Irán se dispone a suministrar misiles balísticos a Rusia: nueva escalada en el conflicto ucraniano.
Mientras Irán se prepara para suministrar misiles balísticos a Rusia, algo que podría ocurrir «en cuestión de días», crece la preocupación entre los aliados de Ucrania, algunos de los cuales aún no han cumplido las promesas realizadas en la cumbre de la OTAN celebrada en Washington el pasado mes de julio. Esta posible entrega, de la que informó Bloomberg ayer 2 de septiembre, podría marcar una nueva escalada en el conflicto ucraniano y provocar una rápida respuesta de los aliados de Kiev.
Irán ya ha suministrado a Rusia material militar, incluidos drones Shahed-136/131, que se han utilizado en ataques contra infraestructuras energéticas y civiles en Ucrania. Sin embargo, la perspectiva de entregar misiles balísticos, que tienen mayor velocidad y capacidad de carga que los misiles de crucero o los drones, suscita mayor preocupación, sobre todo ahora que se acerca el invierno.
El avión no tripulado Shahed-136, desarrollado por Irán, es un «kamikaze» o avión no tripulado de munición merodeadora diseñado para ataques de largo alcance contra objetivos estratégicos. Con un alcance de varios cientos de kilómetros, este dron puede transportar una importante carga explosiva, a menudo de entre 30 y 50 kilogramos.
El Shahed-136 está diseñado para volar a baja altura, lo que dificulta su detección por radares y sistemas de defensa antiaérea. Su sistema de guiado, aunque sencillo, es lo bastante preciso como para alcanzar objetivos fijos, como infraestructuras críticas o posiciones militares. Debido a su bajo coste de producción, el Shahed-136 se utiliza en grandes cantidades, lo que permite saturar las defensas enemigas y aumentar las posibilidades de éxito de los ataques.
El desarrollo de aviones no tripulados Shahed-136 por parte de Irán también ha adquirido una dimensión internacional, ya que su producción se lleva a cabo en empresas rusas. Esta cooperación permite a Moscú beneficiarse directamente de la experiencia iraní en tecnología de aviones no tripulados, al tiempo que reduce su dependencia de las importaciones directas de armas.
Se han creado instalaciones rusas para ensamblar estos drones con componentes tanto locales como importados, aumentando así la capacidad de producción y permitiendo un despliegue más rápido en el campo de batalla ucraniano. Esta asociación no sólo refuerza los lazos militares entre Irán y Rusia, sino que también mejora la capacidad de Rusia para llevar a cabo operaciones prolongadas contra Ucrania, manteniendo una presión constante sobre la infraestructura ucraniana.
El nuevo presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, ha reafirmado los lazos estratégicos entre Teherán y Moscú, calificando a Rusia de «valioso vecino y aliado estratégico», subrayando el compromiso de su administración de profundizar las relaciones con el Kremlin. Aunque los detalles concretos sobre el tipo, la cantidad y el calendario de las entregas de misiles siguen sin estar claros, un funcionario anónimo indicó a Bloomberg que los envíos podrían comenzar pronto.
En respuesta a esta amenaza, Estados Unidos y otros aliados de la OTAN han lanzado múltiples advertencias a Teherán, realizando esfuerzos diplomáticos para impedir la transferencia. Sin embargo, si Irán procede a la entrega de estos misiles balísticos, podría enfrentarse a nuevas sanciones por parte de las naciones occidentales. Dadas las ya severas sanciones en vigor contra Teherán, la eficacia de tales medidas sigue siendo incierta.
Las sanciones impuestas por el G7 a Irán y Corea del Norte por su apoyo militar a Rusia, junto con los esfuerzos por endurecer las restricciones a las empresas de China y otros países que suministran a Rusia componentes necesarios para la fabricación de armas, no han impedido que continúen estas transferencias. Además, la economía de guerra de Rusia ha demostrado su capacidad para producir misiles y munición a un ritmo que a menudo supera la capacidad de los aliados de Ucrania para suministrar armas.
El reciente ataque contra Kiev, perpetrado con misiles Iskander-M de fabricación rusa y modelos KN-23 norcoreanos, pone de manifiesto la creciente dependencia de Moscú de la ayuda militar extranjera, incluida la procedente de Irán. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, sigue instando a los aliados de Ucrania a que aumenten las entregas de armas y levanten las restricciones a los ataques profundos en territorio ruso, argumentando que dichos ataques son necesarios para atacar aeródromos y lanzaderas utilizados contra ciudades e infraestructuras ucranianas.
En agosto, Reuters informó de que Irán está preparando la entrega de cientos de misiles balísticos Fath-360 a Rusia para su uso en Ucrania, citando fuentes de inteligencia europeas. En respuesta a este apoyo militar, la Unión Europea amplió en julio las sanciones contra Irán hasta el 27 de julio de 2025, dirigidas contra 12 personas y nueve entidades implicadas en el apoyo militar a Rusia y el respaldo a grupos armados en Oriente Próximo, con congelación de activos y prohibición de viajar.
El misil balístico Fath-360 es un misil de corto alcance desarrollado por Irán, diseñado para lanzar ataques precisos contra objetivos militares estratégicos. Con un alcance de entre 80 y 100 kilómetros, el Fath-360 puede transportar una importante carga explosiva, a menudo de varios cientos de kilogramos, lo que lo hace eficaz contra objetivos fuertemente fortificados. Está equipado con avanzados sistemas de guiado que le permiten mantener una gran precisión incluso al máximo alcance.
Esta nueva alianza militar entre Irán y Rusia en el contexto de la guerra en Ucrania plantea interrogantes sobre la eficacia de las sanciones internacionales para frenar el aumento de las capacidades militares rusas, ya que las promesas hechas por algunos de los aliados de Ucrania en la cumbre de la OTAN siguen sin cumplirse.
Rudis04ARG
Missiles balisticos que van a lanzar sobre ciudades, sobre civiles indefensos.
Y ademas como se ve en las fotos, van ocultos en camiones civiles y tapados con lonas de colores civiles.
Esta es su truco «tirar la piedra y esconder la mano»
y de cuentos niños y mujeres asesinadas son responsables.
Si uno de estos impacta en territorio ucraniano no veo por qué no los ATACMCS pueden golpear en territorio ruso.
Que la OTAN no den tantas concesiones a estos asesinos y que se dejen de tantas lineas rojas y los borren del mapa, se acabó la historia.
Mientras en occidente no dejamos usar a Ucrania los 4 misiles que han recibido. Y los iraníes que no son tontos y ven que vender armas a Rusia es buen negocio y no pasa nada pues al final venden sus misiles a Putin porque si no los norcoreanos lo harán. Lo irónico es que cuanto más fuerte es la alianza Moscu-Teheran más se embarca Netanyahu en una escalada de una guerra sin sentido. De que sirve a Israel un acuerdo sobre Siria con Rusia si en Líbano y Gaza tiene dos problemas aún mayores y ahí los rusos apoyan a Irán. Tendría más sentido que apoyarán a Ucrania y probarán sus armas de defensa aérea contra drones y misiles de fabricación iraní empleados por Rusia