Lo que los submarinos de Suecia aportan a la OTAN.
Cuando Suecia entre a formar parte de la OTAN, ayudará a la alianza a reparar su vulnerabilidad en el noroeste de Europa: el mar Báltico, una vía fluvial compartida con Rusia que constituye un cuello de botella para el acceso a los puertos de ocho Estados, entre ellos Alemania.
La clave de Suecia para mantener las aguas navegables en caso de conflicto es su flota de submarinos líder en el mundo, que según los analistas cuenta con algunos de los submarinos convencionales más avanzados jamás construidos.
«La flota submarina sueca está bien preparada para este entorno y contribuirá en gran medida a las capacidades submarinas generales de la OTAN en el Báltico», declaró a Reuters un funcionario de la OTAN.
El Báltico, llamado «pradera inundada» por algunos en los círculos marinos, tiene una profundidad media de unos 60 metros, lo que lo hace demasiado poco profundo para los submarinos de propulsión nuclear que componen la mayor parte de la flota submarina rusa y toda la de Estados Unidos.
Suecia tiene tres submarinos avanzados de la clase Gotland y un modelo más antiguo que se retirará cuando se entreguen dos buques de nuevo diseño A26 en 2027 y 2028, con lo que tendrá cinco a finales de la década.
P: ¿Por qué son tan fuertes los suecos?
La experiencia. Suecia lleva operando submarinos en el Báltico desde 1904. Ninguno de los países vecinos ha sido tan activo bajo el agua como los suecos.
«Tenemos experiencia regional, lo que llena un vacío, experiencia que la OTAN no tiene», dijo el Comandante de la Flotilla de Submarinos Fredrik Linden.
El Báltico es también una vía fluvial compleja: Con muchos ríos que lo alimentan, sus niveles de salinidad varían mucho. Esto cambia tanto la flotabilidad de un submarino como la forma en que el sonido viaja bajo el agua, y se necesitan conocimientos locales para navegar con éxito.
Los submarinos suecos pueden permanecer sumergidos durante semanas.
Mientras están sumergidos, los submarinos convencionales funcionan con baterías. La mayoría necesitan volver a la superficie al cabo de un par de días para que sus motores diésel puedan funcionar y recargar las baterías.
Pero los submarinos suecos tienen oxígeno líquido almacenado en tanques a bordo para hacer funcionar los motores diésel bajo el agua y recargar las baterías, de modo que pueden permanecer sumergidos más tiempo y reducir el riesgo de detección.
P: ¿Cómo ayudarán en el futuro?
En 30 o 40 años, o quizá antes, la guerra submarina será probablemente autónoma, afirma Sebastian Bruns, investigador principal del Instituto de Política de Seguridad de la Universidad de Kiel. En previsión de ello, Suecia ha encargado dos nuevos submarinos, cuya entrega está prevista para 2027 y 2028.
Conocidos como A26, los buques construidos por SAAB Kockums serán más grandes y versátiles que los Gotland y tendrán una característica única: una esclusa de inmersión de 1,5 metros de diámetro, llamada portal multimisión, en la proa.
Esto permitirá entrar y salir fácilmente a vehículos operados por control remoto (ROV), vehículos autónomos o grupos de submarinistas. Según Bruns, esto hace que el submarino sea ideal para la guerra en el fondo marino, por ejemplo, la protección o destrucción de oleoductos u otras infraestructuras críticas en el lecho marino.
«La guerra en el lecho marino es el tema más candente ahora mismo en los círculos navales», afirma Bruns, en referencia a las explosiones de 2022 que destrozaron los gasoductos Nord Stream que discurren bajo el Báltico.
Los ROV pueden realizar tareas como recuperar o colocar objetos en el lecho marino, escanear grandes áreas o colocar o destruir minas. También pueden sumergirse a mayor profundidad que los submarinos normales.
Johan Ahlander
Los submarinos suecos son de lo mejor a nivel silencio…. en unas maniobras de la OTAN hubieran dañado mucho un portaaviones de EE.UU de la clase Nimitz, nadie de la escuadra de combate fue capaz de detectarlo y se puso a distancia de tiro del portaaviones.
Las malas lenguas dicen que el Kurst fue hundido por un torpedo de un submarino sueco.
No había oído ese mito. Un submarino puede ser silencioso pero atacar es otra historia empezando porque la presencia de torpedos delatan al atacante. Aparte dudo que un único torpedo pueda hundir a poca profundidad al menos una mole como los Oscar-II, con 11.000t de desplazamiento y una reserva de flotabilidad muy superior a cualquier otro submarino a excepción de los Typhoon. La misma Rusia ha reconocido que el submarino se perdió por la detonación de un torpedo defectuoso en su interior.
Ciertamente los buques clase Gotland son quizá los más silenciosos de todos los submarinos convencionales del mundo. Esto se debe a las particularidades del medio en que deben desenvolverse (escasa profundidad, salinidad variable, ambiente brumoso, etc.) y el ingenio de los suecos, que obligaron a sus diseñadores a recurrir recursos tecnológicos reservados a los SSN, como amortiguadores de goma para su aparato motor para reducir vibraciones, recubrimiento anecoico compuesto e incluso interfridores electrónicos de baja frecuencia para reducir su campo magnético. Incluso el diseño hidrodinámico del casco y la vela están pensados para incrementar la futividad, incluyendo IR y visual, en un tamaño compacto y dimensiones contenidas.
El motor no es lo único que influye en el ruido, pero yo diría que un motor Stirling debe ser más ruidoso que unas baterías de litio. Me refiero a comparar los submarinos suecos con los japoneses con baterías de litio. Yo diría que, en ese apartado concreto, ganan los japos y su litio.
Puede ser, sr. Víctor, pues hay más de 20 años entre los diseños de uno y otro submarinos.
De los nuevos que se construyen en Suecia se dice que van ser excelentes.
(2): El artículo no lo menciona, pero los suecos fueron pioneros en la utilización practica de sistemas AIP. Saab-Kockums ha desarrollado y posee la patente del sistema Stirling, un generador de energía de ciclo cerrado que trabaja por diferencia térmica frío/calor, efectivo y muy silencioso, pero que necesita del almacenamiento interno de oxígeno líquido abordo (además del diésel que usa como combustible). Sus formas especiales, su timón en X y sus hélices diseñadas para rotar a bajas vueltas para evitar la habitación hacen de estos buques unidades muy silenciosas. A mediados de los años 2000 la USN alquiló un buque de esta clase (con tripulación sueca) por dos años para ayudar a desarrollar técnicas de defensa y luchas ASW contra SSK/SSP.
(3): En el marco de estas prácticas, el pequeño tamaño (1500 t), sus buenas prestaciones sumergido y sus características furtivas, permitió su el submarino sueco pudiera «hundir» en varias oportunidades los buques más importantes de la USN, incluyendo superportaaviones nucleares. Queda clara cuan importante puede ser la contribución de los submarinos suecos a la OTAN.
Respecto al tema que si los submarinos japoneses son mas avanzados que los suecos, podemos hacer el siguiente aporte. Los teatros operativos donde deben operar los buques suecos y los japoneses son muy distintos, por lo que sus submarinos difieren, en especial físicamente, aunque también son grandes sus similitudes, en especial tecnológicas, ya que deben superar dificultades comunes. El Báltico es un mar cerrado en el que el sigilo y las CME son fundamentales no sólo para atacar, sino esencialmente para sobrevivir a cualquier respuesta, no hay profundidad donde refugiarse. El océano Pacífico, en cambio es la masa de agua más grande de la tierra y también la más profunda.
(2): Por ello, los buques suecos son pequeños (1600 t en inmersión la clase Götland y 1900 t los A26) y ágiles, mientras los japoneses son los submarinos convencionales más grandes en servicio (4200 t), aunque tienen velocidad subacuática (unos 20 n) y autonomía (alrededor de 6500 mn) muy similares. Para los japoneses el sigilo es fundamental, así como los recursos de detección y defensivos, ya que estos más que realizar ataques de acecho, en las inmensidades oceánicas deberían atacar rápidamente y huir de la misma manera. Para ello, deben evitar ser detectados en la fase de ataque y poseer recursos defensivos luego del mismo. Además, deberían enfrentarse a los numerosos SNN rusos y chinos, más veloces y de una autonomía mayor aún.
(3): Por ello, los japoneses han recurrido a mantener lo más alto posible el nivel de reserva de potencia, la causa principal del cambio a la tecnología LIB. Los últimos buques japoneses (clases Soryu y Taigei) son tan grandes porque necesitan espacio para que su tripulación, que ha sido reducida respecto de clases anteriores, gracias a la automatización, pueda realizar su trabajo cómodamente en las largas patrullas oceánicas, que incluye el traslado hacia las zonas de operaciones, que podrían estar muy alejadas de sus bases, además de almacenamiento de armas y vituallas.
(4): Su casco es muy robusto, realizado en aceros muy especiales, capaces de descender hasta 650 m de profundidad (recordemos que nuestro malogrado ARA San Juan (S-42), un barco clase TR-1700 de fabricación alemana, colapsó a una profundidad muy inferior). El sigilo, muy importante en las naves suecas, ha sido llevado al extremo en los buques japoneses, ya que han incorporado los más recientes avances tecnológicos, como pisos flotantes y cuidado hasta el más mínimo detalle de supresión sonora. Importantes también son los sistemas defensivos, activos y pasivos de nueva generación, como los interferidores electromagnéticos de baja frecuencia de los buques suecos.
(5): Los nuevos submarinos suecos (A26) también poseeran un compartimiento estanco para UUV, que tanto suecos como japoneses consideran imprescindible para las operaciones submarinas del futuro. Este último elemento será incorporado en las últimas 4 unidades de la clase Taigei, así como un alargamiento del casco, para incorporar celdas VLS para armas adicionales. El motor de ciclo Stirling, es uno de los AIP más extendidos, ya que no sólo lo usan ambos países (en Japón lo fabrica Kawasaki bajo licencia de Cockums) sino también China (clase Yuan) y permite una duración en inmersión, a baja velocidad, variable entre 14 y 18 días.
(6): Los AIP de ciclo Stirling, aunque más simples que los del tipo Celdas de Combustible -el otro sistema más extendido-, y muy eficaz por la simpleza de sus combustible/comburente (gasóleo/LOX) tiene desventajas respecto de su firma acústica, ya que posee numerosas partes móviles, además de un volúmen y peso mayores. Otra desventaja inherente es que su funcionamiento resulta ineficaz a profundidades superiores a 200 mts. Es por ello que tanto suecos como japoneses han desarrollado recursos técnicos para reducir vibraciones al máximo e impedir que las ondas sonoras puedan escapar fuera del casco.
(7): Las baterías de Ión-Litio, de las que los japoneses son pioneros (secundados por los coreanos), a pesar de tener verdaderos riesgos que hay que prever (arden en forma instantánea en presencia de agua, con una temperatura muy cerca a a los 3000 grados centígrados a una velocidad de milisegundos), poseen ventajas ineludibles respecto de las baterías de plomo-ácido. Tienen menos de la mitad de peso, ocupan la mitad de espacio, duran más del doble de tiempo y se cargan mucho más velozmente. Los japoneses han reemplazado los sistemas AIP por LIB en las dos últimas unidades de la clase Soryu y las tres primeras de la clase Taigei y pareciera que esta fórmula (motores diésel de baja sonoridad y LIB) se mantendrá en el resto de los subs japoneses.
(8):Podemos concluir que, mientras los buques japoneses y suecos difieren en tamaño, tecnológicamente parecieran conducirse por los mismos senderos, aplicando la máxima tecnología en supresión sonora, instrumentos de detección (por ej. sonares avanzados, fijos y rastreros y mástil optrónico sigiloso), así como sistemas defensivos (supresores magnéticos, señuelos antitorpedos, etc.), que los igualaría técnicamente. De todas maneras, aunque similares y exponentes máximos de la tecnología submarina convencional, las unidades de ambos países son asimismo exponentes máximos de adaptación a un teatro operativo: los suecos en mares restringidos y poco profundos, mientras los japoneses son buques oceánicos.