Kazajstán utiliza sistemas de Thales y Safran para reparar cazas rusos.

Las sanciones aplicadas por muchos países han limitado la capacidad de mantenimiento de algunos cazas rusos, como el Su-30SM Flanker-H. Sin embargo, con la ayuda de ARC Group en Kazajistán, Rusia ha logrado eludir las sanciones y mantener los sistemas de Thales y Safran, que se incorporaron a los aviones antes de la anexión de Crimea en 2014.

La anexión de Crimea en 2014 y la posterior invasión rusa de Ucrania en 2022 llevaron a la introducción de una serie de sanciones contra Rusia. Entre ellas, la prohibición de exportar cualquier tipo de tecnología militar a Rusia. El problema para los rusos es que la industria militar rusa ha desarrollado una gran cantidad de equipos utilizando componentes extranjeros. Sin embargo, el uso intensivo de ciertos sistemas en Ucrania, como los aviones de combate, requiere mantenimiento y piezas de repuesto… que ya no pueden entrar en territorio ruso… ¡O al menos no en teoría!

El 12 de septiembre, el portal InformNapalm publicó una investigación sobre la vulneración de las sanciones por parte de Kazajstán: la empresa kazaja ARC Group (Analyst Research Consulting Group) trabaja directamente con las Fuerzas Armadas rusas en el mantenimiento de los cazas rusos Su-30SM Flanker-H, en particular de los sistemas producidos y desarrollados por Thales y Safran como:

• visualizadores multifunción SMD55S y SMD66S (Thales)
• el sistema de radionavegación y aterrizaje TLS2020 (Thales)
• el sistema de radionavegación TACAN-NC12 (Thales), que permite el uso de balizas móviles o tácticas cuando no se dispone de infraestructura de navegación, para su uso durante las fases de aterrizaje o reabastecimiento en vuelo (si el avión cisterna también utiliza una baliza TACAN)
• el HUD 3022, ya utilizado en el F-16 Fighting Falcon, F-18 Hornet, Rafale, MiG-29 Fulcrum, Mirage 2000, Mirage F1, Eurofighter Typhoon, Tornado, etc.
• el sistema de navegación inercial híbrido SIGMA 95NAA, que permite la integración de numerosos sensores GNSS, como GPS y Glonass.

Estos diferentes equipos pueden ser pequeños, pero son extremadamente importantes para las tripulaciones rusas, ya que las pantallas proporcionan valiosa información sobre la aeronave y su entorno, el HUD permite al piloto concentrarse en sus objetivos aéreos y obtener los datos principales de la aeronave, y los demás sistemas permiten a la aeronave geolocalizarse.

Rusia se anticipó a esta dependencia excesiva de los equipos extranjeros y empezó a desarrollar sistemas equivalentes, como el HUD ruso KSh-1KI para sustituir al HUD 3022. No obstante, muchos aviones siguen volando con piezas francesas.

El Grupo ARC en el centro del proceso

En 2016, ARC Group obtuvo una licencia estatal para la exportación, importación, instalación, ajuste, modernización, operación, almacenamiento, reparación y mantenimiento de aeronaves y piezas de repuesto. En concreto, es el distribuidor exclusivo de Safran Electronics & Defence en Kazajistán y Kirguistán, promocionando al fabricante francés en estos dos países.

El 25 de octubre de 2021 se firmó un acuerdo con la empresa rusa Rosaviaviaspetskomplekt LLC para la reparación de cazas rusos Su-30SM. En él se estipula lo siguiente:

El contratista prestará servicios de reparación/suministro de componentes de aviónica fabricados por Thales y Safran para aviones Su-30».

Además, una cláusula estipula que el Grupo ARC proporcionará especialistas certificados por los fabricantes de las piezas. De hecho, la formación se llevó a cabo del 16 al 20 de enero de 2023 en Thales, así como un segundo grupo entre el 6 y el 10 de febrero de 2023. Tras su formación, los pocos ingenieros serán enviados a Irkutsk (oblast de Irkutsk, Rusia), donde se encuentran las instalaciones de mantenimiento y reparación de los aviones en cuestión.

Las piezas se enumeraban en el apéndice del propio contrato, con piezas rusas importadas en Kazajstán y reexportadas a Rusia tras la revisión. Sin embargo, el contrato nunca será firmado por la empresa rusa… ¡o casi! El 5 de noviembre de 2021, 11 días después de la fecha del contrato sin firmar, apareció un segundo contrato. Era muy similar al primero… salvo que la mención a los fabricantes franceses y a las piezas había desaparecido por completo, ¡mientras que había aparecido la firma rusa!

InformNapalm indica que es muy probable que estos acuerdos, o al menos el que firmaron ambas partes, se celebraran con carácter retroactivo y que los primeros contactos tuvieran lugar en realidad en el verano de 2022, justo después de las sanciones contra Rusia. Y eso no es todo, porque en 2024, Thales vio una nueva solicitud de ARC Group para obtener materiales utilizados para el mantenimiento de piezas suministradas por Thales… y al mismo tiempo, un intercambio entre ARC Group y los rusos, extrañamente con una lista de materiales utilizados para el mantenimiento y reparación de los sistemas de Thales y esto, con la misma duración del contrato entre ARC Group y Thales.

Un doble juego

Kazajstán forma parte de la Unión Económica Euroasiática, que elimina los controles aduaneros en los pasos fronterizos con Rusia. Sin embargo, Kazajstán decidió aplicar las sanciones contra Rusia… y sorprendentemente vio cómo sus importaciones Y exportaciones aumentaban de repente. En realidad, Astana está jugando un doble juego, con controles reducidos al mínimo estricto. El objetivo es ganarse el favor de las dos partes en conflicto, pero también obtener un importante flujo de dinero de Rusia.

El Grupo ARC está siendo desenmascarado, pero en realidad Rusia ha creado muchos sistemas paralelos en todo el mundo, que le permiten obtener un cierto flujo de componentes militares o sistemas civiles equipados con componentes que pueden desviarse para fines militares.

Thales y Safran no están probablemente implicadas en este tráfico, sino que más bien parecen ser las víctimas de este juego de manos sutilmente organizado. Como en la mayoría de los contratos de armamento, existen cláusulas de no reexportación. InformNapalm ha publicado una cláusula del contrato de 2024 con Thales, que dice claramente:

«De conformidad con el artículo 12 octies del Reglamento (UE) nº 833/2014 del Consejo, el Cliente [ARC Group] no venderá, exportará o reexportará, directa o indirectamente, los bienes y/o tecnologías suministradas en virtud del presente Contrato a:

1. i) la Federación Rusa o para su uso en la Federación Rusa y en los territorios ucranianos controlados por la Federación Rusa.

Por lo tanto, la empresa kazaja había asumido plenamente su doble juego. También hay que recordar que la vaguedad se mantiene por el hecho de que la Fuerza Aérea kazaja cuenta con unos cuarenta Su-30SM Flanker-H… ¡Que también hay que mantener!

Por último, no es la primera vez que InformNapalm revela contratos con Rusia. El 22 de julio de este año, el grupo publicó la lista exacta de los equipos y misiles de las cinco baterías S-400 compradas por India a Rusia.

Gaétan Powis