Un misil no puede borrar el vergonzoso secreto de sigilo de un dron ruso.

Derribar su propio y flamante dron cuando se descontroló sobre Ucrania puede ser una de las mayores vergüenzas jamás sufridas por la Fuerza Aérea rusa. Pero puede que lo peor esté por llegar.

El Sukhoi S-70 Okhotnik-B («Hunter-B») era un prototipo de avión no tripulado de combate furtivo, un «fiel compañero» diseñado para operar junto con el nuevo caza Sukhoi Su-57 «Felon». Tras ser derribado por el Su-57 que lo acompañaba, los rusos dispararon un misil Iskander contra el lugar del accidente para destruir los restos del S-70. Las imágenes muestran que mucho antes de que se produjera el ataque con misiles, los ucranianos ya se habían llevado componentes clave para analizarlos.

Es probable que ese análisis resulte muy embarazoso para los rusos, pero quizá no por las razones que cabría esperar.

Sigilo: El arte más oscuro

La tecnología para reducir la facilidad con la que un avión puede ser visto en el radar se conoce técnicamente como «reducción de la firma» y comúnmente como sigilo. Aunque el planteamiento general se conoce desde la Segunda Guerra Mundial, la idea de diseñar específicamente un avión que fuera efectivamente invisible a los radares fue revolucionaria y altamente clasificada.

Los prototipos del sigiloso F-117 Nighthawk volaron en los años 70, pero no fue hasta 1980 cuando el secretario de Defensa Harold Brown anunció oficialmente la existencia de la nueva «tecnología sigilosa».

Nadie sabía qué aspecto tenía el nuevo avión furtivo y durante años circularon rumores sobre la aparición de un misterioso «F-19 Stealth Fighter». Se lanzaron varios modelos supuestamente basados en información privilegiada; ninguno se parecía al F-117, lo que sugería una activa campaña de desinformación.

En julio de 1986, un F-117 pilotado por el comandante Ross Mulhare, del 4450th Tactical Group, se estrelló contra una ladera en el interior del Sequoia National Forest, matando a Mulhare en el acto. Los medios de comunicación se interesaron mucho por el misterioso avión, del que se sospechaba que era un prototipo secreto.

El F-117 quedó completamente destruido y se puso en marcha una operación de limpieza masiva. Se acordonó una zona de 300 metros alrededor del lugar del accidente y se retiró todo rastro de restos. Incluso se tamizó el suelo en busca de fragmentos enterrados.

Una vez retirados todos los restos, las Fuerzas Aéreas trajeron un F-101 Voodoo que había estado almacenado durante 20 años, lo rompieron y distribuyeron las piezas por el lugar del accidente. Los medios de comunicación, incluido un equipo de la KERO-TV de Bakersfield, tuvieron acceso y se les permitió tomar imágenes de los restos falsos.

El F-117 no fue reconocido públicamente hasta 1988, y su aspecto no se reveló hasta 1990.

Trece años después del accidente de Mulhare, cuando un F-117 fue derribado por las fuerzas serbias, muchos comentaristas esperaban que la USAF bombardeara los restos para preservar sus secretos. Sin embargo, para entonces la tecnología furtiva del F-117, desarrollada unos veinte años antes, se consideraba anticuada y no se hizo ningún esfuerzo por destruirla. En el Museo de la Aviación de Belgrado se exponen partes del avión con material absorbente de radar, antaño secreto.

Avances rusos en materia de sigilo

El sigilo se consigue principalmente mediante una cuidadosa conformación del fuselaje, evitando las líneas rectas y las esquinas afiladas que reflejan el radar. Sin embargo, también es crucial garantizar que la superficie minimice la reflexión del radar.

Uno de los revestimientos originales o materiales absorbentes de radar (RAM) era una pintura especial conocida como «bola de hierro», que contenía partículas metálicas. El tamaño y la forma adecuados de una partícula del metal adecuado pueden absorber las ondas de radio y disiparlas en forma de calor en lugar de reflejarlas.

Los aviones furtivos también pueden incorporar estructuras absorbentes de radar, panales de material que atrapan y dispersan las ondas de radar.

Encontrar una combinación eficaz de materiales y estructuras para reducir al mínimo la visibilidad de determinadas longitudes de onda de radar desde determinadas direcciones es una disciplina difícil y compleja, con muchos compromisos. Los nuevos metamateriales, que en principio pueden usarse para crear una «capa de invisibilidad», se utilizan mucho en la investigación actual sobre el sigilo.

En un principio, Rusia prestó poca atención a la tecnología furtiva, pero en los últimos años ha reivindicado avances en este campo y el nuevo Su-57 se describe como un caza furtivo con una firma de radar mucho menor que las generaciones anteriores. Según funcionarios rusos, el avión no tripulado S-70 está «fabricado con el uso de materiales y revestimientos especiales que lo hacen prácticamente invisible a los radares».

Los drones muertos cuentan historias

Tras derribar el S-70, los rusos atacaron el lugar del accidente con un misil balístico Iskander. Estos misiles son escasos y caros, y desviar uno de la campaña contra las ciudades de Ucrania sugiere que éste era un objetivo de alta prioridad. Hay varias razones por las que los rusos querrían impedir que Occidente recuperara los restos del avión no tripulado.

Lo menos probable es que la OTAN adquiera tecnología que pueda utilizar en sus propios aviones. Nadie cree seriamente que Rusia esté por delante en este campo, e incluso las optimistas afirmaciones rusas sobre el Su-57 indican que es mucho menos sigiloso que los aviones occidentales.

Más importante es el riesgo de que los ingenieros occidentales descubran para qué longitudes de onda ha sido diseñado el S-70 y desde qué ángulos, y para cuáles seguirá siendo visible. Esta información podría anular en cierta medida la capacidad furtiva del S-70. Dado que es un dron relativamente grande, lento y caro, si su sigilo se ve comprometido será mucho menos útil.

Más grave aún es que el S-70 se diseñó junto con el Su-57, el avión de combate ruso de última generación, y es probable que utilice los mismos materiales y técnicas de ocultación. Si Occidente puede ver cómo funciona el sigilo del S-70, podría tener una idea bastante buena de cómo derrotar también al Su-57.

Pero hay una explicación más probable de lo que los rusos están realmente tratando de ocultar. Y es que el emperador no tiene ropa, que su tecnología furtiva es inexistente.

El gran engaño del sigilo

Ya hemos visto algunos indicios de que el sigilo ruso no está a la altura. En 2023, unos ingenieros ucranianos pudieron analizar los restos de un misil de crucero ruso de largo alcance Kh-101/ X-101 que supuestamente tenía un revestimiento antirradar. Según el sitio ucraniano de noticias Defense Express, no es así.

«Los resultados de la investigación muestran que, a pesar de las afirmaciones rusas, el Kh-101 no está cubierto con una pintura especial que reduce la reflexión de la radiación», afirma Defense News. «Todas las historias rusas sobre el recubrimiento de RAM en el cuerpo del Kh-101 resultaron no ser más que propaganda».

Del mismo modo, cuando los rusos publicaron recientemente imágenes del nuevo Su-57, los analistas occidentales se horrorizaron por su tosco acabado. Los aviones furtivos necesitan tener una superficie perfectamente lisa, ya que incluso unas ligeras proyecciones pueden afectar significativamente al retorno del radar.

El bombardero B-2 es famoso por sus exigentes requisitos de mantenimiento, con la necesidad de aplicar cinta absorbente de radar a superficies específicas y tolerancias de milésimas de pulgada. El Su-57 tiene las cabezas de los tornillos y los remaches al descubierto por toda el ala y el fuselaje, lo que sugiere malas cualidades de sigilo.

Dada la cultura rusa, es muy posible que ni siquiera los altos mandos sean conscientes de estas deficiencias de su tecnología furtiva. Nadie quiere dar nunca malas noticias, y los contratistas de defensa rusos saben cómo sobornar a los funcionarios de adquisiciones hasta la cima.

Es posible que los dirigentes rusos estén a punto de descubrir que su caro y tan cacareado dron invisible no es en absoluto sigiloso. Y lo descubrirán leyéndolo en los medios de comunicación públicos.

David Hambling

10 thoughts on “Un misil no puede borrar el vergonzoso secreto de sigilo de un dron ruso.

  • el 9 octubre, 2024 a las 07:14
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    Para que vean, el cuento de que un misil Iskander-M, destruyó los restos, es otro fake de la granja de troles ruso-bolivarianos. El combustible se quemó y explotaron las dos bombas planeadoras que portaba.

    Un Iskander-M habría dejado un cráter.

    ¿Qué podemos observar del «altamente tecnológico» fuselaje de 8 millones de dólares?

    Aluminio, fibra de vidrio, unos refuerzos de kevlar, chapa de aluminio remachada y pintura. Nada más. Fibras de carbono son demasiado caras…

    También quedaron muchos componentes intactos o semidestruidos, suficiente para exponer sus verdaderas capacidades…

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  • el 9 octubre, 2024 a las 09:03
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    Lo dicho, un bluff, que los prorrusos se van a dedicar a camuflar.
    Menudo descrédito para las VKS. Que sigan haciendo videos de sus pilotos bailando antes de bombardear hospitales.

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  • el 9 octubre, 2024 a las 09:52
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    No creo que la pérdida del S-70 sea una gran vergüenza para el Ejército Ruso, después de casi 3 años de guerra ya nadie espera nada de ellos, quizás tomar alguna aldea en el Donbass o seguir matando civiles en Ucrania, las capacidades militares rusas no dan para más. Y no hay que olvidar que los rusos también tienen que avanzar DENTRO de Rusia.
    Eso sí, me sorprende que el SU-57 y el dron volaran como Pedro por su casa 17 km dentro de Ucrania sin ser derribados…ya se que es difícil pensar que un sistema de armas ruso pueda ser sofisticado o cumplir con sus especificaciones, pero me sorprende.

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    • el 9 octubre, 2024 a las 11:43
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      Juan Antonio no es de sorprenderse que el SU-57 haya sobrevivido, las baterías antiaéreas de largo alcance ucranianas, se encuentran al menos 100 km de distancia del frente ucraniano y a una velocidad de 900 km, para recorrer los 17 km, requerirían de 68 segundos. Recuerde, desde que los ucranianos derribasen helicópteros en territorio ruso, los aliados les han costado los suministros de misiles antiaéreos de largo alcance. Solo fue cuestión de suerte, que uno de corto alcance no se encontró en las cercanías, a la altura que volaron, los Stinger o los Mistral, no los hubiesen alcanzado.

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  • el 9 octubre, 2024 a las 10:17
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    En 1976, Viktor Ivanovich Belenko un traidor entregó un MIG25 a USA, esa traición fue bendita y como dice sabio refranero español “No hay mal que por bien no venga”, fruto de la traición nació el MIG31.
    Otro hecho famoso ocurrió El 4 de diciembre de 2011, un vehículo aéreo no tripulado Lockheed Martin RQ-170 Sentinel estadounidense fue capturado por fuerzas militares iraníes, sería emocionante saber que opino el Sr David Hambling y también que opinaría sobre el F-117 derribado por parte del Ejército Popular Yugoslavo el 27 de marzo de 1999, durante la campaña de bombardeos de la OTAN contra Yugoslavia.
    En 1943 Las enormes pérdidas de submarinos alemanes, inclusive de los tipo VIIC/42 con sus 270 metros de capacidad de inmersión, provocó el nacimiento del tipo XXI, que fue copiado por USA_otan y la URSS, hasta el mas mínimo tornillo.
    Lo dicho no hay mal que por bien no venga.
    Buen día

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    • el 9 octubre, 2024 a las 11:30
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      Antonio / Amil Ekram / Juan José / Juan blas.

      Por lo que se ve, la captura del supuesto RQ-170 no le ha servido, tanto a Irán, Rusia o a China, no han logrado producir un clon.

      Del F-117, la misma historia, ni siquiera su piel absorbente al radar han clonado, lo usarían en sus aviones de 5.ª generación.

      La clase Tang, fue la última de submarinos estadounidenses diesel/eléctrico, este se desarrolló antes de finales de la 2.ª Guerra Mundial. Así que no copiaron nada, incluso, los alemanes copiaron el sistema Snorkel de los submarinos holandeses capturados.

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    • el 9 octubre, 2024 a las 13:55
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      Otra vez con el remanido cuento del derribo del F-117 por parte del Ejército Popular Yugoslavo.
      Lo derribaron a ojo porque siempre pasaba por el mismo lugar, a la misma hora, a la misma altura. Y no es muy rapido.

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  • el 9 octubre, 2024 a las 10:31
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    Para que no fuese otro caso vergonzoso, Putin mando a borrar del mapa su mansión en las costas del Mar Negro, según comparación de fotos de satélite del año pasado y actuales, donde existía esa opulenta construcción, solo queda un terreno baldío. A que mejor la mando a eliminar antes de que Ucrania se adjudicara un bombardeo.

    Sí que saben como derrochar dinero, claro, solo lo robaron.

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  • el 9 octubre, 2024 a las 11:05
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    El calvario de Putin es el absoluto desastre de la direccion/gestion de las fuerzas armadas rusas, con una total corrupciòn, analfabetismo,sectarismo y amiguismo, que convierte, cualquier rama del ejercito en un pozo sin fondo, en la inversion -regeneracion de sus medios. En estado de paz es facilmente disimulable, pero esta guerra contra un viejo conocido esta desnudando las carencias técnicas del otrora gigante ruso.

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  • el 9 octubre, 2024 a las 21:03
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    Coincido con la línea del artículo; más que para descubrir las maravillas técnicas del dron sus restos servirán para mostrar sus carencias y debilidades.
    Con lo felices que aparecían los rusos con su Leopard (capado y desnudo de tecnología sensible) para estudiar hasta la última tuerca y ahora van y pierden lo que según ellos es la última maravilla en dones.

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