Polonia recibe un nuevo lote de obuses autopropulsados K9 de Corea del Sur.
Fotos compartidas por la cuenta oficial X @SztabGenWP el 13 de noviembre han revelado la llegada a Polonia de un lote adicional de obuses autopropulsados K9A1 procedentes de Corea del Sur. Esta entrega marca un nuevo hito en el ambicioso programa de modernización de las fuerzas armadas polacas, destinado a reforzar sus capacidades de defensa en respuesta a las crecientes amenazas.
Con esta última entrega, un número aún no determinado de obuses K9A1 se unen a las filas de las Fuerzas Armadas polacas, lo que eleva el número total de estas piezas de artillería en servicio a más de 108.
Este envío forma parte de un contrato de 2.500 millones de dólares firmado en agosto de 2022 entre el Ministerio de Defensa de Polonia y Hanwha Aerospace, que prevé la adquisición de 212 sistemas K9 para 2026, incluidas municiones, repuestos, capacitación y apoyo logístico.
Para mejorar aún más su poder de artillería, Polonia firmó un segundo contrato en 2023, valorado en 2.600 millones de dólares, por 152 unidades adicionales, incluidos 146 obuses K9PL adaptados específicamente para satisfacer las necesidades polacas.
La versión K9PL, diseñada para satisfacer las necesidades específicas de Polonia, está equipada con sistemas de fabricación polaca, como el sistema de comunicación FONET y el sistema de control de tiro TOPAZ desarrollado por el Grupo WB, lo que permite una integración óptima con otras fuerzas nacionales.
Estas adaptaciones locales también incluyen un blindaje reforzado para una mayor protección contra amenazas balísticas y metralla, así como componentes fabricados en el país para apoyar la soberanía tecnológica de Polonia.
Además, el K9PL incorpora un sistema de defensa activa para contrarrestar misiles antitanques. También se beneficia de un sistema mejorado de navegación inercial y control de tiro para una mayor precisión de puntería y un sistema de carga semiautomático, que mejora la cadencia de tiro durante operaciones de alto ritmo.
La adquisición por parte de Polonia de obuses autopropulsados K9 se enmarca en una estrategia de defensa más amplia para abordar las tensiones regionales y los crecientes riesgos de seguridad, en particular los que provienen de Rusia. Como miembro de la OTAN con una extensa frontera oriental, Polonia considera que esta capacidad de artillería móvil es esencial para disuadir amenazas y responder rápidamente en caso de conflicto.
La artillería autopropulsada como el K9 ofrece una potencia de fuego flexible y móvil, lo que permite despliegues rápidos en el campo, un activo crítico en la guerra moderna, donde la movilidad y la respuesta rápida pueden afectar significativamente los resultados operativos.
En comparación con las fuerzas blindadas de otros países, la inversión de Polonia en artillería autopropulsada se destaca como un componente central de su esfuerzo de modernización, junto con inversiones sustanciales en aviación y sistemas de defensa aérea.
Mientras Polonia mejora sus capacidades aéreas y su infantería mecanizada, se centra en sistemas de artillería autónomos como los obuses K9 para apoyar operaciones terrestres intensivas y defender eficazmente su territorio. Esta estrategia de equipamiento permite a Polonia mantener fuerzas flexibles y móviles, complementando sus activos aéreos y ofreciendo capacidades de respuesta rápida en grandes áreas.
Al reforzar su artillería, Polonia adopta un enfoque similar al de países como Corea del Sur, que invierte en artillería terrestre fuerte para protegerse contra amenazas regionales.
A escala europea, Polonia se perfila como una potencia líder, comprometida con la construcción de una de las fuerzas de artillería más grandes y modernas del continente. Con la adquisición de los obuses autopropulsados K9, ya supera las capacidades de artillería de varias naciones europeas comparables.
Por ejemplo, Francia opera alrededor de 77 cañones autopropulsados CAESAR, mientras que Alemania tiene aproximadamente 100 Panzerhaubitze 2000. Ambos países también están invirtiendo en proyectos de modernización, pero Polonia, al integrar subsistemas nacionales como FONET y TOPAZ, fortalece su autonomía tecnológica e interoperabilidad, mientras que muchos otros países europeos dependen de subsistemas importados, especialmente para el comando y la comunicación.
En comparación, Polonia se centra en sistemas con amplios alcances de tiro y capacidades de respuesta rápida, características muy valoradas por las naciones de Europa del Este debido a su proximidad a regiones geopolíticamente inestables.
Con contratos en curso para la adquisición de más de 360 sistemas K9 para 2027, Polonia se convertirá en una de las mayores fuerzas de artillería autopropulsada de Europa, junto con potencias militares como Rusia y Turquía. Este posicionamiento convierte a Polonia en un actor clave en la defensa terrestre dentro de la OTAN y la Unión Europea.
Rudis02ARG