Países Bajos comprará más cazas furtivos F-35A y helicópteros marítimos NH-90 NFH.
El Gobierno holandés planea aumentar su presupuesto de defensa en 2.400 millones de euros adicionales en los próximos años, según fuentes cercanas a la redacción política de RTL Nieuws. Esta decisión se esboza en un próximo Memorando de Defensa que detalla las inversiones en diversos activos militares, incluyendo aviones de combate F-35A adicionales, fragatas antisubmarinas (ASW) y helicópteros NH-90 (NFH) para misiones navales.
Una parte importante del presupuesto se destinará también a la compra de más municiones y al refuerzo de la policía militar, la Marechaussee, que asumirá nuevas tareas como parte del Acuerdo de Líneas Principales. El memorando, que será presentado por el ministro de Defensa, Ruben Broquelanos y el secretario de Estado, Gijs Tuinman, esboza los planes de defensa de los Países Bajos para el futuro próximo.
De los 2.400 millones de euros, 1.500 millones se destinarán específicamente a mejorar el «poder de combate», centrándose en hacer frente a la escasez de municiones. Otras inversiones se destinarán a las capacidades cibernéticas, la innovación y la expansión de la industria de defensa holandesa.
Parte del aumento del presupuesto implica la continuación de la participación en el programa de aviones de combate F-35. Inicialmente, los Países Bajos tenían previsto adquirir 85 aviones F-35A para sustituir a su anticuada flota de F-16AM, con un coste estimado de 5.500 millones de euros para la compra inicial y 9.100 millones de euros a lo largo de 30 años de servicio. En 2008, a pesar de la preocupación del Parlamento holandés por los retrasos, los problemas técnicos y el aumento de los costes, el gobierno procedió a la compra de dos aviones de prueba.
La decisión de cancelar la primera serie de pruebas en 2010 se revirtió posteriormente en 2011, y se adquirió un segundo avión de pruebas. Las conversaciones posteriores sugirieron que el número de aviones adquiridos sería probablemente inferior a los 85 iniciales dado el reducido número de F-16 en servicio.
En septiembre de 2013, el gobierno holandés anunció planes para adquirir 37 F-35 por un importe aproximado de 4.500 millones de euros, con una asignación adicional de 270 millones de euros anuales para costes operativos. En los años siguientes, continuaron los debates sobre la participación de los Países Bajos en el programa F-35, incluida la preocupación por el aumento de los costes y la consideración de opciones de aviones alternativos.
En 2013, el Tribunal de Cuentas de los Países Bajos informó que el aumento de los costes por unidad había reducido el número de aviones asequibles por debajo del nivel mínimo necesario para cumplir los requisitos de la OTAN.
A pesar de estas preocupaciones, en 2018, el Ministerio de Defensa eliminó el tope presupuestario de 4.500 millones de euros establecido en 2013, lo que permitió la posible compra de más aviones. Para mayo de 2022, el Ministerio decidió encargar otros seis F-35, con lo que la adquisición total prevista asciende a 52. Actualmente, la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos cuenta con 39 F-35A operativos, con despliegues adicionales previstos para el Escuadrón n.º 322 en la Base Aérea de Leeuwarden y el Escuadrón n.º 312 en la Base Aérea de Volkel para 2024, con la posible incorporación del Escuadrón n.º 313.
Junto con el programa F-35, la estrategia de defensa holandesa incluye inversiones en el helicóptero NH90 de NHIndustries, un helicóptero militar bimotor de tamaño medio desarrollado para satisfacer los requisitos de la OTAN de una plataforma versátil adecuada tanto para el campo de batalla como para operaciones navales. El programa NH90 se inició a mediados de la década de 1980 con un consorcio formado por Francia, Alemania, Italia, Países Bajos y Reino Unido.
El objetivo era crear un helicóptero capaz de realizar tanto misiones de transporte en el campo de batalla como misiones antibuque/submarinas.
Aunque el Reino Unido se retiró de la colaboración en 1987, el proyecto continuó con el resto de socios. En 1992, NHIndustries -un consorcio formado por Airbus Helicopters, Leonardo y Fokker Aerostructures- firmó un contrato de diseño y desarrollo con la Agencia de Gestión de Helicópteros de la OTAN (NAHEMA). El primer prototipo voló en diciembre de 1995, y el NH90 entró en servicio operativo en 2007, con controles de vuelo fly-by-wire.
El NH90 está diseñado para diversas funciones, como transporte, búsqueda y rescate, guerra antisubmarina y misiones de fuerzas especiales. El helicóptero cuenta con un fuselaje de material compuesto para reducir la visibilidad del radar y mejorar su durabilidad, y está propulsado por dos motores turboeje, el General Electric CT7-8E o el Rolls-Royce Turbomeca RTM322, según la configuración. Tiene una velocidad máxima de 300 km/h y un alcance operativo de 800 a 1.000 km, según la variante. El techo de servicio es de 6.000 metros, y puede transportar hasta 20 soldados o 12 camillas, con una carga externa máxima de 4.200 kg. El helicóptero está equipado con una serie de sensores, sistemas de armas y aviónica, incluido un piloto automático de cuatro ejes y controles fly-by-wire.
Existen dos variantes principales del NH90: el helicóptero de transporte táctico (TTH) para operaciones terrestres y el helicóptero fragata de la OTAN (NFH) para misiones navales. La variante TTH está destinada al transporte de tropas y carga y a la realización de evacuaciones médicas, mientras que la variante NFH está diseñada para la guerra antisubmarina, la guerra de unidades antisuperficie y otras funciones navales.
Se han desarrollado otras versiones especializadas para satisfacer requisitos específicos de distintos operadores, como la versión sueca de cabina alta (HCV) y los modelos alemanes «Sea Lion» y «Sea Tiger». Otras variantes son el UH-90A del Ejército italiano y el MRH-90 Taipan australiano, adaptados a distintas necesidades operativas.
Los Países Bajos, que participan en el programa NH90, encargaron inicialmente 20 helicópteros para la Marina Real Holandesa, incluidas 12 variantes NATO Frigate Helicopter (NFH) y 8 versiones tácticas. En 2010, la Marina neerlandesa recibió la primera variante NFH. Sin embargo, problemas como la corrosión debida a la exposición al agua salada llevaron a una suspensión temporal de las entregas en 2014 hasta que se realizaran modificaciones y reparaciones.
El NH90 se ha utilizado en operaciones navales holandesas, incluidas misiones antipiratería en el Golfo de Adén. A partir de 2024, los Países Bajos operarán 19 helicópteros NH90 tras la pérdida de una aeronave en un accidente en el Caribe en 2020. Hay planes en marcha para modernizar los sistemas de comunicación y armamento de la flota restante.
El memorando también incluye la decisión de restablecer un batallón de tanques holandés. Los Países Bajos, que compraron por primera vez tanques Leopard 2 en 1979, están considerando ahora la adquisición de unos cincuenta tanques Leopard 2A8. El coste anual estimado del mantenimiento del nuevo batallón de tanques, incluidos los gastos de adquisición de nuevos tanques, los costes operativos y de personal para unos 350 militares y el mantenimiento de las infraestructuras, se estima entre 260 y 315 millones de euros para los próximos quince años.
Esta decisión marca un cambio en la política de defensa desde 2011, cuando el batallón de tanques fue eliminado debido a restricciones presupuestarias y a una evaluación estratégica de que los tanques eran innecesarios. La reciente decisión se considera una respuesta a los acontecimientos geopolíticos, en particular la invasión rusa de Ucrania, que ha puesto de relieve la necesidad de renovar las capacidades militares.
El gobierno holandés pretende aumentar el gasto en defensa para alcanzar el estándar de la OTAN del 2% del Producto Interior Bruto (PIB). El presupuesto de defensa asciende actualmente a 21.400 millones de euros, es decir, el 1,95% del PIB; los 2.400 millones de euros adicionales ayudarán a cumplir los requisitos de la OTAN.
Rudis03ARG
Según el artículo, de los 85 F35A previstos (no había otra opción para sustituir a los F16 que portan la bomba atómica norteamericana que tienen los holandeses, al igual que belgas, alemanes e italianos), antes de que se probasen, se ha reducido a 52, después de conocer lo que ofrecen, el precio y la complejidad técnica del mantenimiento y las actualizaciones.
No está mal, pero supone una reducción neta de unidades. Sí, las capacidades son muy superiores a las del F16 al que sustituye, pero también los aviones enemigos tienen mayores capacidades que la generación anterior.
¿ El SU-57 ? ¿ EL J-20 ? ¿ otros de Rusia y China ? Aún no se les conocen sus verdaderas capacidades , ni tampoco en hipotéticos enfrentamientos contra ellos . No tengo muy claro dicha particularidad , aunque sí que es verdad la primera parte técnica de tu comentario . Un saludo , Víctor .