Un pequeño barco de la armada rusa atacado y hundido por una morsa en el Ártico.
En una especie de extraño suceso, un barco de la marina rusa fue atacado y hundido por una morsa durante una expedición en el Ártico, ha informado hoy el diario The Barents Observer de Noruega.
El Altai, un remolcador de la Flota del Norte de la armada rusa, navegó hasta el archipiélago Tierra de Francisco José en el Ártico llevando a bordo a investigadores de la Sociedad Geográfica Rusa.
«Las latitudes polares están plagadas de muchos peligros», publicó el grupo de investigación en una reciente actualización de prensa.
Uno de esos peligros es aparentemente las morsas, un animal enormemente grande que puede pesar entre 800 y 1500 kilos puede ser bastante feroz cuando está amenazado.
Para llegar a tierra desde el Altai, los investigadores y otros participantes de la expedición tuvieron que depender de lanchas de desembarco más pequeñas.
Durante el desembarco, el «grupo de investigadores tuvo que huir de una morsa hembra que, protegiendo a sus crias, atacó al pequeño barco de la expedición,» ha dicho la oficina de prensa de la Flota del Norte.
La marina agregó que «se evitaron problemas serios gracias a las acciones claras y bien coordinadas de los miembros del servicio de la Flota del Norte, que pudieron alejar el bote a los animales sin dañarlos».
The Barent Observer informa que se estaba operando un avión no tripulado cerca de las morsas. No está claro si esto fue lo que desencadenó la agresión.
«Las morsas atacaron el bote del equipo», explicó el grupo de investigación. «El bote se hundió, pero la tragedia se evitó gracias a las claras acciones del líder del equipo. Todos los participantes del desembarco llegaron nadando a la orilla de manera segura».
Este no ha sido el primer encuentro de la marina rusa con morsas.
En pasado mes de mayo, en las fotos que se cree son de 2006 apareció una gran morsa durmiendo en la parte superior de un submarino ruso.
Ryan Pickrell