Rusia envía nuevos lanzallamas TOS-1A Solntsepek con protección antidrones mejorada.
Uralvagonzavod, filial de la corporación estatal Rostec, ha anunciado el envío de un nuevo lote de lanzallamas pesados TOS-1A Solntsepek a las Fuerzas Armadas rusas.
Esta entrega, que coincidió con el Día de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica, destaca por la integración de un sistema de protección antidrones mejorado. Los sistemas fueron aprobados tras superar pruebas de campo que confirmaron la fiabilidad de sus mecanismos e instrumentos en diversas condiciones operativas.
El anuncio es significativo porque demuestra que, en lugar de reducir su presencia, Rusia está reforzando y adaptando un elemento clave de su apoyo de fuego pesado en el teatro de operaciones ucraniano.
El TOS-1A Solntsepek, presentado por Rostec, es un sistema lanzallamas pesado montado sobre el chasis de un tanque T-72, diseñado para proporcionar fuego de apoyo concentrado a corto y medio alcance. Sus cohetes pueden lanzarse desde unos cientos de metros hasta varios kilómetros, brindando apoyo directo a las unidades de asalto.
Una salva completa puede cubrir hasta 40.000 metros cuadrados en cuestión de segundos, lo que permite a las tripulaciones saturar rápidamente un área definida. En el conflicto actual, Rostec afirma que las tripulaciones del Solntsepek se emplean para atacar posiciones fortificadas, puestos de control de vehículos aéreos no tripulados (VANT), concentraciones de personal y vehículos blindados en múltiples ejes de operaciones.
Según Rostec, los sistemas enviados en este último lote se sometieron a pruebas de funcionamiento y aceptación para verificar el cumplimiento de los requisitos tácticos y técnicos antes de ser transferidos a las unidades de primera línea. El fabricante destaca un ciclo continuo de retroalimentación: el empleo en combate se considera el principal motor de la modernización, y los ingenieros y diseñadores perfeccionan el sistema en función de la experiencia operativa.
Rostec destaca varias ventajas del concepto TOS-1A. La combinación de un chasis de tanque protegido, distancias de combate relativamente cortas y una salva capaz de cubrir decenas de miles de metros cuadrados confiere al sistema un papel distintivo en la penetración de posiciones fortificadas y la neutralización de nodos clave, como puestos de mando de vehículos aéreos no tripulados (VANT).
La empresa describe al TOS-1A como uno de los sistemas más eficaces del arsenal actual de Rusia y subraya que no tiene análogos directos. Paralelamente, se está ultimando el desarrollo de una variante modernizada del TOS basada en el chasis del tanque T-80, que se espera que ofrezca mayor alcance, precisión mejorada y una mayor automatización de los procesos clave.
Junto con el nuevo sistema antidrones, estas mejoras buscan mantener la operatividad del sistema en un campo de batalla cada vez más dominado por las amenazas aéreas no tripuladas y las contramedidas de precisión.
La integración de un sistema de protección antidrones específico en el último lote revela especialmente las percepciones y prioridades rusas ante las amenazas. Rostec señala que este nuevo complejo defensivo se diseñó a partir de la experiencia adquirida en combate, lo que indica que los vehículos aéreos no tripulados se consideran ahora uno de los principales peligros para los valiosos activos de apoyo de fuego.
Al reforzar el Solntsepek contra el reconocimiento y los ataques con drones, los estrategas rusos buscan garantizar la capacidad de supervivencia del sistema mientras proporciona fuego concentrado en apoyo de las operaciones de asalto. Este enfoque refleja una tendencia más amplia en la que la artillería, los sistemas de cohetes y las plataformas blindadas se adaptan específicamente para resistir los vehículos aéreos no tripulados, en lugar de considerarlos una preocupación secundaria.
Desde una perspectiva estratégica, la entrega, ya anunciada, de sistemas TOS-1A adicionales con nuevas características de protección sugiere que Rusia pretende mantener una estrategia centrada en potentes ataques localizados contra posiciones atrincheradas y puntos críticos en Ucrania.
El mensaje de Rostec enfatiza la continuidad de la producción, la integración de la información obtenida en combate y el avance hacia variantes más automatizadas y de mayor alcance, lo que en conjunto indica una preparación para operaciones sostenidas, en lugar de un ajuste a corto plazo. Al invertir tanto en potencia de fuego como en capacidad de supervivencia frente a drones, Rusia señala que espera que la combinación de defensas fortificadas y el uso generalizado de vehículos aéreos no tripulados (VANT) siga siendo un rasgo definitorio del conflicto, y que su respuesta continuará basándose en sistemas lanzallamas pesados modernizados como instrumento clave de dicha estrategia.
Teoman S. Nicanci


