Rápido, flexible y económico, así es el transporte rápido expedicionario T-EPF Spearhead.

El programa para desarrollar la clase Spearhead de transporte rápido expedicionario (T-EPF) (anteriormente conocida como embarcación conjunta de alta velocidad, o JHSV) es popular en el Congreso de Estados Unidos, ya que puede asumir una gama más amplia de funciones de las que se habían considerado anteriormente.

Se ha establecido el uso de estos barcos en el rol de “presencia” – haciendo visitas a puertos extranjeros y mostrando la bandera en general. Lo inesperado es cómo de efectivos son al realizar tales misiones. Se ven impresionantes y “modernos”, y sus grandes bahías de carga ininterrumpidas los convierten en lugares adecuados para reuniones, exhibiciones y otras actividades diplomáticas.

En la experiencia operativa, estos barcos han demostrado una impresionante variedad de actividades para plataformas que originalmente se consideraba que cumplían un papel de nicho en la Marina estadounidense. Los barcos de la clase T-EPF están diseñados para transportar 600 toneladas cortas de carga militar a 1200 millas náuticas de distancia a una velocidad promedio de 35 nudos. Los barcos pueden operar en puertos y vías fluviales de poco calado, interactuando con instalaciones de descarga roll-on/roll-off y cargando/descargando el tanque de batalla principal Abrams (M1A2).

El T-EPF incluye una plataforma de vuelo para operaciones de helicópteros y una rampa de descarga que permite que los vehículos salgan del barco rápidamente. El calado poco profundo (menos de 15 pies) (4,5 m) de los T-EPF mejora aún más las operaciones litorales y el acceso al puerto. Esto hace que el T-EPF sea un activo extremadamente flexible para apoyar una amplia gama de operaciones, incluidas las operaciones de maniobra y sostenimiento y socorro en puertos pequeños o dañados. También pueden proporcionar apoyo logístico flexible o servir como facilitador clave para un transporte rápido.

El pedido de barcos adicionales de este tipo puede verse como un voto de confianza en su desarrollo futuro, que elevará el total de la clase en la Marina de EE. UU. a 16 barcos.

Ha surgido otro posible papel para el T-EPF con propuestas para instalar una capacidad de guerra de superficie significativa en los buques, lo que les permite sustituir a los combatientes de superficie en misiones de baja intensidad como la lucha contra la piratería. En comparación con una fragata o un destructor, el T-EPF es económico de adquirir y operar. Es notablemente rápido de construir y proporciona una útil capacidad de movilización. Su velocidad le da flexibilidad operativa y su capacidad de carga útil significa que puede embarcar grupos de infantes de marina y cantidades suficientes de equipo militar mientras aún transporta una carga de alta prioridad que vale la pena. Un T-EPF modificado armado con un cañón de 35 mm y tal vez misiles antibuque de corto alcance podría proporcionar exactamente el tipo de capacidad que se imaginó originalmente para los Littoral Combat Ships.

Las virtudes de los transportes de tropas en catamaranes de alta velocidad se hacen más evidentes a medida que crece la experiencia con este tipo de barcos. Ya se han vendido barcos de esta categoría general a Sri Lanka, Indonesia y Corea del Sur, y han servido con éxito en los tres países. Su velocidad cumple una función más importante que simplemente aumentar la flexibilidad y reducir la fatiga de la tripulación y los pasajeros. Ser capaces de mantener altas velocidades en aguas turbulentas hace que estos barcos sean objetivos difíciles para el tipo de embarcaciones pequeñas preferidas por los terroristas.

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