Tropas de Wagner «planean marchar a Rusia para vengar la muerte del líder».

Según informes, mercenarios ucranianos intentan regresar a Rusia tras amenazar con represalias por el presunto asesinato de su líder, Yevgeny Prigozhin, en un accidente aéreo por orden de Vladimir Putin.

El Centro Nacional de Resistencia de Ucrania informó que fuentes de Bielorrusia, donde se encontraban algunos de los combatientes de Prigozhin, habían visto cómo los mercenarios desmantelaban campamentos y formaban convoyes para abandonar el país.

«Es probable que los convoyes se dirijan hacia la frontera con Rusia», declaró el centro.

El informe siguió a la publicación en Internet de un mensaje amenazador de un hombre enmascarado que afirmaba ser un combatiente de Wagner.

«Se está hablando mucho en estos momentos sobre lo que hará el Grupo Wagner», dijo. «Podemos decirles una cosa. Estamos empezando, prepárense para lo que haremos».

Al mismo tiempo, un sitio web de noticias ruso vinculado a Prigozhin -que en junio se amotinó contra el presidente Vladimir Putin por los vacilantes esfuerzos bélicos del Kremlin en Ucrania- afirmaba que el Grupo Wagner tenía «un mecanismo de acción aprobado desde hace tiempo en caso de fallecimiento de Prigozhin» o de su aliado clave Dmitry Utkin, que también se cree que murió en el accidente aéreo de ayer.

Los informes llegan mientras el misterio sigue rodeando la causa del accidente, a 190 millas al noroeste de Moscú, que parece haber matado a Prigozhin y a otros dirigentes de Wagner.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dicho que hay pocas cosas que ocurran en Rusia en las que Putin no esté detrás y el ex jefe del MI6 Sir John Sawers ha dicho hoy que parece que el líder ruso ordenó el ataque.

«Todos los indicios apuntan a que Putin lo ha eliminado… está dejando claro a todo el mundo, tanto dentro como fuera de Rusia, que no va a tolerar ningún desafío», dijo Sir John. «Yo habría pensado que había algún dispositivo a bordo que hizo caer el avión de repente y mató a todos los que iban a bordo. Era una forma de acabar con toda la cúpula de Wagner de una sola vez».

Otros informes han sugerido que podrían haberse utilizado dos misiles tierra-aire para derribar el avión. El redactor de BBC Monitoring para Rusia, Vitaly Shevkenko, declaró que había «visto varios vídeos filmados por testigos presenciales que decían haber oído dos explosiones y llegaban a la conclusión de que el avión había sido derribado».

Según fuentes del Ministerio de Defensa, lo más probable es que el servicio de seguridad ruso FSB esté detrás de la muerte de Prigozhin.

También se ha sabido hoy que hubo un retraso antes de que el avión despegara.

La azafata Kristina Raspopova, de 39 años, informó a sus familiares del inexplicable retraso, indicando que el avión estaba siendo “reparado” antes del vuelo, según el canal de Telegram VChK-OGPU. En su última fotografía aparecía esperando en una cafetería del aeropuerto: «Dijo que estaba en Moscú, que iba a volar hoy o mañana. El avión estaba en mantenimiento o en reparaciones urgentes. Estaban esperando el vuelo. Algún tipo de mantenimiento, bueno, nada especial. Parecía que ella había estado allí por un tiempo. Es decir, al menos un par de días…»

El Kremlin no ha hecho ningún comentario sobre el accidente aéreo, y Putin, que prometió castigar a los «traidores» implicados en la revuelta de Wagner en junio, se ha negado a mencionarlo hoy durante un discurso por vídeo desde Rusia en una reunión del grupo de países Brics en Sudáfrica. El accidente sólo se mencionó brevemente en el principal noticiario de la televisión rusa. Los restos carbonizados de los siete pasajeros y tres tripulantes del avión, incluida Raspopova, fueron retirados del lugar del accidente a primera hora de la mañana. Han sido trasladados a un depósito de cadáveres de la capital regional, Tver, para ser examinados.

Al parecer, el teléfono inteligente de Prigozhin fue encontrado en el lugar del accidente, donde las autoridades rusas dijeron que su cuerpo había sido identificado antes de las pruebas forenses y de ADN. No se ha confirmado que Prigozhin estuviera entre los fallecidos, pero su nombre figuraba en la lista de pasajeros y el sitio de Telegram de su grupo ha declarado que está muerto. Ha aparecido un vídeo en el que Prigozhin -cuyas tropas han matado a traidores ante las cámaras con mazos- dice que «irá al infierno».

En el vídeo, el comandante Utkin reflexiona: «La muerte no es el final, es sólo el principio de algo más». Prigozhin le responde: «Sí, todos iremos al Infierno, pero en el Infierno seremos los mejores».

Un videoclip de Putin de 2018 fue ampliamente reproducido en las redes sociales rusas tras el accidente, en medio de la teoría de que Putin había ordenado el asesinato de Prigozhin por el intento de golpe de Estado. En el clip, se le preguntó a Putin: «¿Puedes perdonar?» Él respondió: «Sí, pero no todo».

A la pregunta: «¿Qué es imposible de perdonar?», Putin respondió: «La traición». El antiguo portavoz del presidente, Sergei Markov, afirmó hoy en la BBC -sin aportar ninguna prueba- que Ucrania había estado detrás del accidente.

Esta afirmación fue refutada por Sir John Sawers, quien afirmó que Kiev no tenía capacidad para organizar un ataque de este tipo. Justin Crump, director ejecutivo de la consultora de inteligencia Sibylline, dijo que lo más probable era que Prigozhin hubiera sido asesinado por los dirigentes rusos en venganza por su motín. En su opinión, el Kremlin podría tratar de culpar a Occidente para «desviar la culpa, al tiempo que envía claramente el mensaje de que no intenten actuar contra nosotros.

Martin Bentham