Cazas rusos y sirios realizan una patrulla conjunta a lo largo de la frontera de Siria con Israel.

Aviones de guerra rusos y sirios han realizado hoy patrullas conjuntas a lo largo de las fronteras de Siria, iniciando lo que, según el Ministerio de Defensa ruso, será una serie regular de vuelos. Los aviones de combate sirios se unieron a los cazas, aviones de ataque y aviones de radar rusos, en una misión que los llevó en parte a un curso provocativo que incluyó bordear los Altos del Golán, en lo que parece haber sido una señal muy deliberada para Israel, que ocupa esta región estratégicamente importante.

En la primera misión conjunta de patrulla aérea de este tipo anunciada por el Ministerio de Defensa ruso participaron cazas MiG-23 Flogger y MiG-29 Fulcrum de las Fuerzas Aéreas sirias, junto con aviones de ataque Su-34 Fullback y cazas polivalentes Su-35 Flanker y aviones de alerta temprana y control aéreo A-50 Mainstay. La flota siria de MiG-23, muy mermada, sólo se ve en acción en contadas ocasiones, tras años de actuación en la actual guerra civil del país, mientras que los MiG-29 sirios, a pesar de su aspecto, han sido modestamente actualizados y se han utilizado más últimamente. Todos los tipos rusos han sido desplegados en Siria regularmente desde septiembre de 2015.

Según el Ministerio de Defensa ruso, citado por la agencia estatal de noticias TASS, los aviones rusos partieron de su centro principal en la recientemente ampliada base aérea de Jmeimim, en la provincia occidental siria de Latakia, mientras que los aviones sirios operaban desde los aeródromos de Seikal y Dumayr, en las afueras de Damasco.

Juntos, los aviones volaron a lo largo de los Altos del Golán, ocupados por Israel, y sobre el norte de Siria, incluido el río Éufrates. Los Altos del Golán, de gran tensión, sirven de línea de armisticio con Israel, que también está llevando a cabo una campaña de ataques aéreos contra objetivos en Siria, principalmente relacionados con presuntas posiciones iraníes y de Hezbolá.

«Durante la misión de patrulla, los pilotos sirios controlaron el espacio aéreo y proporcionaron cobertura a los cazas, mientras que las tripulaciones rusas practicaron ataques contra objetivos terrestres», especificó un comunicado del Ministerio de Defensa ruso, citado por la agencia de noticias Interfax. El comunicado añadió que los pilotos sirios practicaron el ataque a objetivos con misiles aire-aire, mientras que sus homólogos rusos atacaron objetivos terrestres en un campo de entrenamiento en el centro de Siria.

«Los pilotos de los dos países desarrollaron habilidades para la cooperación en diversas situaciones», añade el comunicado. «Este tipo de misiones conjuntas tendrán lugar ahora de forma regular».

«Los vuelos se llevaron a cabo a lo largo de los Altos del Golán, en la frontera sur de la República Siria», dijo Alexander, el comandante de la unidad de Su-34, a TV Zvezda, la televisión oficial del Ministerio de Defensa ruso. «Hoy, por primera vez, hemos volado en formaciones de combate unificadas y hemos establecido una interacción con los pilotos de la República Árabe Siria. Nos entendemos perfectamente».

Las fuerzas rusas están presentes en Siria desde 2015, cuando Moscú lanzó su intervención en la guerra civil del país a favor del presidente Bashar Al Assad. Desde entonces han permanecido en acción, operando principalmente desde Jmeimim, pero también desde otras bases del país, como el aeropuerto de Qamishli, en el noreste de Siria. Recientemente, la base aérea de Tiyas (también conocida como T-4), en la gobernación central de Homs, ha comenzado a recibir más aviones de combate rusos, en forma de MiG-29SMT Fulcrum, aunque no está claro si permanecerán aquí de forma más permanente.

Aunque la aviación rusa sigue apoyando a las fuerzas de Assad, la misión de hoy en los Altos del Golán parece haber tenido como objetivo dar una señal de intenciones a Israel.

Aunque las fuerzas israelíes tomaron el control de los Altos del Golán durante la Guerra de Yom Kippur de 1973, se retiraron de una zona de amortiguación como parte de un acuerdo respaldado por la ONU en 1974. La Fuerza de las Naciones Unidas de Observación de la Separación (FNUOS) había mantenido fuerzas en la zona para supervisar el acuerdo de alto el fuego, pero esos elementos fueron atacados por los terroristas del ISIS en 2014 y varios puestos fueron abandonados.

Desde entonces, Assad ha intentado recuperar el control de partes de la zona desmilitarizada mantenida por la ONU, e Israel protestó en el pasado ante las Naciones Unidas por el traslado de tanques, artillería y otras armas pesadas a la zona de amortiguación, en violación del alto el fuego.

En septiembre de 2017, Israel informó del derribo de un avión no tripulado perteneciente al grupo militante libanés Hezbolá, respaldado por Irán, que sobrevolaba los disputados Altos del Golán. Dos meses después, un Patriot israelí hizo volar uno de los aviones no tripulados del régimen sirio en la misma zona general.

Israel derribó un avión de combate sirio Su-22 Fitter con un par de misiles tierra-aire Patriot, a lo largo de la frontera con Siria, en julio de 2018, al parecer después de que volara más de una milla en territorio israelí cerca del Golán.

En 2019, el entonces presidente Donald Trump declaró que Estados Unidos era el primer país en reconocer los Altos del Golán como parte de Israel. Sin embargo, los 28 estados miembros de la Unión Europea, a su vez, declararon que no reconocen la soberanía israelí, y el estatus de la zona sigue siendo controvertido, ya que la mayoría de la comunidad internacional considera que el Golán es territorio sirio bajo ocupación israelí. Ahora, bajo el mandato del presidente Joe Biden, la postura de Estados Unidos sobre el Golán es menos clara; el secretario de Estado Antony Blinken, por ejemplo, señaló el año pasado que el territorio es importante para la seguridad de Israel, pero no llegó a reconocerlo plenamente.

Más recientemente, los tanques israelíes habrían efectuado disparos de advertencia a lo largo de la frontera siria en los Altos del Golán en respuesta a lo que, según Israel, eran varias figuras sospechosas en las inmediaciones de una unidad de las Fuerzas de Defensa de Israel. Según el ejército israelí, las figuras sospechosas ocupaban «puestos militares» y posteriormente huyeron a territorio sirio.

Aunque no sabemos dónde tendrán lugar las futuras misiones conjuntas ruso-sirias, la actividad de hoy podría indicar que Assad espera que la combinación de sus fuerzas con la potencia aérea rusa demuestre su determinación sobre los disputados Altos del Golán. Por otra parte, Rusia se ha resistido hasta ahora a actuar realmente en nombre de Assad ante la agresión israelí.

Moscú no acudió en ayuda de Assad con sus defensas aéreas en Siria después de que Israel supuestamente atacara el puerto de Latakia recientemente, continuando la política rusa de no contraatacar los ataques aéreos israelíes. Teniendo esto en cuenta, también es posible que la misión de hoy y cualquier otra que le siga tenga como objetivo principal reducir las tensiones que muy probablemente existen entre Assad y Rusia por esta política continua de inacción.

Sin embargo, con los aviones de combate de la Fuerza Aérea israelí operando sobre Siria, la presencia de patrullas conjuntas ruso-sirias podría al menos hacer reflexionar a Israel, o al menos dificultar su capacidad de atacar objetivos de oportunidad, especialmente si las misiones conjuntas de los cazas de defensa aérea se convierten en una característica más regular del conflicto.

Thomas Newdick