La USAF quiere un caza de sexta generación por el precio de un F-35.
¿Puede un caza de sexta generación costar menos que las generaciones anteriores? Los oficiales de la Fuerza Aérea de Estados Unidos dicen que es posible.
«El F-35 representa más o menos el límite superior de lo que nos gustaría pagar por un avión individual para esa misión. El F-15EX y el F-35 están más o menos en la misma categoría de coste. Pero me gustaría bajar más», declaró Frank Kendall, secretario de las Fuerzas Aéreas, a la prensa el lunes en la conferencia anual Air, Space & Cyber de la Asociación de Fuerzas Aéreas y Espaciales.
Pero la viabilidad de este objetivo para la próxima generación de aviones de dominación aérea del servicio (NGAD), de unos 80 a 100 millones de dólares, está por ver, ya que ha llevado años de producción reducir el coste de su F-35 de quinta generación hasta donde está: 82,5 millones de dólares cada uno en lotes recientes para la Fuerza Aérea. Y el F-15EX, un avión de «cuarta generación-plus», cuesta más de 90 millones de dólares.
El servicio ha puesto en pausa su programa NGAD después de que las proyecciones iniciales para el avión de sexta generación pusieran el coste del caza en tres veces el coste de un F-35 y como las amenazas cambiantes y la llegada de aviones no tripulados y las nuevas tecnologías están alterando la forma en que el servicio ve la superioridad aérea.
El servicio estaba trabajando con conceptos de diseño y requisitos del NGAD que tenían «varios años de antigüedad», dijo Kendall.
Ahora el servicio está reconsiderando todos los aspectos de una aeronave que determinan el coste: «tamaño, complejidad de los sistemas de misión, propulsión», dijo a los periodistas Andrew Hunter, jefe de adquisiciones del servicio, y admitió que se trata de un «rompecabezas muy difícil de resolver.»
«¿Es posible que miremos esa curva de Pareto y nada en esa curva sea más barato que un F-35? Es posible, sí, pero tenemos que hacer el trabajo. Tenemos que hacer el análisis, y sabemos lo que sería más ventajoso», dijo Hunter el lunes.
Kendall también dijo que podrían reducir los costes transfiriendo algunas de las capacidades previstas en su día para el NGAD a los aviones de combate colaborativos, drones que volarán y lucharán junto a cazas tripulados.
«Una vez que se empiece a integrar [los aviones de combate colaborativos] y a transferir algunos equipos de misión, capacidades y funciones a los CCA, entonces se podrá hablar de un concepto diferente, potencialmente, para el caza tripulado que los controle, por lo que existe una gama real en ese sentido», dijo Kendall.
Pero a pesar de la incertidumbre que rodea al programa, Kendall seguía confiando en que el NGAD llegaría a construirse: «Probablemente haremos una versión más, al menos, de aviones tripulados, más tradicionales».
El servicio tomará una decisión sobre el programa «en los próximos meses» porque los equipos de la industria están esperando instrucciones, dijo el secretario, y varios otros programas de aviones futuros también dependen de esta decisión.
Todavía está por determinar cómo interactuarán y controlarán exactamente los NGAD los CCA, dijo Kendall, pero señaló el impulso del servicio hacia una mayor dependencia de los aviones no tripulados.
Inicialmente, el servicio quería que cada caza tripulado controlara de tres a cinco CCA, pero «ahora estamos hablando de un número mayor», dijo Kendall.
Los CCA, que actuarán esencialmente como camiones de armas y estarán cargados con software autónomo, estarán bajo un «estricto control» y mantendrán una línea directa de comunicaciones con el caza tripulado, explicó Kendall.
«Una de las cosas que tienes que tener si vas a utilizar CCA y hacer que estén armados y se utilicen y sean letales es que tienen que estar bajo un estricto control», dijo. «Y para mí, uno de los elementos de eso tiene que ser la línea de visión de las comunicaciones. Y creo que es un elemento importante a tener en cuenta: comunicaciones seguras, fiables y con línea de visión.
No vamos a permitir que los aviones salgan a combatir sin control, de modo que si pierden las comunicaciones lo normal sería que regresaran a la base, lo que les sacaría del combate, y no queremos que eso ocurra. Y cuando entren en combate, queremos que estén bajo estricto control».
Audrey Decker
Es como cuando algunos en el senado y en el Pentágono exigían que un F-15 en 1975 costase el precio de un F-4 o de un F-105, si lo hubiesen castrado como solicitaban, nada bueno habría salido. Realista son 210 millones de dólares para 800 aeronaves.
Si quieren que salga aprox. lo que vale un F-35, que lo tomen como base con dos motores, 35% más grande y alas plegables, o sea, del tamaño de un F-15. Pero que tomen en cuenta, un motor de F-35 cuesta 40 millones de dólares.
La incertidumbre del Pentágono, que ha demorado el proyecto (aunque se afirma que ha volado al menos un prototipo) tiene dos puntos principales. El primero es la evolución tecnológica, pues la posibilidad de acceder a determinados parámetros operativos y capacidades operacionales está directamente determinado por ello. Ahora bien, muchas tecnologías ya están disponibles, mientras que otras aún están en desarrollo o no existen (o hay solo prototipos experimentales), incluyendo los motores de nueva generación. Esto hace que el avance lleve algo más de tiempo para definir el tipo de vector de combate. Sin dudas debería ser de mayor tamaño que el F-35, bimotor, y quizá biplaza, hasta que la evolución tecnológica permita un avión monoplaza tripulado/no tripulado. El segundo punto es el coste. Históricamente, el desarrollo de sistemas de armas novedosos ha producido un incremento creciente de los costos. Esta característica impidió (entre otras cosas) que el F-22 pudiera poseer mayores capacidades y limitó su número muy por debajo de lo que inicialmente se había previsto. El desarrollo del F-35 sin dudas, fue el cénit de este proceso. Sin dudas, ha sido una gran virtud conseguir que los costos productivos del F-35 bajarán aún cuando la evolución continúa. Este es un aspecto que el Pentágono quiere prevenir. No está dispuesto a pagar sumas desorbitadas para poseer superioridad tecnológica. Ambos, Pentágono y corporaciones aeroespaciales, así como el conjunto del ecosistema tecno industrial, deberán tener presente este requisito a la hora de definir el nuevo sistema NGAD.
Si tan importante es el precio, quizás deberían pensar en un gen 5+ para producir en gran cantidad y dejar el 6ª para más adelante
Eso lo quiero ver yo. Siempre dicen lo mismo, y al final se disparan los precios por las nubes. Capitalismo puro y bestial. Al final comprarán menos unidades que F-22, pero venderán que puede destruir 100 aviones con armas de microondas y puede hacer tostadas. Los USA son ridículos.
David Barahona López. En paridad de adquisición per cápita, que un caza chino de 5ta. generación cueste 110 millones de dólares, implicaría que este mismo cueste hasta cuatro veces más en USA. Los costes de producción fijos y varíales, son mucho mayores en los Estados Unidos que en China.
Por lo tanto, no dude que un caza de 5.ª o 6.ª generación europeo, su coste no baje de los 200 millones de Euros. Ya el Rafale y el Eurofighter, cuestan más de 120 millones.
Que tontería de comentario, sin aportar nada más. Debes aburrirte mucho
Lo van a hacer si o si, en cuanto aparezcan noticias o fotografías de un proyecto 6a. generación chino. Es cuestión de tiempo.
Significaría un golpe terrible que los chinos adelantarán a los useños en aviación.
Logico a 300 kIlos de inicio…..pelado…..es imposible hasta para USA….y el error Obama de solo 200 F22 lo estan pagando. Y si USA quiere seguir por delante debe sacar el 6 cuanto antes…..para empezar a currar en el 7 que es lo que hizo tras sacar F22
Pero el error fue dejar solo a Boeing y LM….por eso quieren abrir el programa a empresas mas pequeñas…cuanta mas competencia mejor.