Estados Unidos vigila la creciente presencia de submarinos rusos y chinos junto a sus aguas costeras.
Altos funcionarios militares estadounidenses han expresado su preocupación por la creciente tendencia de submarinos rusos y chinos a acercarse a sus aguas costeras y han solicitado financiación adicional al gobierno del país para mejorar las capacidades de detección de submarinos “enemigos”.
El comandante del Comando Norte de Estados Unidos, general Gregory Guillot, dijo que necesitan aumentar su capacidad de detectar la presencia de submarinos rusos y chinos para poder estar preparados ante todas las eventualidades y amenazas.
“La tendencia de submarinos rusos y chinos a acercarse a nuestras aguas está aumentando, y necesitamos capacidades de detección submarina más amplias para asegurarnos de estar al tanto de su presencia y poder estar preparados para defender al país de la amenaza de misiles de crucero o misiles balísticos lanzados desde submarinos”, declaró ante el Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos.
Según Guillot, el número de submarinos rusos y chinos detectados cerca de las costas de Estados Unidos, incluso en aguas de Alaska, así como los vuelos de aviones militares rusos y chinos en la zona de control del NORAD, en realidad ha aumentado en los últimos años, aunque el conflicto en Ucrania todavía continúa.
NORAD es una abreviatura de Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte.
Es una cooperación militar bilateral entre Estados Unidos y Canadá encargada de detectar, rastrear y defender el espacio aéreo del continente norteamericano de cualquier amenaza aérea y de misiles, incluyendo ataques de aviones bombarderos, misiles balísticos u otras amenazas aeroespaciales.
El NORAD también desempeña un papel importante en la alerta temprana estratégica y el control de las operaciones de defensa aérea en la región.
Guillot volvió a calificar de amenaza la cooperación cada vez más estrecha entre Rusia, China, Irán y Corea del Norte.
Mientras tanto, el gobierno ruso, en su declaración anterior, destacó que sus aviones y submarinos militares estaban realizando misiones de patrulla de acuerdo con las normas y leyes internacionales establecidas.
El año pasado, mientras testificaba ante el mismo comité, Guillot pidió una mayor presencia militar estadounidense a través de ejercicios militares a lo largo de la costa de Alaska para frenar la creciente actividad militar china y rusa en la región del Ártico.
“La mejor manera de disuadirlos (a Rusia y China) es demostrar nuestra propia presencia. Por lo tanto, la implementación de entrenamientos y patrullajes en todos los ámbitos es fundamental a lo largo de nuestra costa, con el foco principal actualmente en la región de Alaska”, afirmó.
Guillot asumió la jefatura de NORTHCOM y NORAD reemplazando al general Glen VanHerck el 5 de febrero del año pasado.
Guillot también expresó su preocupación por el aumento de la presencia militar de China en el Ártico, esperando que el Ejército Popular de Liberación (EPL) comience a enviar aviones a la Zona de Identificación de Defensa Aérea (ADIZ) de Estados Unidos, vigilada por el NORAD, para detectar cualquier avión que se acerque al espacio aéreo del país.
Mientras tanto, el director del Instituto de Estudios Marítimos de Rusia (RMSI), Michael Peterson, un experto en las capacidades marítimas rusas, también dijo que hay muchas señales de que Rusia ha aumentado el despliegue de sus submarinos de propulsión nuclear en las aguas costeras de Estados Unidos.
El despliegue de submarinos convencionales y de propulsión nuclear no sólo se dirige a las zonas costeras de Estados Unidos, sino también al Mediterráneo y alrededor de Europa.
Lo que Moscú está haciendo ahora, dijo el investigador, es lo mismo que hizo la Unión Soviética durante la Guerra Fría.
La estrategia de Rusia se hizo más clara cuando el presidente ruso, Vladimir Putin, y el liderazgo militar pusieron en servicio varios de sus activos submarinos, incluido su más nuevo submarino de propulsión nuclear, el Generalísimo Suvorov, capaz de lanzar misiles nucleares bajo el agua.
Según el presidente ruso, el país construirá más submarinos de propulsión nuclear para “garantizar la seguridad del país durante las próximas décadas”.
Desde la caída de la Unión Soviética en 1991, Rusia ha trabajado incansablemente para fortalecer aún más su flota de submarinos de propulsión nuclear.
En los últimos años, Moscú ha desarrollado varios tipos de submarinos de propulsión nuclear capaces de sumergirse en lugares estratégicos de Estados Unidos y Europa y permanecer largos periodos de tiempo.
Con un estimado de 58 submarinos de propulsión nuclear de varias clases, los activos submarinos de propulsión nuclear de Rusia pueden desplegarse en cualquier lugar del mundo, incluidas las aguas costeras estadounidenses.
La acción del ejército ruso de desplegar submarinos para hacer acto de presencia en las aguas próximas a la costa de Estados Unidos se considera un acto de desafío a los dirigentes navales de Washington y de erosión de alguna manera a la influencia militar estadounidense.
DSA
Por eso es indiferente que haya misiles en Cuba o no, ya que de cualquier manera los rusos pueden lanzarlos desde unas pocas decenas de km de las costas norteamericanas, y viceversa, los norteamericanos podrian lanzarlos desde el mar Baltico, desde las aguas articas o desde los mares del este. Asimismo esto invalida el argumento de putin de que Ucrania bajo su control le daria mas tiempo de reaccion si se lanzaran armas nucleares desde Polonia, por ejemplo.
En resumen, gracias a los submarinos, cada potencia nuclear tiene sus misiles ubicados justo en las narices del enemigo.
Lo unico que puede hacerse es tratar de detectarlos, y seguirlos continuamente para tenerlos a tiro en caso de una emergencia.