Lockheed Martin y el Pentágono cierran un nuevo acuerdo para la adquisición de 296 aviones F-35.
Lockheed Martin confirmó el lunes 29 de septiembre que había llegado a un acuerdo con la Oficina del Programa Conjunto F-35 del Pentágono para producir y entregar hasta 296 aviones de combate F-35 bajo los Lotes 18 y 19. Las entregas están programadas para comenzar en 2026, lo que reforzará la preparación militar estadounidense y apoyará a las naciones aliadas y a los clientes de Ventas Militares al Extranjero. El acuerdo es importante porque refuerza la ventaja competitiva de Estados Unidos en defensa y garantiza a los socios globales el acceso a tecnología estadounidense avanzada.
Este contrato recientemente finalizado confirma el dominio continuo de Lockheed Martin en el sector de los cazas de quinta generación y consolida el futuro del F-35 como el núcleo del poder aéreo occidental durante las próximas dos décadas. El anuncio se produce tras meses de negociación tras un acuerdo de entendimiento alcanzado inicialmente a finales de 2024, durante el cual Lockheed adelantó fondos propios para mantener la producción y proteger la base de suministro de interrupciones. Esta fase provisional ha finalizado con la autorización contractual completa para los lotes 18 y 19.
Lockheed Martin enfatiza que el aumento promedio del precio por aeronave en los lotes 18 y 19 se mantiene por debajo de la tasa de inflación estadounidense, un dato importante en medio de la continua preocupación por el aumento de los costes de adquisición en defensa. «El contrato del F-35 para los lotes 18 y 19 representa la confianza continua en el avión de combate más asequible y capaz en producción hoy en día», declaró Chauncey McIntosh, vicepresidente y gerente general del programa F-35 Lightning II en Lockheed Martin.
Este contrato ayuda a asegurar la continuidad de la línea de producción, evitando pausas industriales que podrían poner en peligro a proveedores de menor nivel. Además, mantiene los plazos de entrega globales alineados con los plazos clave de modernización de la OTAN y las fuerzas aéreas aliadas. Con más de 1230 aeronaves actualmente en servicio y más de un millón de horas de vuelo registradas en 12 países, el programa F-35 ha alcanzado una madurez operativa que pocos programas de cazas tácticos alcanzan. Los lotes 18 y 19 amplían esta madurez a la flota global.
El acuerdo también desempeña un papel fundamental en la transición a las capacidades del Bloque 4, fundamentales para la próxima evolución de la aeronave. Las actualizaciones del Bloque 4 prometen más de 80 mejoras, incluyendo radares y sensores mejorados, mayor integración de armas, suites de guerra electrónica mejoradas y una fusión de datos más robusta. Si bien estas características avanzadas han sufrido retrasos en su desarrollo e integración, se espera que los Lotes 18 y 19 incluyan configuraciones de hardware totalmente compatibles con el Bloque 4 o que se puedan actualizar rápidamente a dicho estándar una vez que el software esté disponible.
Sin embargo, el contrato no está exento de riesgos. Funcionarios de defensa y expertos de la industria siguen señalando vulnerabilidades en la cadena de suministro, especialmente en componentes de guerra electrónica, microprocesadores de alta gama y sistemas de gestión térmica. Incluso con un crecimiento de costes contenido, las presiones derivadas de la escasez de piezas o las restricciones comerciales geopolíticas podrían afectar a los lotes futuros a menos que se mitiguen activamente. El acuerdo Lockheed-JPO deberá absorber estos riesgos sin provocar nuevas renegociaciones.
Además, mantener la asequibilidad depende en gran medida del mantenimiento de los volúmenes de producción. Si EE. UU. o los países socios reducen las tasas anuales de adquisición debido a restricciones presupuestarias, el coste unitario de los futuros aviones podría aumentar. Por ahora, el compromiso de casi 300 aeronaves en los lotes 18 y 19 respalda la estabilidad de precios y ayuda a mantener la escala industrial en toda la cadena de suministro.
Estratégicamente, la finalización de este contrato envía un mensaje contundente tanto a aliados como a adversarios: Estados Unidos mantiene su compromiso de mantener la superioridad aérea tecnológica, y el F-35 sigue siendo el eje central de dicha estrategia. A medida que Lockheed Martin prepara el terreno para las entregas de 2026, es fundamental vigilar la distribución de variantes entre los tres modelos del F-35, el desglose exacto de precios, incluyendo motores y paquetes de mantenimiento, y la rapidez con la que se implementen las capacidades del Bloque 4 en los nuevos aviones.
Para los países aliados que buscan unirse o ampliar sus flotas de F-35, este acuerdo garantiza la viabilidad a largo plazo del programa, la contención de costes y la hoja de ruta de actualización. El papel del F-35 como piedra angular de la disuasión integrada sigue afianzado, y los Lotes 18 y 19 representan otra inversión significativa en el dominio global del caza.
Alain Servaes
Esos F 35 son los que se ha tenido que tragar Lockheen Martín por culpa del bocazas de Trump , va a ser muy difícil que puedan vender el F 35 fuera de EEUU , porque existen muchas dudas de su coste de mantenimiento, de su grado de disponibilidad y sobretodo de la dependencia de un gobierno de EEUU para suministro de repuestos , actualizaciones de software.Se ha cargado de un plumazo toda la política exterior y de defensa de décadas de EEUU y la prueba es que muchos paises de Oriente Medio están cambiando su política de Comoras de defensa hacia Europa e incluso mirando a China ,antes que a EEUU. Gran metedura de pata.