Lockheed Martin entrega el lanzador HIMARS número 750.
Lockheed Martin ha informado de la entrega del lanzador HIMARS número 750, lo que marca lo que la compañía describe como un hito en la historia del programa y un indicador de la creciente demanda entre el Ejército de Estados Unidos y las naciones asociadas.
«Desde los campos de batalla actuales hasta las amenazas emergentes del futuro, el HIMARS ha proporcionado de forma constante precisión y preparación al Ejército de EE. UU. y sus aliados», declaró Tim Cahill, presidente de Misiles y Control de Fuego de Lockheed Martin. Añadió que este hito refleja el papel fundamental del sistema a largo plazo en las operaciones estadounidenses y aliadas.
“Con la reciente entrega del lanzador número 750, marcamos un hito significativo en la historia del programa y un testimonio del poder de la innovación y la manufactura estadounidenses”, aseguró.
Según Cahill, Lockheed Martin ha duplicado la producción anual de HIMARS de 48 a 96 lanzadores para satisfacer las crecientes necesidades operativas.
La compañía explicó que la hoja de ruta de modernización del Ejército de EE. UU. sitúa los disparos de precisión de largo alcance “a la vanguardia de la preparación y la superioridad”. Para respaldar esa estrategia, Lockheed Martin afirma que ha ampliado la capacidad de fabricación, acelerando los plazos de producción y adoptados procesos de fabricación avanzados diseñados para aumentar la velocidad y la escala.

“Estamos alineando nuestras operaciones con la necesidad del Ejército de construir más rápido, integrar de forma más inteligente y mantener a la fuerza lista mediante el aumento de la producción, el fortalecimiento de la cadena de suministro y el mantenimiento de los más altos estándares de calidad”, dijo Bob Orzechowski, vicepresidente de Producción de Fuegos de Precisión de Lockheed Martin.
El lanzador HIMARS, operado por el Ejército de EE. UU. y 14 naciones aliadas, está diseñado para disparar cohetes guiados y misiles de largo alcance desde una plataforma altamente móvil. El sistema se ha utilizado ampliamente en conflictos recientes, donde la movilidad y la precisión de ataque han transformado la doctrina de artillería.
Lockheed Martin señaló que el otoño pasado, la producción anual en su planta de Camden, Arkansas, aumentó de 48 a 96 lanzadores, y que la ampliación se había completado dos meses antes de lo previsto. La compañía indicó que este incremento fue posible gracias a contratos con el Ejército de EE. UU. por valor de 2900 millones de dólares, que financiaron nuevas herramientas, estaciones de trabajo adicionales y la optimización de la cadena de suministro.
La empresa afirmó que los contratos recientes proporcionan una demanda predecible, lo que permite a la planta mantener un mayor rendimiento sin comprometer el control de calidad. La colaboración con el gobierno y los proveedores ha fortalecido la cadena de suministro, lo que permite una entrega más rápida en el terreno.
“La velocidad importa, no solo en el campo, sino también en la planta de producción”, dijo Adam Bailey, director de la planta de Lockheed Martin en Camden. “Al optimizar los procesos y capacitar a nuestra fuerza laboral, ponemos la capacidad al alcance de quienes más la necesitan”.
Cahill destacó que el equipo de Camden ha demostrado una “habilidad excepcional y un compromiso con la entrega de sistemas de alta calidad”, y agregó que el aumento en la tasa de producción está directamente relacionado con la preparación de las fuerzas estadounidenses y aliadas.

La expansión de la producción del HIMARS es crucial para la planificación militar estadounidense, ya que el fuego de precisión de largo alcance sigue desempeñando un papel fundamental en la preparación del Departamento de Guerra para posibles conflictos de alta intensidad. Cuando la demanda de una plataforma aumenta rápidamente, la capacidad industrial se convierte en un factor determinante para la celeridad con que se pueden equipar las unidades operativas.
La capacidad de la empresa para ampliar la producción también influye en la cooperación con sus aliados. Dado que el HIMARS opera en toda Europa y la región del Indo-Pacífico, el equipo compartido facilita la interoperabilidad en materia de formación, planificación, logística y disuasión.
La trayectoria de producción actual indica que el HIMARS seguirá siendo una de las plataformas de fuego de largo alcance principales para las fuerzas estadounidenses y aliadas en un futuro previsible. La compañía afirmó que continuará ampliando el soporte en función de la demanda operativa y en coordinación con los clientes militares.
J.A.B.



Pues lo del Gmars se debería considerar en tanto en cuanto las buenas relaciones entre Indra y Rheinmetall que es el socio preferente para Europa de LM…..por aquello de las fabricas y tal…