Ucrania destruye el nuevo complejo antidrones ruso «Zafiro» en Kursk.

Las Fuerzas de Operaciones Especiales de Ucrania (SSO) han destruido con éxito el último sistema ruso de guerra electrónica (EW), «Sapphire», en la región de Kursk, según un comunicado de las SSO en Telegram.

«Los operadores del SSO de Ucrania atacaron y destruyeron el complejo ruso de guerra electrónica ‘Zafiro’ en la región de Kursk», reza el pie de foto del vídeo publicado. Los militares ucranianos identificaron el complejo electrónico ruso durante una misión de reconocimiento en territorio controlado por Rusia cerca de Kursk.

Los daños fueron causados por drones de ataque que destruyeron el sistema de misiles antiaéreos «Zafiro». «El enemigo también sufrió bajas, con muertos y heridos», informó el SSO, sin especificar las cifras exactas.

Un vídeo capturado por un dron, que no puede verificarse de forma independiente, mostraba los daños infligidos al sistema antiaéreo ruso. Sin embargo, la mala calidad de las imágenes dificultó la identificación específica del sistema de guerra electrónica atacado.

En el vídeo se puede ver a soldados rusos intentando evacuar a sus compañeros heridos, aunque es difícil determinar el número exacto de bajas.

En julio de 2023, la agencia estatal rusa TASS informó de que las fuerzas rusas habían utilizado por primera vez el nuevo sistema de guerra electrónica «Zafiro» en la zona de combate en Ucrania. A pesar del ataque, la agencia de noticias rusa anunció que «el complejo funcionó muy bien; las tropas no continuaron sus misiones sin él».

Al parecer, el sistema de guerra electrónica «Zafiro» se utilizó para proteger a las unidades de ingenieros rusos que construían nuevas trincheras contra las operaciones de drones ucranianos en el campo de batalla.

En aquel momento, los medios de comunicación rusos afirmaron que el «Sapphire» podía contrarrestar todo tipo de drones. Al detectar una amenaza, el sistema podía clasificar instantáneamente el tipo de dron y evaluar el nivel de peligro. A continuación, el complejo de guerra electrónica emitía una alarma y comenzaba a «interferir» el dron enemigo. Según el fabricante, el «Sapphire» podría detectar y clasificar drones a una distancia de hasta 30 kilómetros y contrarrestarlos a una distancia de hasta cinco kilómetros. Fuentes rusas también afirmaron que el sistema podía interferir las estaciones de control de drones en tierra.

El «Sapphire» se basa en el chasis de un autobús civil Mercedes-Benz Sprinter, aunque puede instalarse en otros chasis especializados. Está equipado con un característico mástil telescópico con numerosas antenas omnidireccionales, y el puesto de mando se aloja en el mismo vehículo que los componentes de hardware.

Rudis03ARG