Rusia venderá seis aviones de combate Sukhoi Su-30 a Myanmar.
Myanmar (Birmania) es el último país de la región que se ha incorporado a la familia de los aviones rusos Su-30 (código OTAN Flanker-C). Se trata de un avión bimotor de superioridad aérea todo tiempo para misiones aire-aire y aire-superficie de largo alcance, muy parecido al F-15 Eagle de Estados Unidos.
En un comunicado de prensa facilitado por el Ministerio de Defensa de Rusia, el teniente general Alexander Fomin, anunció durante la visita del ministro de Defensa ruso Sergei Shoigu a Myanmar durante el fin de semana, que el país del sudeste asiático comprará seis aviones de combate rusos Su-30.
En el comunicado no se especifica la variante del Su-30 que Myanmar comprará, ni se informa del valor del contrato o las condiciones de pago.
Fomin también expresó su confianza en que el Su-30 se convertiría en el avión de combate principal de la Fuerza Aérea de Myanmar, también dijo que Myanmar “está procurando activamente” otros equipos militares rusos para sus fuerzas armadas.
Esto incluye el resto de los 12 aviones solicitados por la Fuerza Aérea de Myanmar del entrenador avanzado Yakovlev Yak-130 Mitten. En diciembre de 2017 se recibieron los primeros seis aviones encargados.
La Fuerza Aérea de Myanmar actualmente opera una mezcla de aviones de combate antiguos, principalmente chinos, junto con un puñado de interceptores MiG-29 Fulcrum rusos.
Con esta adquisición, Myanmar se une a China, India, Indonesia, Malasia y Vietnam en variantes operativas de la familia Flanker. La mayoría de estos países tienen variantes de vuelo del caza multifunción Su-30MK, con diferencias específicas de cada país en su aviónica y otras capacidades. China, Vietnam e Indonesia también tienen el interceptor Su-27 más antiguo en sus respectivos inventarios. Indonesia está supuestamente a punto de concluir las prolongadas negociaciones con Rusia para el suministro del caza Su-35, que ya está en servicio con China.
China también ha fabricado un gran número de copias autorizadas y también sin licencia del Su-27 conocido como el Shenyang J-11, además, en los últimos años también ha desarrollado su propio caza de combate embarcado basado en el Flanker Su-30 conocidos respectivamente como el J-15 y J-16.
Están equipados con aviónica, sistemas, armas y motores autóctonos. En su mayoría son similares a los Flankers construidos en Rusia, solo en apariencia externa.
La atracción que despierta la familia Flanker entre las fuerzas aéreas de Asia radica en sus capacidades en relación con los costes de adquisición, que son solo una fracción de los diseños de caza contemporáneos de los cazas occidentales. La falta de ataduras políticas ligadas a la venta de armas, así como la disposición a aceptar mercancías como pago parcial, también han sido citados como puntos de venta de armas rusas.
Las cifras publicadas por el Instituto Internacional de Investigación de la Paz de Estocolmo muestran que Rusia es actualmente el segundo mayor exportador de armas del mundo, después de Estados Unidos, con exportaciones de armas por valor de 35.400 millones de dólares en el período comprendido entre 2012-2016, lo que representa el 23 por ciento de las exportaciones mundiales de armas.