Indra muestra las tecnologías que reforzarán la operatividad de los cazas españoles.

Indra ha mostrado las tecnologías digitales que permitirán al Ejército del Aire y del Espacio incrementar drásticamente el nivel de disponibilidad operativa de sus aeronaves, el control de sus operaciones y la eficiencia con la que realiza sus actividades de mantenimiento en las jornadas de demostración tecnológica Base Aérea Conectada, Sostenible e Inteligente (BACSI), que se están celebrando en Albacete del 18 al 20 de octubre.

El objetivo es preparar a las bases aéreas españolas para un escenario en el que la inteligencia artificial y los datos se convertirán en los factores clave para garantizar la máxima operatividad posible de las aeronaves al tiempo que se alarga su ciclo de vida. El director de Negocio de Posventa, Pelayo Alvarado, ha explicado que «la propuesta de Indra está plenamente alineada con la visión del Ejército del Aire y del Espacio de avanzar hacia bases en las que personas, herramientas y procesos estén completamente conectados y se agilice el trabajo, aplicando la inteligencia artificial para facilitar la planificación y la toma de decisiones y asegurando un uso óptimo de los recursos de una forma más respetuosa con el medio ambiente».

En este sentido, tomando el avión como activo central, Indra ha desarrollado un sistema de registro o PMDS (Portable Maintenance Data Store) que recoge parámetros de los sistemas del Eurofighter en vuelo.

En cuanto aterriza, los datos se transmiten de forma inalámbrica al sistema Sherpa, desarrollado por Indra de acuerdo con los requisitos del Ejército del Aire, que utiliza inteligencia artificial para detectar de forma predictiva posibles fallos. Esta información llega inmediatamente a los especialistas, que pueden acceder a ella directamente a través de sus smartwatches y tabletas junto a la pista.

Las averías, una vez confirmadas por el especialista, se transfieren automáticamente al sistema de mantenimiento Maesweb de las Armerías del Ejército del Aire y del Espacio, junto con las evidencias oportunas capturadas mediante un innovador sistema con gafas de realidad aumentada, de forma que toda la actividad de diagnóstico queda registrada y es compartida con los siguientes niveles de mantenimiento, evitando así la más mínima pérdida de conocimiento.

Toda la operación de mantenimiento está perfectamente sincronizada y apoyada por herramientas digitales en el hangar. Cada pieza, herramienta y mecánico estarán identificados y geolocalizados con precisión mediante etiquetas y rótulos electrónicos, gracias a un sistema de localización en tiempo real (RTLS) de alta precisión que facilita una mejor planificación de las tareas y un control más eficaz de las existencias y apoya el trabajo de los mecánicos permitiéndoles detectar si falta algún recurso.

Cada uno de los mecánicos contará con unas gafas Hololens de realidad aumentada que les proporcionarán información contextual sobre los sistemas a reparar y le darán acceso a la documentación técnica necesaria para guiarles. Además, con estas gafas podrán solicitar apoyo remoto a otros especialistas que verán lo mismo que el mecánico, una función especialmente útil en misiones internacionales.

El reto tecnológico que plantea el proyecto BACSI convierte a Indra en el mejor socio tecnológico posible. La compañía ha desarrollado algunos de los sistemas de aviónica clave para el Eurofighter y los F18. Además, ha desarrollado los bancos de pruebas automatizados que actualmente se utilizan para el mantenimiento de la aviónica de estos aviones. Sus profesionales también prestan apoyo en las armerías y talleres del Ejército del Aire y del Espacio.

Indra es una de las principales compañías globales de tecnología y consultoría y el socio tecnológico para las operaciones core business de sus clientes en todo el mundo. Es líder mundial en la provisión de soluciones propias en segmentos específicos de los mercados de transporte y defensa y una firma líder en transformación digital y tecnologías de la información en España y Latinoamérica a través de su filial Minsait. Su modelo de negocio se basa en una completa gama de productos propios, con un enfoque end-to-end de alto valor y con un alto componente de innovación. En el ejercicio 2022, Indra alcanzó unas ventas de 3.851 millones de euros, con casi 57.000 empleados, presencia local en 46 países y operaciones de negocio en más de 140 países.

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