Polonia pospone la compra de 32 helicópteros S-70i Black Hawk para financiar otras prioridades.
En 2016, la decisión del gobierno polaco de poner fin a las negociaciones sobre la compra de 50 helicópteros H225M Caracal de Airbus Helicopters causó revuelo y enfrió las relaciones entre París y Varsovia.
Este anuncio era esperado, ya que en aquel momento la nueva mayoría gubernamental no había ocultado sus preferencias por los dos competidores de Airbus Helicopters, es decir, Sikorsky [filial de Lockheed Martin] y Leonardo, que producen respectivamente los helicópteros S-70 Black Hawk y AW-149 en Polonia, sobre todo en distritos electorales bastante favorables al partido “Ley y Justicia” [PiS].
Posteriormente, solo se encargaron ocho S-70 Black Hawk para las Fuerzas Especiales Polacas [WS por Wojska Specjalne] al fabricante PZL Mielec [filial de Lockheed Martin]. En noviembre de 2022, el Ministerio de Defensa polaco notificó un contrato a PZL Swidnik [filial de Leonardo] para la entrega de treinta y dos AW-149. Especificaba que estas aeronaves se utilizarían para misiones de transporte, apoyo aéreo y búsqueda y rescate.
Sin embargo, el S-70 Black Hawk aún no estaba terminado. En 2023, la Agencia Polaca de Armamento anunció el inicio de un proceso de adquisición de 32 unidades adicionales. Estas aeronaves se adaptarán para operar con los helicópteros de ataque AW-149 y AH-64E Guardian [o Apache], de los cuales se esperaban 96 unidades.
Sin embargo, es posible que este procedimiento no se lleve a cabo. De hecho, el 6 de junio, tras anunciarse inicialmente su cancelación, el Ministerio de Defensa polaco aclaró que finalmente se suspendería para encontrar margen de maniobra y financiar prioridades más urgentes.
“Contrariamente a lo que dicen algunos medios de comunicación y miembros de la oposición, no hemos cancelado ningún contrato para los helicópteros S-70i”, declaró Paweł Bejda, viceministro de Defensa de Polonia. “La situación geopolítica, la guerra en Ucrania, las compras de Rusia, el equipamiento de su ejército y las misiones de nuestra fuerza aérea dentro de la OTAN son factores que influyen en nuestras decisiones”, añadió.
“Nos aseguramos de que nuestro dinero se gaste responsablemente. […] Estamos solucionando un problema de adquisiciones del que es responsable el gobierno anterior”, insistió Bejda.
Por su parte, el jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Polonia, general Wiesław Kukuła, explicó que era necesario “cambiar las prioridades” en términos de adquisiciones para adaptarse a los desafíos de la guerra futura y tener en cuenta la próxima llegada de los cazabombarderos F-35A y los helicópteros de ataque AH-64, así como la admisión en servicio de tres fragatas de la clase “Miecznik”.
En detalle, en lugar de los S-70i Black Hawks, el Estado Mayor polaco desea adquirir, a corto y medio plazo, helicópteros para entrenamiento e instrucción, helicópteros embarcados, helicópteros de transporte pesado y helicópteros de búsqueda y rescate [SAR].
“Este programa también prevé la adquisición de plataformas dedicadas a operaciones especiales. Estas incluyen un helicóptero multifunción, un helicóptero ligero y un helicóptero multifunción de apoyo para las necesidades de las fuerzas terrestres”, añadió el general Kukuła.
Pero la primera prioridad es la adquisición de helicópteros para garantizar el entrenamiento y la instrucción de las futuras tripulaciones del AW-149, el AW-101 y otros AH-64E Apache, ya que los aviones actualmente asignados a esta misión, concretamente el SW-4 y el Mi-2, ya no son adecuados. A priori, el H145M de Airbus Helicopters podría ser la mejor opción, especialmente por su capacidad como plataforma de combate ligera.
Lo mismo ocurre con los helicópteros embarcados, ya que los Kaman SH-2G desplegados por las dos fragatas clase Oliver Hazard Perry han dejado de ser útiles. «Polonia debe ser capaz de proteger infraestructuras críticas y rastrear objetos de superficie y submarinos», argumenta el Estado Mayor polaco.
Polonia gastó el 4,2 por ciento de su PIB en defensa en 2024, una cifra que se espera que aumente al 4,7 por ciento en 2025, convirtiendo al país en el que más gasta en la OTAN medido como porcentaje de su economía.
L.Lagneau
Curiosa decisión. En lugar de recortar en los AH-64 deciden recortar en los UH-60 que pueden emplearse en multitud de misiones. Al final si Alemania juega sus cartas pueden atraer de nuevo a Polonia al corral y hacer que compre más armas alemanas. Tiene argumentos financieros. Y a lós dos países les interesa tener ejércitos coordinados y fuertes que disuadan Rusia de intentar nada en los países Bálticos. Tienen a Kaliningrado clavada como una espina … Quizás Europa debería a pensar como desastabilizar esa región para que pida a abandonar Rusia.