Un avión AC-130J de EE.UU. destruye un «pesquero» durante unas maniobras en el Mar de China Meridional.
Un vídeo publicado recientemente por el Departamento de Defensa de Estados Unidos muestra a un AC-130J Ghostrider, perteneciente a la 27ª Ala de Operaciones Especiales, de la base aérea de Cannon, Nuevo México, atacando a un buque objetivo cerca de Lubang, Filipinas, el 30 de abril de 2024.
Las imágenes muestran varios disparos que impactan en la superficie del agua, seguidos de una explosión; se puede ver cómo el buque se hunde y el AC-130J sobrevuela la zona.
El suceso tuvo lugar durante un ataque litoral marítimo, parte de Balikatan 24, un ejercicio anual entre las Fuerzas Armadas de Filipinas y el ejército de Estados Unidos “diseñado para fortalecer la interoperabilidad bilateral, las capacidades, la confianza y la cooperación construidas a lo largo de décadas de experiencias compartidas”.
La iteración de este año se centra en operaciones combinadas y conjuntas en todos los dominios a lo largo de más de 1.000 millas de territorio filipino durante 16 días, con la participación de más de una docena de unidades de toda la fuerza combinada. El objetivo es adiestrarse en “complejas operaciones de defensa litoral y costera para asegurar y proteger el terreno marítimo, las aguas territoriales y los intereses de la zona económica exclusiva de Filipinas”.
Un “caso de uso” interesante
La elección de un pequeño pesquero como objetivo es notable porque pone de relieve el uso estratégico que hace China de los pesqueros para hacer valer sus reivindicaciones marítimas, una táctica que ha suscitado el escrutinio de los analistas militares, en el escenario del Mar de China Meridional, donde China reclama la soberanía sobre casi todo el Mar de China Meridional basándose en registros históricos, mientras que Filipinas impugna estas reivindicaciones y afirma su propia soberanía sobre determinadas zonas basándose en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (CNUDM).
La disputa gira en torno a reivindicaciones territoriales contrapuestas sobre varias islas, arrecifes y aguas de la región, y se ha intensificado debido a la construcción por parte de China de islas artificiales e instalaciones militares en las aguas en disputa.
Los pequeños buques pesqueros se consideran cada vez más amenazas no convencionales y podrían utilizarse para llevar a cabo tareas secundarias de combate, como vigilancia, reconocimiento y apoyo logístico, para favorecer los intereses estratégicos de China en el mar.
Las cañoneras como el AC-130J no están pensadas para misiones de hundimiento de buques, ya que aviones tripulados como el F-16 o no tripulados como un Reaper serían más adecuados para tales tareas. Sin embargo, considerando el papel que podrían desempeñar en el combate litoral, han empezado a entrenarse en este tipo de misiones desde la iteración del ejercicio BK del año pasado.
AC-130J
El AC-130J Ghostrider es un cañonero de 5ª generación que ha sustituido al AC-130W, AC-130U y AC-130H.
Se trata de una variante muy modificada del avión C-130J, que incorpora tecnologías y capacidades avanzadas adaptadas a las misiones de operaciones especiales. Entre las mejoras más destacadas se incluyen un moderno puesto de vuelo para dos pilotos con aviónica digital totalmente integrada, sistemas duales de navegación inercial acoplados a GPS y el paquete Precision Strike Package. Este paquete incorpora una consola de gestión de misión, un robusto conjunto de comunicaciones, dos sensores electro-ópticos/infrarrojos, un avanzado equipo de control de fuego y la capacidad de lanzar municiones guiadas de precisión. El sistema de gestión de misiones integra a la perfección información sobre sensores, comunicaciones, medio ambiente, orden de batalla y amenazas para proporcionar una visión operativa completa.
El AC-130J es el avión más fuertemente armado de la historia, equipado con una variedad de potentes armas, incluyendo un cañón entrenable GAU-23/A de 30 mm y un cañón de 105 mm junto con puntos duros en sus alas para ocho GBU-39 o misiles AGM-114 Hellfire.
Este diverso arsenal de armas permite al AC-130J atacar objetivos con precisión y eficacia, especialmente en condiciones meteorológicas adversas o con poca luz. En general, puede desempeñar un papel fundamental en el apoyo a las operaciones terrestres, proporcionando apoyo aéreo cercano a las tropas en contacto, realizando misiones de reconocimiento armado y atacando objetivos enemigos.
El AC-130J emplea un enfoque táctico único cuando utiliza sus cañones: la aeronave gira constantemente a la izquierda sobre la zona objetivo y utiliza sus cañones de disparo lateral para atacar objetivos terrestres con eficacia. Esto permite al avión mantener una trayectoria orbital constante alrededor del objetivo mientras utiliza sus cañones para disparar de forma precisa y sostenida.
Los sofisticados sensores y sistemas de puntería del AC-130 permiten una puntería precisa: la tripulación a bordo del avión coordina para ajustar la trayectoria de vuelo de la aeronave y los ángulos de disparo, garantizando que los cañones se dirijan eficazmente hacia los objetivos previstos en tierra.
Historia operativa
Las pruebas de desarrollo y la evaluación del AC-130J finalizaron en junio de 2015, y la capacidad operativa inicial se alcanzó en 2017. Está previsto que el avión alcance su plena capacidad operativa en 2025. El 73º Escuadrón de Operaciones Especiales, el primer escuadrón AC-130J, se estableció en Hurlburt Field, Florida, el 23 de febrero de 2018. El Mando de Operaciones Especiales de las Fuerzas Aéreas (AFSOC) recibió su 31º y último AC-130J en la base aérea de Cannon en noviembre de 2022.
El 21 de noviembre de 2023, se observó AC-130J Ghostrider (s/n 18-5886) en línea durante ataques aéreos contra un grupo insurgente responsable de un ataque con misiles contra personal estadounidense y de la Coalición en la base aérea de Al Assad en Irak. Este despliegue del AC-130J Ghostrider fue una respuesta directa al ataque, con el resultado de varias bajas insurgentes y al menos tres bajas enemigas confirmadas.
El AC-130J también está equipado con aviónica avanzada y conjuntos de sensores, incluyendo sensores infrarrojos y electro-ópticos, radar y sofisticados sistemas de comunicación. Estas capacidades permiten a la tripulación localizar y atacar objetivos con precisión, al tiempo que proporcionan conocimiento de la situación en tiempo real a las fuerzas terrestres.
David Cenciotti
Un interesante ejercicio de propaganda. En la guerra del golfo un AC-130 fue derribado por un SA-7. En la guerra de Vietnam se perdieron varios AC-130 por misiles y cañones antiaéreos, por eso las armas de los AC-130 aumentaron de calibre (y alcance). Los AC-130 serían vulnerables en una guerra con China. Eso no quita que cada uno se vende para conseguir presupuesto.
El AC-130 es un avión lento y vulnerable. China todavía tiene que demostrar la capacidad y calidad de sus armas.
Paco. En la guerra de Vietnam, Los AC-130J carecían de un control de fuego automático con cámaras telescópicas y de estabilizadores con giroscopio para sus armas.
Por un lado, no son un avión de ataque, son de apoyo aéreo “cercano”, por el otro, con esto, demuestra que tiene capacidades para destruir objetivos en zonas con denegación aérea contra el enemigo.
A una altura de 24.600 pies, las tropas enemigas en tierra o en mar, apenas tendrían armamento para alcanzar al avión, ningún MANPAD chino o ruso, supera los 19.600 pies y los cañones L/60 Bofors 40 mm, desde el techo de vuelo de la aeronave, tienen un alcance de al menos 11 mil metros.