La Marina rusa retira de Crimea los submarinos de la clase Kilo.

La Flota del Mar Negro de la Armada rusa y sus submarinos se están retirando de Crimea por temor a los misiles ucranianos Neptune y Harpoon. Esto se produce en medio del cambio de rumbo de la guerra entre los dos países, con indicios de que Kiev podría presionar para retomar la península.

Teniendo en cuenta la creciente capacidad y confianza de Ucrania para atacar Sebastopol en Crimea, es difícil disociar la decisión de la flota rusa del Mar Negro de «reagrupar» sus fuerzas en el Mar Negro de la creciente amenaza de ataque por parte de las fuerzas ucranianas.

La Flota del Mar Negro, con sede en la ciudad portuaria de Crimea, Sebastopol, es la flota de la Armada rusa en el Mar Negro, el Mar de Azov y el Mar Mediterráneo, mientras que Sebastopol es una importante base naval en el extremo suroeste de la península de Crimea. La flota, considerada fundamental en el plan del presidente ruso Vladimir Putin para invadir Ucrania, fue utilizada para lanzar misiles de crucero Kalibr, bloquear el acceso a los puertos de Ucrania y amenazar con un desembarco anfibio en Odesa.

Desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania, cuatro submarinos de la clase Improved-Kilo de la Flota del Mar Negro de la Armada rusa han sido vistos regularmente en Sebastopol, donde tienen atracaderos específicos, según Sutton. Los submarinos han utilizado la base para rearmarse con misiles de crucero de ataque terrestre Kalibr.

Rusia reforzó su Flota del Mar Negro antes de lanzar la invasión de Ucrania el 24 de febrero, e incluso envió allí sus submarinos mejorados de la clase Kilo.

Sin embargo, desde el dramático hundimiento del Moskva, el buque insignia de la Flota del Mar Negro de Rusia, en abril, la flota de superficie de la Armada rusa ya se ha alejado del alcance de los misiles ucranianos. Mientras tanto, los submarinos rusos han estado operando sin obstáculos en todo el Mar Negro.

Hasta hace poco, no era raro ver a tres de los Kilos en el puerto a la vez, con uno en el mar. Ahora eso ha cambiado, señaló Sutton. Sin embargo, durante las últimas semanas, los Kilos se han concentrado en Novorossiysk -otra base naval mucho más alejada de Ucrania- por temor a un ataque de las fuerzas ucranianas, añadió Sutton.

Rusia teme que Ucrania, tras haber conseguido cambiar el rumbo de la guerra, empuje ahora hacia Crimea, península ucraniana que Rusia se anexionó en 2014.

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha prometido que Kiev restablecerá su dominio sobre Crimea y ha señalado que es necesario liberarla ya que «será la reanimación de la ley y el orden mundial.»

Añadió que Ucrania recuperaría Crimea por cualquier medio que su gobierno considerara correcto y que no consultaría a otros países antes de hacerlo.

El Submarino Clase Kilo

El submarino mejorado de la clase KILO del Proyecto 636.3 es el activo naval más potente de Rusia en el Mar Negro. Son intrínsecamente más resistentes en aguas abiertas que sus primos de guerra. Especialmente contra los ucranianos, que carecen de medios antisubmarinos.

Así lo demostró la dramática pérdida del buque insignia Moskva el 13 y 14 de abril. Hubo muchos factores en la pérdida del crucero de la clase Slava. Pero los submarinos son, por su naturaleza, inmunes a los misiles Harpoon o Neptune. La flota de superficie rusa ya se ha desplazado fuera del alcance de los Harpoon.

Sin una armada ucraniana a la que hundir, los submarinos, al igual que gran parte de la armada de superficie, están en servicio de misiles de crucero. A diferencia de los buques de superficie, los submarinos rusos pueden operar sin obstáculos en todo el Mar Negro. Pueden lanzar misiles de crucero Kalibr contra objetivos en todo el país.

Una ligera desventaja de los submarinos de la clase Kilo es que sólo llevan cuatro Kalibr. Los buques de superficie rusos están equipados con un sistema de lanzamiento vertical de 8 proyectiles. Los Kilo sólo pueden lanzar los misiles de crucero a través de dos de sus seis tubos lanzatorpedos.

La seguridad de Novorossiysk

Novorossiysk se encuentra en la costa rusa del Mar Negro, entre Sochi y el ya famoso puente de Kerch que comunica con Crimea. En los últimos años, la base naval se ha ampliado y, durante la guerra de Ucrania, ha sido el hogar de muchos buques de desembarco. Algunos submarinos suelen tener su base allí, pero durante gran parte de la guerra Sebastopol se convirtió en su centro.

Ahora se han retirado en gran medida de Sebastopol. Los submarinos siguen haciendo escala en Sebastopol, y el antiguo submarino Alrosa, que se encuentra en fase de pruebas de readaptación, sigue activo allí. Pero ahora es normal que haya tres Kilos en Novorossiysk, lo que supone un cambio.

El movimiento se produjo poco después de que Ucrania intensificara los ataques con drones en Sebastopol, apuntando al cuartel general de la Flota del Mar Negro. El prominente edificio del cuartel general fue abordado por drones que volaron desde el este, sobre los atracaderos de submarinos. Esto puede ser parte de la motivación para el cambio.

Dada la guerra que se aproxima a Crimea, y la creciente capacidad y confianza de Ucrania para atacar Sebastopol, la retirada parece prudente. Y es difícil desvincularlo de la amenaza de guerra.

Sin embargo, no es necesario que los submarinos tengan su base en Sebastopol para lanzar los misiles Kalibr. Estos tienen suficiente alcance para ser lanzados desde cerca de Novorossiysk y alcanzar objetivos dentro de Ucrania. Y los submarinos tienen la capacidad de navegar sin ser molestados por todo el norte del Mar Negro.

A medida que Rusia vaya moviendo su Armada, reaccionando a los movimientos militares de Ucrania, la ubicación y los niveles de actividad de los submarinos seguirán siendo de interés.

H I Sutton