Rusia sigue teniendo problemas para alimentar a las tropas y repostar los tanques en Ucrania.

Rusia sigue luchando por abastecer a sus fuerzas en Ucrania con las necesidades más básicas tres semanas después de que sus tropas invadieran el país vecino el 24 de febrero, dijo un alto funcionario de defensa de Estados Unidos.

«Claramente no estaban preparados para que estuvieran en la posición en la que se encuentran tres semanas, básicamente congelados alrededor del país en múltiples líneas de ejes, luchando para abastecerse de combustible y alimentar a sus tropas y suministrarles armas y municiones [mientras] se encuentran con una resistencia ucraniana muy decidida», dijo el funcionario.

Desde que comenzó su guerra contra Ucrania, el avance de Rusia a través del país y hacia su capital ha sido más lento de lo que Estados Unidos cree que esperaba el presidente ruso Vladimir Putin.

El avance inicial de las fuerzas rusas en Ucrania se estancó rápidamente cuando sufrieron por primera vez escasez de suministros en la primera semana de la invasión.

«Ya hablamos en la primera semana de que no habían planificado adecuadamente la logística y el mantenimiento, que tenían problemas para abastecer de combustible e incluso para alimentar a sus tropas». «Hemos visto que intentan superar algunos de esos… problemas, pero siguen luchando por mantener a sus tropas en el terreno».

Estados Unidos también ha visto «indicios anecdóticos» de que la moral de los rusos está decayendo debido al «pobre liderazgo, la falta de información que las tropas están recibiendo sobre su misión y objetivos» y su sorpresa al «ser resistidos tan ferozmente como lo han sido».

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania dijo que los ucranianos habían matado a unos 12.000 soldados rusos y destruido 86 aviones, 108 helicópteros, 444 tanques y 1.435 vehículos blindados. Hasta la fecha, Estados Unidos no ha podido verificar el recuento de bajas de ninguno de los dos ejércitos.

Hasta ahora, Putin no ha tratado de trasladar más suministros, equipos o fuerzas a Ucrania desde que envió los más de 170.000 soldados y equipos que pasó meses apilando a lo largo de las fronteras del país con Bielorrusia y Rusia.

Sin embargo, Estados Unidos ha visto algunos indicios de que Rusia podría estar considerando opciones para hacerlo, calificando de «digno de mención» la necesidad de reabastecimiento a las tres semanas de una guerra.

«Creemos absolutamente que, aunque [los rusos] todavía tienen la mayor parte de su poder de combate disponible, [el hecho de que] estén hablando de reabastecimiento y dotación de recursos te dice que están empezando a preocuparse por el tiempo que les queda aquí», dijo el funcionario.

Hasta el jueves, las fuerzas rusas aún no habían avanzado hacia Kiev y permanecían a unos 18 kilómetros al este del centro de la capital. Las fuerzas ucranianas siguen controlando la cercana ciudad de Brovary a pesar de los ataques rusos.

Chernihiv, a unos 88 kilómetros al norte de Kiev, sigue aislada, al igual que Mariupol, en el sur, donde las fuerzas rusas llevan más de una semana lanzando misiles de largo alcance.

En el suroeste de Ucrania, Estados Unidos ha visto algunos buques de superficie de la armada rusa en el Mar Negro, entre ellos una fragata, dos buques anfibios y un buque de guerra de minas. Sin embargo, no ha habido indicios de que se espere un asalto anfibio inminente.

Aunque los rusos siguen estancados, el funcionario dijo que Ucrania no es un «entorno estático: hay muchos combates».

«La razón por la que no han podido avanzar es porque [los ucranianos] se están resistiendo muy activamente a cualquier movimiento de los rusos, así que no es como un estancamiento en el que ambos bandos simplemente van a acampar». «Se están resistiendo activamente a cualquier movimiento de los rusos».

Desde el comienzo de la guerra, Rusia ha lanzado más de 1.000 misiles contra Ucrania. En los últimos días, las fuerzas invasoras han recurrido cada vez más a municiones no guiadas de precisión, conocidas como «bombas tontas», que suelen causar más víctimas civiles debido a su menor índice de precisión en el blanco.

Los problemas de suministro de Rusia también podrían haber contribuido a su mayor uso de bombas mudas.

«Creemos que es posible que estén conservando sus municiones guiadas de precisión o que empiecen a experimentar escasez».

Muchos civiles ya han muerto en Ucrania mientras las fuerzas rusas siguen atacando el país, a menudo golpeando infraestructuras civiles como hospitales, escuelas y complejos de apartamentos.

Caitlin Doornbos