia Tolón, su futuro puerto de amarre, uniéndose a sus predecesores, el Suffren y el Duguay-Trouin. Sin embargo, al igual que el Suffren —que tuvo que regresar para realizar ajustes similares en 2020—, el Tourville se encontró con problemas técnicos que le obligaron a regresar a Cherburgo el martes 17 de septiembre para realizar nuevos trabajos.
Sobre el submarino
El Tourville (S637) es el tercer submarino nuclear de ataque (SSN) de la clase Suffren, desarrollado en el marco del programa francés Barracuda. Forma parte de una flota destinada a sustituir a los viejos submarinos de la clase Rubis. El submarino fue botado por el Grupo Naval en julio de 2023 y comenzó las pruebas de mar en julio de 2024. Estas pruebas, conocidas como «Pruebas Alfa», siguieron a la puesta en servicio de su reactor nuclear a principios de 2024.
El Tourville está equipado con tecnología avanzada, incluidos misiles navales de crucero, torpedos pesados F21 y misiles antibuque Exocet SM39. También cuenta con sistemas diseñados para operaciones especiales, incluida una escotilla para buzos y la posibilidad de un refugio en cubierta seca para desplegar vehículos submarinos y fuerzas especiales.
En términos de tamaño y capacidades, el Tourville desplaza unas 5.200 toneladas cuando está sumergido, tiene una eslora de 99 metros y puede sumergirse a profundidades superiores a 350 metros. Está propulsado por un reactor nuclear que le proporciona una gran resistencia y autonomía operativa, lo que le permite permanecer en el mar durante largos periodos sin necesidad de repostar.
Timothée