EEUU y Corea del Sur vuelan con F-35A en ejercicios de interceptación de misiles norcoreanos.
El ejercicio, en el que han participado aviones de combate F-35A de ambos países, se produce tras varias series de pruebas de misiles por parte de Corea del Norte, al parecer con misiles de crucero.
Corea del Sur y Estados Unidos hicieron volar el viernes sus avanzados cazas furtivos F-35A en un ejercicio conjunto de interceptación de misiles sobre la península coreana, según informó la Fuerza Aérea de la República de Corea (RoKAF), en aparente respuesta a una serie de pruebas armamentísticas realizadas este año por su rival Corea del Norte.
Corea del Norte ha realizado seis pruebas de misiles en lo que va de año, la mayoría de ellas con misiles de crucero que normalmente vuelan a baja altura para superar las defensas antimisiles del rival. Los analistas afirman que, en caso de conflicto, Corea del Norte pretende utilizar misiles de crucero para atacar portaaviones estadounidenses, así como bases militares norteamericanas en Japón.
La RoKAF dijo en un comunicado que en el ejercicio del viernes participaron cazas furtivos F-35A de quinta generación de ambos países y otros cazas surcoreanos, añadiendo que los F-35A estadounidenses fueron desplegados en Corea del Sur el miércoles lunes desde la base aérea de Kadena en Okinawa, Japón.
Corea del Norte ha intensificado sus pruebas armamentísticas desde 2022, en lo que los expertos califican de intento de aumentar su influencia en la futura diplomacia. Corea del Sur y Estados Unidos respondieron ampliando los ejercicios y entrenamientos militares trilaterales con la participación de Japón.
Al margen de una reunión del G20 celebrada el jueves en Río de Janeiro, altos cargos diplomáticos de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón acordaron reforzar su capacidad de respuesta conjunta frente a las crecientes amenazas nucleares de Corea del Norte y coordinar un esfuerzo conjunto para bloquear la financiación por Corea del Norte de su programa nuclear, según el Ministerio de Asuntos Exteriores surcoreano.
Se espera que este año Corea del Norte intensifique sus actividades de ensayo y su retórica beligerante, a medida que se acercan las elecciones tanto en Estados Unidos como en Corea del Sur. Es probable que Corea del Norte busque el reconocimiento internacional como Estado nuclear, un estatus que, según los expertos, le ayudaría a librarse de las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos.
El avance del arsenal nuclear norcoreano ha reforzado probablemente su posición, y preocupa que el Norte pueda lanzar una provocación militar limitada contra el Sur. Los observadores afirman que es improbable un ataque a gran escala, ya que el Norte está superado en armamento por las más superiores fuerzas estadounidenses y surcoreanas.
Funcionarios estadounidenses y surcoreanos han advertido en repetidas ocasiones de que cualquier ataque nuclear norcoreano contra ellos supondría el fin del gobierno norcoreano dirigido por Kim Jong Un.
Fernando Valduga