Tropas rusas comparten la misma base aérea que las fuerzas estadounidenses en Níger.

Las fuerzas rusas están operando en la actualidad dentro de una base aérea en Níger, en la que también se encuentran tropas estadounidenses, pero suponen un riesgo mínimo para el personal estadounidense allí desplegado, según declaró esta semana el secretario de Defensa, Lloyd Austin. “Siempre estoy centrado en la seguridad y protección de nuestras tropas… Pero en este momento, no veo un problema significativo aquí en términos de protección de nuestras fuerzas”, dijo Austin durante una conferencia de prensa en Honolulu el jueves.

Austin explicó que los rusos se encuentran en un complejo separado de la base de Niamey, la capital de Nigeria. Las tropas rusas “no tienen acceso a las fuerzas estadounidenses ni a nuestros equipos”, afirmó Austin. Los comentarios de Austin se produjeron en respuesta a una pregunta sobre la situación en Níger tras una información de Reuters, que afirmaba que los rusos estaban utilizando un hangar separado en la Base Aérea 101 de Niamey. El Mando de Estados Unidos en África, con sede en Stuttgart, dijo el viernes que la llegada de los rusos se produjo hace varias semanas.

Según el AFRICOM, la base de Niamey se compone de varios recintos, que anteriormente estaban destinados a fuerzas extranjeras visitantes, como las francesas. “No se trata de un acontecimiento nuevo. Sin embargo, seguimos vigilando la situación y tomando todas las medidas necesarias y prudentes para garantizar la seguridad de las fuerzas, instalaciones y equipos estadounidenses”, señaló AFRICOM en un comunicado del mando.

La presencia rusa en esa base, situada junto al aeropuerto internacional Diori Hamani de Niamey, es el último giro en el desmantelamiento de la misión de AFRICOM en Níger. Funcionarios militares estadounidenses se encuentran en Níger para mantener conversaciones relacionadas con la inminente salida de unos 1.100 soldados del país. Las conversaciones responden a la exigencia formulada el mes pasado por la junta militar de Níger de que abandonen el país todas las fuerzas estadounidenses.

Aunque Níger ha sido la pieza central de los esfuerzos antiterroristas de Estados Unidos en África occidental, el derrocamiento del gobierno democrático del país el verano pasado paralizó la mayoría de esas operaciones. Desde entonces, las tropas estadounidenses han estado esperando en Níger, concentradas principalmente en una base separada de aviones no tripulados en la ciudad de Agadez que entró en funcionamiento hace varios años con un coste de más de 110 millones de dólares.

La ruptura de relaciones entre Estados Unidos y la junta militar de Níger ha abierto la puerta a Rusia, que ha enviado tropas al país por invitación de los nuevos dirigentes nigerinos. Para Estados Unidos, una serie de golpes de Estado en África occidental, incluidos los de Burkina Faso y Malí, ha dejado al ejército con un número cada vez menor de socios para sus esfuerzos antiterroristas. Chad, históricamente otro socio militar cercano, siguió el mes pasado a Níger e indicó que quería que las tropas estadounidenses salieran de su país. Las conversaciones entre Chad y Estados Unidos siguen en curso.

John Vandiver