KNDS se instalará en Ucrania para reparar armas pesadas y fabricar munición.
KNDS (KMW+NEXTER Defense Systems), el fabricante franco-alemán del carro de combate Leopard y del obús Caesar, creará una unidad en Ucrania que trabajará con empresas locales para realizar el mantenimiento de los equipos, fabricar piezas de repuesto mediante impresión 3D y producir proyectiles de artillería de 155 mm.
KNDS espera establecer la filial en Ucrania a finales de junio, tras meses de conversaciones, dijo el presidente Philippe Petitcolin al margen de una ceremonia de firma en París a la que asistieron el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy, el ministro de las Fuerzas Armadas francesas Sebastien Lecornu y el CEO de KNDS Francia Nicolas Chamussy.
«La firma marca el comienzo de una nueva era entre nosotros y Ucrania, ya que tendremos una filial completa de KNDS, tanto la parte alemana como la francesa, y a partir de ahí podremos cooperar con empresas ucranianas», dijo Petitcolin. «Estamos en conversaciones con muchas empresas».
Ucrania opera 386 piezas de equipamiento KNDS, en particular tanques Leopard y cañones Caesar, y la empresa aún tiene 250 piezas que entregar según los pedidos recibidos, lo que se traduce en la necesidad de «mucho, mucho apoyo», según Petitcolin.
Chamussy, CEO de KNDS Francia, firmó cartas de intenciones con la ucraniana ENMEK para la creación de un centro de mantenimiento de cañones Caesar y para la impresión en 3D de piezas de recambio, así como un contrato con KZVV para transferir la producción de proyectiles de 155 mm.
El centro de mantenimiento no necesitará técnicos franceses, pues Ucrania ya se encarga del mantenimiento del César con piezas de repuesto enviadas desde Francia, según Chamussy. «Los ucranianos saben hacerlo muy bien», afirmó.
Según Petitcolin, KNDS Francia produce actualmente un obús montado en camión Caesar a la semana. La empresa tiene previsto aumentar el ritmo de fabricación de cuatro a seis al mes, según Chamussy.
«Si hay una demanda sostenida, sabemos cómo aumentar el ritmo de uno a la semana. Sabemos cómo hacerlo mejor, sabemos cómo hacer más, pero por supuesto todo depende de la demanda que tengamos», dijo Petitcolin. Dijo que la empresa tiene pedidos concretos de César para 2024, pero aún no para 2025, aunque «sin duda habrá algunos contratos» en la feria de defensa Eurosatory, que comienza el 17 de junio.
KNDS Francia tiene capacidad para aumentar la producción total de artillería a 12 cañones al mes, según Chamussy. Además del cañón autopropulsado Caesar, la empresa también fabrica la pieza de artillería remolcada LG1 de 105 mm.
KNDS tiene previsto iniciar la fabricación de munición con su socio local ucraniano en un plazo de 12 meses, según Petitcolin. En un siguiente paso, la empresa podría empezar a fabricar módulos de sistemas o incluso sistemas completos en Ucrania, dijo el presidente.
El ministro de las Fuerzas Armadas francesas, Lecornu, comentó los planes de transferir aviones Mirage 2000-5 a Ucrania, diciendo que las aeronaves en cuestión están en servicio con la Fuerza Aérea francesa en este momento, incluso para misiones de policía aérea de la OTAN en Estonia y Rumania. Estos aviones se retirarán gradualmente del servicio hasta 2030 para ser sustituidos por el Rafale.
«Así que estamos hablando de aviones de combate que son plenamente operativos», dijo Lecornu. Se negó a decir cuántos aviones transferirá Francia, o qué países podrían unirse a una coalición Mirage.
Lecornu afirmó que lo urgente es empezar a formar a los pilotos ucranianos en el Mirage 2000. Dijo que Francia ha estado entrenando pilotos en el Alpha Jet franco-alemán durante varios meses, pero el Mirage «es una categoría diferente.» El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo el jueves que el entrenamiento normalmente toma de cinco a seis meses, lo que significa que los pilotos ucranianos podrían ser capaces de volar los Mirage 2000-5 a finales de año.
Lecornu también habló de los planes franceses para entrenar a una brigada de 4.500 soldados ucranianos, afirmando que la reconstrucción de la capacidad es «la gran prioridad» para el ejército ucraniano. El país se enfrenta al reto de entrenar entre 15 y 20 brigadas, lo que describió como un «esfuerzo absolutamente considerable».
Rudy Ruitemberg