Corea del Sur realiza un importante ejercicio de artillería cerca de la frontera norcoreana.
La agencia de noticias surcoreana Yonhap informó que el 17 de abril, el Ejército y el Cuerpo de Marines de Corea del Sur habían realizado ejercicios de artillería con fuego real cerca de la frontera norcoreana para reforzar su capacidad defensiva.
Los ejercicios tuvieron lugar en Cheorwon, situado a 85 kilómetros al noreste de Seúl, y en ellos participaron unos 430 soldados del Cuerpo Capital del Ejército surcoreano y de la 2ª División de Marines.
Durante el ejercicio, las fuerzas armadas surcoreanas desplegaron 30 sistemas de artillería, incluidos obuses autopropulsados K9 y K55A1, junto con radares contra-batería y drones de vigilancia. El objetivo principal de los ejercicios, según oficiales del Ejército surcoreano, era mejorar la coordinación operativa entre el Ejército y la Infantería de Marina de Corea del Sur para contrarrestar más eficazmente las provocaciones militares norcoreanas.
El K9 Thunder, desarrollado por Corea del Sur, es un obús autopropulsado muy avanzado que constituye un componente esencial de las unidades de artillería del Ejército surcoreano. Diseñado para satisfacer las exigencias de la guerra moderna, el K9 cuenta con un cañón de 155 mm y 52 mm de calibre con un alcance máximo de fuego de aproximadamente 40 kilómetros con munición estándar y de más de 50 kilómetros con proyectiles asistidos por cohetes. Cuenta con capacidad de carga automática y avanzados sistemas de control de tiro, lo que permite una respuesta rápida y una gran precisión.
El K55A1 es una versión mejorada del antiguo obús autopropulsado K55 del Ejército de Corea del Sur, basado en el obús estadounidense M109. Las mejoras del K55A1 formaban parte de un esfuerzo de modernización para prolongar la vida operativa y mejorar las capacidades de los sistemas de artillería existentes. Esta modernización incluye sistemas mejorados de control de tiro, mejores equipos de comunicación y sistemas avanzados de navegación.
El K55A1 está equipado con un obús de 155 mm capaz de disparar una amplia gama de municiones, incluidos proyectiles estándar y asistidos por cohetes. Estas mejoras permiten una mayor precisión en la puntería y tiempos de respuesta más rápidos, cruciales para un apoyo de artillería eficaz en entornos de combate dinámicos.
Esta acción militar se produce tras un importante ejercicio de artillería llevado a cabo por Corea del Norte a principios de marzo de 2024, a unos 40 o 50 kilómetros de la frontera con Corea del Norte, lo que subraya las continuas tensiones y medidas de preparación en la región.
Evaluaciones recientes de las capacidades de artillería de Corea del Norte destacan su importante potencia de fuego convencional, que supone una amenaza sustancial especialmente para Corea del Sur debido a la proximidad y densidad de población civil cerca de la frontera. Corea del Norte mantiene cerca de 6.000 sistemas de artillería capaces de alcanzar las principales ciudades surcoreanas, como Seúl, en muy poco tiempo, pudiendo causar víctimas masivas.
Según el Balance Militar 2023, Corea del Norte posee un total aproximado de 21.600 sistemas de artillería. Esto incluye 8.600 obuses autopropulsados y cañones remolcados, 5.500 sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS) de varios calibres y 7.500 morteros de 82 a 160 mm. Por su parte, el ejército surcoreano cuenta con un total de 12.120 armas de artillería, que incluyen 2.330 obuses autopropulsados, 3.500 cañones remolcados, 298 MLRS y 6.000 morteros de 81 a 120 mm.
En cuanto a tipos específicos de artillería, Corea del Norte opera varios sistemas de artillería de gran calibre, incluido el cañón Koksan de 170 mm, que puede alcanzar distancias de hasta 60 km (37 millas). También dispone de sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS), como los de 240 mm y 300 mm de diámetro, y el cohete de artillería KN-09, el más nuevo de su arsenal, con un alcance declarado de 190 a 200 km (118 a 124 millas).
La importancia estratégica de estas capacidades de artillería se ve subrayada por su uso potencial en escenarios que van desde la disuasión y la coerción hasta la agresión militar directa. La densidad de estos sistemas a lo largo de la Zona Desmilitarizada de Corea (DMZ) significa que Corea del Norte puede lanzar una andanada de fuego de artillería con poco o ningún aviso, creando una grave amenaza inmediata para Corea del Sur.
Para el ejército surcoreano es crucial mantener una sólida capacidad de artillería, principalmente como elemento disuasorio frente a la agresión norcoreana. La proximidad de la fuertemente militarizada Zona Desmilitarizada (DMZ) a las principales áreas metropolitanas de Corea del Sur, como Seúl, requiere una capacidad de respuesta militar fuerte y preparada. Las unidades de artillería como los obuses K9 y K55A1 proporcionan un apoyo de fuego rápido y de gran volumen, que es vital en las primeras fases del conflicto para reprimir los avances enemigos y proteger las zonas civiles.
Alain Henry de Frahan
Vaya, ahora resulta que los del sur también tienen su artillería bien juntitas,como los del norte.