Avión espía de EE.UU. vigila Corea del Norte tras el ensayo del avión no tripulado Haeil.
El avión espía RC-135W Rivet Joint de la Fuerza Aérea de Estados Unidos ha realizado un vuelo de vigilancia sobre Corea del Sur para seguir las actividades de Pyongyang tras su afirmación de haber probado un nuevo avión no tripulado de ataque submarino.
Corea del Norte había afirmado recientemente que había probado con éxito un avión no tripulado de ataque nuclear submarino, conocido como Haeil-5-23, en el Mar del Este. Esta prueba se cree que ha sido una respuesta a los ejercicios navales conjuntos realizados por Corea del Sur, Estados Unidos y Japón.
El avión RC-135V/W Rivet Joint, utilizado tanto por las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos, sirve como plataforma de inteligencia de señales (SIGINT) de gran capacidad. Equipado con una gama de sensores a bordo, está especializado en la recogida de emisiones de comunicaciones y en la recopilación de información sobre radares de defensa aérea y otros emisores de señales, así como en la localización de los mismos.
El Rivet Joint realizó su vuelo cubriendo varias regiones, entre ellas Incheon, la provincia de Gangwon y las costas oriental y occidental.
Aunque el despliegue de este avanzado avión espía forma parte de las operaciones rutinarias de recopilación de información, las amplias rutas de vuelo que tomó durante esta misión podrían transmitir un mensaje de presión hacia Corea del Norte, según fuentes no reveladas.
Este reciente vuelo de vigilancia es el tercero del que se tiene constancia este año, ya que los dos anteriores se observaron únicamente en el espacio aéreo interior los días 4 y 17 de enero. La intensificación de la vigilancia por parte de Corea del Sur y Estados Unidos refleja su determinación de detectar cualquier posible indicio de provocación por parte de Corea del Norte. El líder norcoreano, Kim Jong-un, ha pedido un aumento de la preparación bélica en respuesta a los actos «sin precedentes» que percibe en los enfrentamientos con Estados Unidos.
Dylan Malyasov