La USAFE refuerza la vigilancia del Ártico con los drones MQ-9 Reaper y RQ-4 Global Hawk.
Las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos en Europa (USAFE) están mejorando sus capacidades de vigilancia en el Ártico, aumentando el despliegue de drones avanzados, incluidos los drones de combate MQ-9 Reaper y los drones de reconocimiento RQ-4 Global Hawk.
Durante la Air, Space & Cyber Conference organizada por la Air Force Association el 18 de septiembre de 2024, el general James B. Hecker, comandante de la USAFE y del Mando Aéreo Aliado de la OTAN, habló de cómo estas tecnologías mejoran la vigilancia de las actividades rusas en la región.
El MQ-9 Reaper, conocido por su capacidad para llevar a cabo misiones de vigilancia a media altitud durante un máximo de 27 horas, está perfectamente equipado para atacar objetivos de alto valor en zonas permisivas. Este dron de combate desempeña un papel crucial en misiones que requieren precisión y capacidad de respuesta inmediatas.
El MQ-9 Reaper es un dron de combate versátil diseñado para misiones de vigilancia, reconocimiento y ataque de precisión. Está propulsado por un motor turbohélice Honeywell TPE331-10, que le permite alcanzar una velocidad de crucero de aproximadamente 370 km/h y una altitud operativa de 15.000 metros. Con una autonomía de 27 horas, puede cubrir vastas zonas sin necesidad de repostar.
El Reaper dispone de siete puntos de apoyo que le permiten transportar hasta 1.700 kg de carga útil, incluidos misiles AGM-114 Hellfire, bombas guiadas por láser GBU-12 Paveway II y sensores avanzados como el radar multimodo Lynx II. Su conjunto de sensores, que incluye cámaras electro-ópticas e infrarrojas, permite la identificación precisa de objetivos, proporcionando capacidades de ataque de precisión de medio a largo alcance.
Paralelamente, el RQ-4 Global Hawk complementa el arsenal con su capacidad para llevar a cabo misiones de reconocimiento a gran altitud. Capaz de permanecer en el aire hasta 34 horas en función de la carga útil de la misión, el RQ-4 es un elemento clave de la estrategia de vigilancia de largo alcance. Este dron de reconocimiento ofrece una visibilidad en profundidad y puede complementar la información recogida por satélites y aviones tripulados, lo que resulta esencial para la vigilancia continua de la vasta extensión ártica.
El RQ-4 Global Hawk, con sus capacidades de vuelo a gran altitud y de larga duración (hasta 34 horas), está diseñado para vigilar vastas regiones de difícil acceso, como el Ártico. Desplegándolo desde el Reino Unido, las fuerzas aliadas pueden cubrir el Círculo Polar Ártico y sus alrededores, detectando los movimientos navales y aéreos, especialmente los de Rusia. Así pues, el Reino Unido, a través de la OTAN, desempeña un papel en el despliegue y funcionamiento de sistemas de vigilancia como el RQ-4 para proteger los intereses en la región ártica.
El RQ-4 Global Hawk es un dron estratégico de reconocimiento a gran altitud, diseñado específicamente para misiones de vigilancia de larga duración. Propulsado por un motor turbofán Rolls-Royce AE 3007H, el RQ-4 puede alcanzar una altitud operativa de 18.000 metros y alcanzar una velocidad de crucero de 575 km/h. Su impresionante autonomía, superior a 34 horas, le permite recorrer miles de kilómetros y llevar a cabo extensas misiones de reconocimiento.
El dron está equipado con un conjunto de sofisticados sensores, entre ellos un radar de apertura sintética (SAR), sistemas de detección electro-ópticos/infrarrojos (EO/IR) y sensores de recogida de señales. Estos sistemas le permiten proporcionar imágenes de radar de alta resolución e inteligencia en tiempo real en zonas extensas y difíciles, como el Ártico. Con una envergadura de 39,9 metros y una capacidad de carga útil de aproximadamente 1.360 kg, el RQ-4 Global Hawk es un activo clave en la vigilancia aérea estratégica.
La ampliación de las operaciones del RQ-4 a RAF Fairford, en el Reino Unido, por primera vez en este lugar, ilustra el creciente compromiso de la USAFE con la vigilancia del Ártico mediante el uso de tecnología avanzada. Estas misiones transfronterizas en espacio aéreo internacional y aliado refuerzan la postura de vigilancia y reconocimiento en una zona en la que son frecuentes los enfrentamientos con Rusia.
Estas iniciativas reflejan una evolución significativa en la estrategia de vigilancia del Ártico, destacando la importancia de combinar las capacidades ofensivas y de reconocimiento para garantizar una cobertura completa y eficaz ante los crecientes desafíos geopolíticos.
Rudis02ARG
Pues en España sus Reaper no vigilan nada. Todos los días se cuelan pateras y pateras repletas de africanos, en una invasión en toda regla.