Saab suministrará armas antitanque al ejército británico.
El contratista de defensa sueco ha sido seleccionado para reforzar el arsenal de armas antitanque del Ejército británico.
El Ministerio de Defensa británico ha adjudicado a Saab un contrato de 229 millones de libras esterlinas (280 millones de dólares) para el suministro de sistemas de armas ligeras antitanque de nueva generación (NLAW) para el Ejército británico.
Como parte del contrato, las armas se fabricarían en unas instalaciones de Thales en Belfast (Irlanda del Norte).
El nuevo lote de armas antitanque repondría las existencias actuales del Reino Unido, de las que se ha echado mano para apoyar la resistencia en curso de Ucrania contra Rusia tras la invasión de finales de febrero.
Los sistemas de armas, obtenidos a través de Defence Equipment and Support, se entregarán entre 2024 y 2026, con un tramo inicial de 500 unidades que se entregará en 2023 a través de un acuerdo de adquisición independiente.
El NLAW es un sistema de misiles lanzados desde el hombro que combina armas ligeras antiblindaje con sistemas de misiles guiados pesados manejados por tripulación. Las armas son capaces de destruir un carro de combate moderno fuertemente protegido a una distancia de entre 20 y 800 metros.
El secretario de Defensa, Ben Wallace, destacó la importancia de esta capacidad, reflexionando sobre su impacto durante el conflicto entre Rusia y Ucrania.
«Estas armas ligeras antitanque de nueva generación han desempeñado un papel decisivo en el apoyo al ejército ucraniano para hacer retroceder a las fuerzas invasoras ilegales rusas», declaró.
«Trabajando con nuestros socios industriales de primera clase, seguimos cumpliendo nuestro compromiso con la OTAN garantizando que nuestras Fuerzas Armadas recibirán un suministro constante de estas armas en los próximos años, al tiempo que apoyamos el empleo en el Reino Unido a lo largo y ancho del país».
Esta última adquisición del Ministerio de Defensa británico se produce pocas semanas después de la adjudicación de un contrato de 15,4 millones de libras a la empresa MSubs, con sede en Plymouth, para el desarrollo de un buque submarino autónomo extragrande sin tripulación (XL-AUV).
La empresa ha recibido el encargo de entregar el buque a la Marina Real dentro de dos años, en el marco del denominado «Proyecto Cetus».
El buque estará diseñado para proteger infraestructuras nacionales críticas y vigilar la actividad submarina, operando de forma independiente o junto a submarinos tripulados, incluidos los SSN de la clase Astute.
La profundidad máxima operativa de la plataforma superaría la de la flota submarina actual y, según se informa, sería capaz de recorrer aproximadamente 1.000 millas en una sola misión.
Se espera que el Cetus XL-AUV tenga 12 metros de eslora, 2,2 metros de diámetro y 17 toneladas de peso: será el mayor submarino sin tripulación operado por una armada europea.
Reuters