El MQ-25 despegará de portaaviones en 2026, dice el jefe aéreo de la Marina de EE.UU.

El vicealmirante Daniel Cheever expresó su confianza en la capacidad de la Armada para integrar sin problemas el nuevo avión cisterna en el ala aérea a pesar de los desafíos asociados con las tecnologías no tripuladas y las operaciones de vuelo de portaaviones.

El principal aviador operativo de la Marina de los EE.UU. ha dicho que confía en que el servicio tendrá su nuevo avión cisterna no tripulado volando este año y operando desde portaaviones en el 2026, caracterizándolo como un punto clave para allanar el camino para futuras aeronaves de próxima generación.

Volaremos con esa plataforma en el año 25, la instalaremos en un portaaviones en el 26 y empezaremos a integrarla, declaró el Vicealmirante Daniel Cheever, comandante de las Fuerzas Aéreas Navales, en San Diego. «Eso abre el futuro del trabajo en equipo tripulado-no tripulado».

«Vamos a ir a por ello a lo grande para poder hacer equipos tripulados-no tripulados desde un portaaviones y eso es un mundo diferente. Abre el futuro de los aviones de combate colaborativos de sexta generación y todo lo que venga después», prosiguió.

El MQ-25, también apodado Stingray, es un avión cisterna no tripulado diseñado para reabastecer a la flota de cazas de ataque al tiempo que realiza una misión secundaria de inteligencia, reconocimiento y vigilancia. También se espera que su puesta en servicio alivie la presión sobre los F/A-18 del servicio, que han tenido que actuar mientras tanto como reabastecedores aéreos, apartándolos de las misiones de ataque.

Boeing ganó el contrato inicial en 2018 para diseñar y producir la aeronave, una oferta que se vio reforzada por prototipos anteriores en el programa Unmanned Carrier Launched Airborne Surveillance and Strike, finalmente abandonado. En ese momento, los funcionarios del servicio dijeron que la aeronave alcanzaría la capacidad operativa inicial -nomenclatura del Pentágono que significa efectivamente que la aeronave está lista para el campo- en 2024, pero los contratiempos del programa han empujado esa fecha al año fiscal 2025.

Boeing ha realizado anteriormente vuelos de prueba con sus prototipos, pero los responsables de la Armada han fijado el año 2025 como fecha para sus propios vuelos de prueba con la aeronave.

Cheever, al que la Armada también denomina «Jefe Aéreo» por ser el aviador operativo de mayor rango, expresó su confianza en la capacidad de la Armada para integrar el MQ-25 en el ala aérea a pesar de los retos operativos asociados a la tecnología no tripulada y al aterrizaje de cualquier aeronave a bordo de la cubierta de vuelo de un portaaviones.

«No veo muchos problemas para ponerlo en marcha», dijo. «Voy a delegar en los instructores de tácticas de armamento, y ellos descubrirán exactamente cómo operar esta cosa sin problemas en un [entorno] de equipo tripulado-no tripulado».

«Así que estoy muy ilusionado, porque necesitamos esa capacidad y la necesitamos este año para empezar a volar», dijo.

Justin Katz