Las fuerzas estadounidenses abandonan una base militar clave en Afganistán.
Las fuerzas estadounidenses han abandonado una de las mayores bases militares de Afganistán, según funcionarios de defensa.
El aeródromo de Kandahar fue entregado a las Fuerzas de Seguridad de la Defensa Nacional afgana a principios de esta semana, dijeron, en una medida que señala la urgencia del esfuerzo de Estados Unidos por retirarse completamente del país para el 11 de septiembre.
Situada en el sur de Afganistán, Kandahar ha sido una de las principales bases que albergan a las tropas estadounidenses e internacionales. En su apogeo, la extensa base militar y el aeródromo albergaban a más de 26.000 soldados estadounidenses e internacionales.
Cuando las operaciones de combate de la coalición pasaron oficialmente a ser una misión de adiestramiento a finales de 2014, Kandahar se convirtió en el centro de adiestramiento de la región sur de Afganistán.
Kandahar es históricamente importante por ser la cuna de los talibanes y la última ciudad importante en la que Estados Unidos expulsó del poder al movimiento islámico extremista en 2001. Desde entonces, los combatientes talibanes han seguido intentando recuperar el control de la ciudad, tomando a menudo ciudades y zonas de la provincia de Kandahar durante breves periodos de tiempo hasta ser expulsados de nuevo.
El mes pasado, los talibanes atacaron el aeródromo de Kandahar con un cohete que no causó víctimas ni daños.
El ejército estadounidense se encuentra en pleno proceso de retirada de sus aproximadamente 2.500 soldados de Afganistán.
El presidente Joe Biden anunció el mes pasado sus planes para la retirada total de las tropas, diciendo que era hora de poner fin a la «guerra para siempre».
«No podemos continuar el ciclo de ampliar o expandir nuestra presencia militar en Afganistán esperando crear las condiciones ideales para nuestra retirada, esperando un resultado diferente», dijo.
Alrededor de 2.300 soldados estadounidenses han perdido la vida y más de 20.000 han resultado heridos desde que Estados Unidos derrocó al régimen talibán en 2001, después de que éste se negara a entregar a Osama bin Laden, líder de Al Qaeda y artífice de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.
Más de 100.000 civiles afganos también han muerto o resultado herido desde 2009, cuando las Naciones Unidas comenzaron a documentar sistemáticamente el impacto de la guerra en los civiles.
Courtney Kube