Los rusos se hacen con uno de los tanques más raros de los ucranianos.

Las fuerzas respaldadas por Rusia en la región de Donbas, en el este de Ucrania, han capturado un tanque ucraniano T-64BM Bulat muy raro.

Los aproximadamente 100 Bulat que la planta de tanques de Ucrania en Kharkiv produjo a partir de la década de 1990 nunca funcionaron realmente como se anunciaba. Se almacenaron… hasta que el ejército ucraniano se desesperó lo suficiente como para enviar algunos de ellos al frente.

Los ucranianos parecen haber llegado a ese punto antes de finales de abril, ya que las crecientes pérdidas de vehículos blindados pusieron a prueba la crecida lista de brigadas ucranianas.

El T-64BM es una rareza. Las dos brigadas de carros de combate activas de Kiev y otras 11 brigadas pesadas activas utilizan generalmente T-64BV, mientras que las brigadas de reserva tienen principalmente T-72.

El T-64BV de la década de 1960 es un tanque más antiguo, pero más sofisticado que el T-72 de la década de 1970. El T-64BM es, en teoría, más avanzado que el T-64BV, pero al parecer el ejército no estaba satisfecho con el nuevo blindaje reactivo explosivo del modelo.

En la época del ataque ruso, algunos Bulats se encontraban en la escuela de tanques del ejército ucraniano en Kharkiv. Un par de ellos fueron destruidos en el bombardeo ruso de esa ciudad oriental. Los otros T-64BM aparentemente estaban en un almacén o parque de vehículos en algún lugar hasta que el ejército reactivó algunos de ellos.

El T-64BM abandonado apareció en un vídeo que circuló por las redes sociales el sábado. El enorme tanque de 40 toneladas, con su blindaje reactivo y su cañón principal de 125 milímetros, parece estar intacto en su mayor parte.

Esto plantea la posibilidad de que las fuerzas separatistas puedan reparar el vehículo y volverlo contra los ucranianos. Las tropas rusas y separatistas han capturado no menos de 72 tanques ucranianos que los analistas internacionales pueden confirmar con vídeos y fotos.

Los separatistas llevan años operando talleres en antiguas fábricas civiles donde reparan los vehículos ucranianos capturados. «Empezamos con vehículos blindados, luego conseguimos transportes de tropas y tanques», dijo a un periodista el subdirector de una planta. «Lo reparamos todo».

Los ucranianos hacen lo mismo, por supuesto, y aparentemente a mayor escala. Desde que Rusia amplió su guerra contra Ucrania el 23 de febrero, las tropas ucranianas han capturado no menos de 215 tanques rusos. «Todo lo que le quitamos al ejército ruso, lo transferimos a las fuerzas armadas de Ucrania», dijo a la CNN Yuri Golodov, que supervisa un depósito de chatarra donde los trabajadores desmontan y reconstruyen los vehículos capturados.

El mayor número de tanques capturados por Ucrania -y el hecho de que las tropas ucranianas hayan destruido nada menos que 275 tanques rusos, mientras que sólo han perdido en combate 53 de los suyos- ayuda a explicar por qué, a finales de abril, un funcionario del Pentágono afirmó que Ucrania tenía en realidad más tanques en la zona de guerra que Rusia.

Eso no significa que el ejército ucraniano no esté necesitado de vehículos blindados. Kiev ha ampliado masivamente su ejército desde que Moscú comenzó a acumular fuerzas para la guerra más amplia que comenzó a principios de 2021. Además de poner en marcha batallones territoriales, el ejército ucraniano también ha movilizado sus formaciones de reserva, incluyendo cuatro brigadas de tanques con un centenar de tanques cada una.

Es decir, la necesidad de tanques de Kiev ha crecido, y mucho. Al parecer, la necesidad era mayor que la que podían satisfacer los tanques ex rusos y los modelos extranjeros donados desde hace unas semanas, si la aparición del Bulat es un indicio.

Se cree que no se verán muchos más Bulat en acción. Sólo hubo un centenar de estos tanques. Los rusos han destruido al menos dos de ellos y han capturado uno. El T-64BV sigue siendo el tanque más común en el servicio ucraniano por un amplio margen. Y la proporción de T-72 está aumentando a medida que más aliados extranjeros donan sus viejos tanques a Kiev.

David Axe