Oficial de la Marina de EE.UU. cuestiona los costes de la guerra asimétrica en el Mar Rojo.
En una conferencia pronunciada por el almirante Christopher, vicepresidente del Estado Mayor Conjunto, el 3 de mayo de 2024 en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, planteó muy directamente la cuestión de la guerra que libra la Marina estadounidense en el Mar Rojo contra los Houthis.
Las fuerzas navales occidentales se enfrentan a un reto importante a la hora de contrarrestar las amenazas asimétricas que plantean los sistemas no tripulados, y están explorando diversas tecnologías para afrontarlo.
Las armas de energía dirigida (DEW, por sus siglas en inglés), como los láseres, ofrecen una posible solución rentable para contrarrestar las amenazas no tripuladas.
Los láseres tienen una gran precisión y pueden atacar múltiples objetivos rápidamente, utilizando haces de luz concentrados para inutilizar o destruir drones y pequeñas naves no tripuladas. La principal ventaja técnica es el suministro “ilimitado” de munición siempre que se disponga de energía eléctrica.
La Marina estadounidense ha desarrollado sistemas láser, como el AN/SEQ-3 Laser Weapon System, capaces de apuntar eficazmente a pequeñas embarcaciones y drones.
La guerra electrónica se centra en perturbar el control y la comunicación de los sistemas no tripulados. Las técnicas de interferencia y suplantación interfieren en la capacidad del enemigo para navegar y controlar sus sistemas no tripulados, neutralizando eficazmente la amenaza.
Estas tácticas de soft kill utilizan señales electrónicas para inutilizar o engañar a los drones o buques enemigos sin destruirlos físicamente. Este enfoque es técnicamente difícil porque requiere una detección y un análisis sofisticados de las señales enemigas.
Un sistema de defensa multicapa integra varias capas de mecanismos de detección y defensa para contrarrestar las amenazas no tripuladas.
Estas capas suelen incluir vigilancia, reconocimiento, interceptación y contramedidas. Los buques de escolta no tripulados (UEV) se utilizan para proporcionar alerta temprana e interceptación de amenazas, mientras que los drones de vigilancia aérea ofrecen un conocimiento adicional de la situación.
El enfoque de la Marina estadounidense suele combinar sistemas tripulados y no tripulados para proporcionar una defensa integral. El principal reto técnico consiste en integrar eficazmente estos sistemas para maximizar sus capacidades colectivas.
Timothée
Si no se usan es porque la tecnología aún no está madura. Israel está investigando también y se plantea acelerar su desarrollo para emplearlo contra los cohetes de Hamás. Hasta entonces lo más fiable son los misiles. Italianos y franceses han hecho sus ensayos con fuego de cañón o ametralladora. Quizás recuperar un caza naval que pueda derribar drones con fuego de cañón en cualquier tipo de clima sea una opción
España también … tiene cierto desarrollo efectuado .