La Armada india se esfuerza para conseguir un tercer portaaviones.
Mientras continúa en Francia el debate sobre la necesidad de dotar a la Armada francesa de dos portaaviones, la Marina india tiene grandes esperanzas de contar pronto con tres, lo que le permitiría disponer de dos grupos aéreos y marítimos listos para zarpar en cualquier momento para contrarrestar, en caso necesario, a las fuerzas navales pakistaníes y chinas, como parte de su estrategia de “doble frente”. También necesita responder a la creciente importancia de las cuestiones marítimas, sobre todo en sus zonas de interés.
En la actualidad, las capacidades aeronavales de India se basan en el INS Vikramaditya [antiguo Almirante Gorshkov], adquirido a Rusia y renovado tras una inversión de 2.300 millones de dólares [es decir, tres veces la estimación inicial], así como en el INS Vikrant, construido localmente y que entró en servicio activo en septiembre de 2022.
Según sus planes iniciales, la Armada india se planteaba hasta hace poco la adquisición de un portaaviones en configuración CATOBAR, es decir, equipado con catapultas y puntales de detención… Se trataba de una desviación radical de su historia y de sus capacidades actuales, dado que los INS Vikramaditya e INS Vikrant están equipados con planos inclinados para lanzar sus aviones de a bordo [configuración STOBAR].
Sin embargo, diseñar un portaaviones de tipo CATOBAR requiere unos conocimientos técnicos que la industria naval india no posee… y sin duda significa renunciar a otras prioridades para poder financiarlo. De ahí el anuncio que acaba de hacer el almirante R Hari Kumar, jefe del Estado Mayor de la Marina india, a la agencia de prensa india ANI.
“Construir un portaaviones no es tarea fácil. Con el INS Vikrant, el astillero de Cochin [CSL] ha desarrollado una experiencia y unas capacidades considerables que deben mantenerse. Por eso estamos trabajando en un tercer portaaviones, que será similar al INS Vikrant”, declaró el almirante Kunar.
Además, la construcción de un tercer portaaviones estaría en consonancia con el concepto “Make in India”, dado que el INS Vikrant se construyó con un 75% de componentes fabricados en la India.
Equipado con cuatro turbinas de gas General Electric LM2500+ para propulsar sus 40.000 toneladas a una velocidad máxima de 28 nudos, el INS Vikrant puede operar una treintena de aeronaves, incluidos 26 cazas embarcados. Cabe señalar que un tercer portaaviones indio podría significar un nuevo pedido de Rafale-Marines a Dassault Aviation, tras los 26 que Nueva Delhi pretende adquirir.
Laurent Lagneau
Portaviones o SSN. Dado que un CATOBAR supone comprar a EEUU los equipos de aterrizaje y despegue más el coste del grupo aéreo embarcado y los buques escolta parece más atractivo comprar SSN. Sea lo que sea Francia está bien posicionado.
Igual es que soy malpensado pero, este artículo, escrito por un francés huele mucho a sutil campaña propagandista para influenciar de cara a una nueva venta de aviones Dassault Rafale-M (que por otro lado, sería totalmente lógica)
Ya se verá
Un portaaviones en la actualidad, no es un blanco demasiado fácil para la sofisticación armamentistica actual?. solo es una apreciación!…
No van solos, normalmente es el buque estrella de un grupo de combate con sus respectivos escoltas.
España podría haber jugado un papel con la última fragata f105 y las corbetas hechas para Arabia Saudí. Hemos perdido mucho tiempo y mirando para otro lado.
La posesión de un tercer portaaviones es una larga aspiración de la marina India. De todas maneras, la actual estrategia ha puesto énfasis en los submarinos. India se encuentra en proceso de modernización de su flota convencional, con la adición de 3 unidades Scorpéne adicionales a las 6 ya entregadas, las cuales serán dotadas de sistemas AIP de origen local en su primera revisión, el primero de los cuales, INS «Kalvari» debe entrar en gradas a finales de este mismo año. India tiene a su vez en plena expansión su programa SSBN de los que ya posee dos, uno en servicio operativo y otro en pruebas de aceptación, además de dos en gradas y al menos dos más en proyecto.
(2): Su asociación estratégica con Francia le permitirá concretar el proyecto P-75 Alpha, es decir los SSN autóctonos, de los que se han proyectado al menos seis. Respecto de los portaaviones, hay que tener en cuenta algunos aspectos: operativamente un buque STOBAR tiene muchas limitaciones respecto de un CATOBAR, pero a cambio ofrece costos constructivos y de mantenimiento muy inferiores. Además, el negocio de las catapultas es extremadamente reducido: EEUU o China. Este es un negocio muy específico y no conviene a India desarrollarlo localmente. Además de India sólo Brasil ha demostrado interés por los portaaviones.
(3): Para India, país no alineado, es una solución muy atractiva la construcción de portaaviones STOBAR, puesto que ya posee el know-how adecuado, la infraestructura y el universo de proveedores y logística articulados; es decir, sabe cómo hacer portaaviones y tiene el personal, las instalaciones y la infraestructura industrial desarrollados. Además, no condiciona al país a la dependencia tecnológica de un tercero justamente en un elemento de carácter estratégico. Por ello, no sorprende que el tercer portaaviones (INS Vishal), para el que ya se han destinado partidas presupuestarias para su construcción, sea con rampa de despegue en lugar de catapultas.
(4): Inicialmente se hablaba que este tercer buque (segundo nacional, IAC-2) sería mayor que el INS Vikrant (IAC-1), que desplazaría 65.000 t y que tendría un grupo aéreo efectivo mayor (40-45 aviones). También que, tal como China con su nuevo portaaviones «Fujian» (Tipo 003), estaría dotado de catapultas EM. Un pedido provisional de India a EEUU realizado en 2022 por un sistema completo (CAT+AAR), fue aprobado por el Congreso, permitiendo a General Atomics su exportación. Esta disponibilidad permitiría a la marina india competir en igualdad de condiciones con la marina china. De todas maneras, para India es más sencillo y económico construir un tercer portaaviones con el mismo sistema STOBAR que equipa a sus otras dos unidades. Veremos cómo sigue.