Putin envía una señal a Occidente volando en un bombardero con capacidad nuclear.

El presidente ruso, Vladímir Putin, voló el jueves en un bombardero estratégico modernizado Tu-160M con capacidad nuclear, en un acto que probablemente sea visto en Occidente como un recordatorio de las capacidades nucleares de Moscú.

El avión gigante de ala oscilante, cuyo nombre en clave es “Blackjacks” por la alianza militar OTAN, es una versión modernizada de un bombardero de la época de la Guerra Fría que la antigua Unión Soviética habría desplegado en caso de guerra nuclear para lanzar armas a grandes distancias.

La televisión estatal mostró a Putin bajando por una escalera del avión tras el vuelo y diciendo a los periodistas que se trataba de un avión fiable y modernizado que podría ser aceptado por la Fuerza Aérea rusa.

“Es una máquina nueva, muchas cosas son nuevas. Es más fácil de controlar. Es fiable”, dijo Putin.

El líder ruso, que se espera que gane fácilmente otro mandato de seis años el próximo mes, hizo el vuelo en un momento en que Moscú y Occidente están enfrentados por la guerra de Rusia en Ucrania y la muerte en prisión del político opositor Alexei Navalny.

Algunos diplomáticos rusos y estadounidenses dicen que no recuerdan una época de peores relaciones entre las dos mayores potencias nucleares del mundo, incluso durante la crisis de los misiles cubanos de 1962.

La televisión estatal mostró al avión gigante, al que Rusia apoda “Cisne Blanco”, despegando y aterrizando en una pista perteneciente a la fábrica de Kazán que fabrica los aviones supersónicos modernizados, y el corresponsal Pavel Zarubin lo calificó emocionado de “acontecimiento único”.

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declaró que la trayectoria del avión era un secreto militar. El vuelo con Putin a bordo había durado 30 minutos, según informaron las agencias de noticias rusas.

El Tu-160M, con una tripulación de cuatro personas, puede transportar 12 misiles de crucero o 12 misiles nucleares de corto alcance y volar 12.000 km sin parar y sin repostar.

La doctrina nuclear rusa establece las condiciones en las que un presidente ruso consideraría el uso de un arma nuclear: en general, como respuesta a un ataque con armas nucleares u otras armas de destrucción masiva, o al uso de armas convencionales contra Rusia “cuando la propia existencia del Estado se vea amenazada”.

El ex presidente Dmitry Medvédev, ahora vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, ha advertido repetidamente del riesgo de un conflicto nuclear con Occidente desde que Moscú envió decenas de miles de tropas a Ucrania en 2022.

Pero Putin, que es comandante en jefe de las fuerzas armadas rusas, dijo en octubre que la existencia del Estado ruso no estaba amenazada y que “a ninguna persona de mente sana y memoria clara se le ocurriría utilizar armas nucleares contra Rusia”.

Putin, de 71 años, voló en una versión antigua del avión Tu-160 en 2005 durante un ejercicio de entrenamiento.

Según un contrato firmado en 2018, 10 de los bombarderos nucleares modernizados Tu-160M deben ser entregados a la Fuerza Aérea de Rusia hasta 2027 a un costo de 15 mil millones de rublos (163 millones de dólares) cada uno.

Tupolev, el fabricante del avión, afirma que la versión modernizada es un 60% más eficaz que la antigua, con mejoras significativas en su armamento, navegación y aviónica.

Reuters