Los F-18 españoles permanecerán en Rumanía al menos 90 días más.

Los aviones de combate F-18 españoles continuarán hasta el próximo mes de junio en Rumanía. La misión de la OTAN para proteger el flanco oriental comenzó en diciembre y debía terminar el 31 de marzo. Sin embargo, el Ministerio de Defensa ha decidido prorrogar el despliegue tres meses más, según el Estado Mayor de la Defensa [EMAD], responsable de las operaciones en el exterior.

La ampliación de la misión implica, por supuesto, la sustitución tanto del personal como de los cazas desplegados desde diciembre. De esta forma, siete F-18 del Ala 12 de la Base Aérea de Torrejón sustituirán a los ocho aviones de combate del mismo modelo del Ala 15 de la Base Aérea de Zaragoza, que hasta ahora operaban en el conocido destacamento de Viespe.

Los cazas del Ala 12 ya han llegado a la base rumana de Borca-Fetesti y esta semana finalizará el despliegue del personal de la segunda rotación, que será de unos 130 militares, al igual que el primer contingente. La ceremonia oficial de entrega tuvo lugar hace unos días.

F18 en Rumanía

En los últimos cuatro meses, los F-18 españoles han realizado más de 750 horas de vuelo en misiones de policía aérea como parte de la respuesta de España a la petición de la OTAN de reforzar el escudo aéreo de los aliados en el flanco oriental de la alianza. Esta misión se conoce como Policía Aérea Reforzada [EAP].

Los vuelos se realizan en coordinación con las Fuerzas Armadas de Rumanía e Italia con la misión de prevenir y, en su caso, responder a cualquier intento de sobrevuelo no autorizado sobre países aliados en la zona bajo su control. «Estas medidas de disuasión se han reforzado desde la invasión rusa de Ucrania, de la que ya ha pasado más de un año», recuerda el EMAD.

La operación forma parte de los esfuerzos colectivos de la Alianza para vigilar el espacio aéreo de sus miembros, especialmente los situados en la denominada Zona de Aplicación Meridional, como Rumania, Bulgaria o Albania. El despliegue aliado en Europa Sudoriental se lleva a cabo bajo el mandato de la OTAN en el marco de la defensa colectiva aliada.

Esta misión de policía aérea es una de las medidas de aseguramiento de la OTAN introducidas en 2014, tras la anexión rusa de Crimea, para aumentar las capacidades existentes de los países aliados en el flanco oriental de la Alianza y, con ello, subraya el EMAD, «demostrar la determinación colectiva de disuadir a cualquier adversario que suponga una amenaza potencial de agresión contra un Estado miembro de la OTAN».

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