Hanwha Ocean presenta el nuevo diseño de fragata OCEAN-40F para Tailandia.
El astillero surcoreano Hanwha Ocean ha presentado su diseño de fragata OCEAN-40F en la feria Defense & Security 2025 de Bangkok. Este diseño de 4.000 toneladas representa la segunda propuesta de Hanwha para Tailandia, tras la exitosa entrega del HTMS Bhumibol Adulyadej, que entró en servicio en 2019.
El nuevo diseño incorpora armamento y sistemas de socios europeos, además de capacidades antidrones mejoradas.
La OCEAN-40F representa un salto cualitativo respecto a su predecesor. Con 4.000 toneladas, el nuevo diseño pesa 250 toneladas más que el Bhumibol Adulyadej, de 3.750 toneladas, lo que proporciona espacio adicional para sistemas de armas y sensores mejorados, así como margen para futuras actualizaciones.
Los representantes de Hanwha Ocean en el stand explicaron que la filosofía de diseño se basa en tres pilares: «Mayor, Letal y Legendario», que representan una mayor escala y presencia operativa, preparación para el combate multidominio y una plataforma preparada para el futuro, digna del distinguido legado de la Real Marina Tailandesa.
Hanwha Ocean ha firmado memorando de entendimiento con el Grupo Naval de Francia para la integración de sistemas de gestión de combate y sensores, y con MBDA para la integración de armamento. Esta colaboración proporciona una capacidad de ataque basada en los misiles antibuque Exocet MM40 Block 3c de MBDA, que ofrecen capacidades tanto de ataque a larga distancia como de ataque costero.

La compañía también firmó un memorando de entendimiento con Cohort Group, que incluye la colaboración en sistemas de sonar, lanzadores de torpedos, sistemas de vigilancia, puntería y control de fuego, así como gestión de comunicaciones.
La defensa antiaérea de la fragata se compone de un sistema de lanzamiento vertical de 16 celdas equipado con misiles tierra-aire VL MICA NG de MBDA, y dos lanzadores SIMBAD RC (uno a proa y otro a popa) que proporcionan capacidad adicional de defensa antiaérea de corto alcance. El armamento se completa con un cañón principal de 76 mm y dos estaciones de armas remotas de 30 mm que cumplen una doble función tanto en la guerra de superficie convencional como ante las nuevas amenazas asimétricas.
Con la guerra ruso-ucraniana y el conflicto en el Mar Rojo, las capacidades antidrones se han convertido en un requisito fundamental para las plataformas navales modernas, y la OCEAN-40F aborda esta necesidad de forma integral. «El buque contará con medidas de destrucción tanto directa como indirecta», explicó un representante de Hanwha Ocean. «Las capacidades de interferencia de radiofrecuencia y suplantación de GNSS proporcionan opciones de destrucción indirecta para interrumpir la navegación y el control de los drones, complementadas por las capacidades de destrucción directa con los cañones de 30 mm».
El radar de vigilancia aérea 4D desempeña un papel crucial en la detección de drones pequeños que vuelan a baja altura.
La discreción ha sido una consideración fundamental en el diseño desde el principio. La fragata presenta superficies de casco y superestructura inclinadas para minimizar la sección transversal de radar, con formas simplificadas para todos los equipos expuestos y un mástil de radar cerrado para reducir la reflectividad del radar.
Además de la discreción de radar, el diseño incorpora la supresión de la firma infrarroja mediante silenciadores de gases de escape y recubrimientos térmicos especializados, un sistema de desmagnetización para el silencio magnético y un diseño de hélice mejorado para minimizar el ruido radiado bajo el agua.
La OCEAN-40F cuenta con un completo sistema de sonar que incluye sonar de casco, sonar remolcado y, en particular, un sonar de intercepción diseñado para detectar buzos de combate y pequeños vehículos submarinos no tripulados. Esta capacidad de detección submarina en capas se complementa con torpedos y señuelos acústicos para contramedidas y ataques submarinos.
La filosofía de supervivencia integral de la fragata abarca todo el espectro, desde la evasión de la detección hasta la recuperación tras los daños. Además de características de baja detectabilidad, el diseño incluye refuerzo estructural en áreas críticas, construcción submarina a prueba de explosiones, protección balística para sistemas vitales y sistemas integrales de control de daños.
Las instalaciones de entrenamiento de la tripulación y los avanzados sistemas contra incendios garantizan que el buque pueda mantener sus funciones esenciales incluso después de sufrir daños en combate.
Hanwha Ocean se enfrenta a la competencia de varios actores consolidados en el programa de fragatas tailandesas. Hyundai Heavy Industries, la española Navantia, el consorcio turco TAIS y, potencialmente, la china CSSC, compiten por el contrato.
“La Real Marina Tailandesa aún no ha emitido una solicitud de propuestas, por lo que hemos flexibilizado el diseño para adaptarlo a los próximos requisitos de la RTN”, señaló el representante de Hanwha Ocean.
Xavier Babasseur


